16 parte 2: Lagunas rosas y Flores sonrojadas.

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—Pasemos a lo importante —intervino Blass, cortando la incipiente discusión—, debemos pensar cómo recuperar el Fuego Negro.

Ornella y Bastián se miraron desconcentrados.

—Creí que lo sabían —comenzó a hablar Ornella—, vimos cuando estaban llegando.

—Estaban ahí, del otro lado del pedestal donde se encontraba.

Hablaron a la vez, era difícil entenderlos.

—Bastián cierra el pico, Ornella empieza desde el principio —dije con autoritarismo.

—Hablen de a uno y desde el inicio —dijo Blass.

Yo estaba tensa, el Pajarraco estaba tenso, el aire estaba tenso. Ornella estaba seria y Bastián nos miraba con desconfianza.

— ¿Cómo se llama tu mascota imaginaria? —le preguntó el Lobo a Blass.

— ¿Qué mascota imaginaria? —Pregunté— ¿Por qué estás haciendo pregunta sin sentido?

—Desconfía de nosotros Chispita —respondió Blass— Smeshnoy, ¿Qué te hizo desconfiar hermano?

—Los vimos en la cueva donde estaba el Fuego —replicó el Lobo.

—Eran y no eran ellos —dijo Ornella con la mirada pérdida concentrada en recordar algo.

— ¿Qué? —respondimos todos al unísono.

—No estoy segura si eran realmente ellos o una proyección de ellos, me llamó la atención que no nos respondieran, ni siquiera con una seña. Era casi como si la cueva nos mostrara que otros estaban buscando lo mismo que nosotros, y además, que estaban cerca de encontrarlo.

—Paren un minuto y comiencen desde el principio.

—Llegamos al lago Hillier en la isla Middle, tal como nos dijo el Djinn, estaba la cueva escondida, Bastián quiso entrar primero y se dio en la cara contra una puerta invisible —Ornella subió involuntariamente la comisura de sus labios—. Desactive la cerradura con magia y comenzamos a bajar —suspiró—. Al principio sentíamos resistencia en los pies, igual que cuando caminas por la orilla del mar o de un lago. Esa resistencia se fue haciendo cada vez mayor, nos llegaba a la altura de las rodillas, luego a la cadera, cuando llego al pecho supusimos que teníamos un problema. Pero no había líquido alguno, no mojaba ni sonaba como líquido. Cuanto más profundo en la cueva íbamos, a mayor altura nos llegaba el líquido y era mayor la dificultad para seguir andando. La pregunta era ¿Podríamos respirar bajo el «líquido» invisible?

Ella negó con la cabeza y prosiguió con su relato.

—Lo averigüé de forma sencilla, pero a nuestro nuevo compañero de equipo le dio un ataque de caspa porque me zambullí al supuesto líquido e intenté respirar, para sorpresa de ambos y consternación del Lobo, respiré normalmente. Solo tenía la consistencia, la textura y se sentía como un líquido, pero no estaba ahí.

Bastián rechinaba los dientes, Ornella sonreía ampliamente.

—La cuestión es que terminamos nadando en aire, que parecía agua y que se podía respirar sin dificultad, fue genial, exploramos las diferentes cuevas que nos íbamos encontrando por el camino. Recolectamos piedras preciosas de todo tipo color y tamaño. Nos llevo alrededor de seis horas llegar a la caverna correcta. Una vez dentro de la caverna donde se encontraba el Fuego Negro, nadamos hacia él, los vimos acercándose, gritamos sus nombres. Sacamos las bolillas-agujeros negros del bolsillo, abrimos una y lo contuvimos. Acto seguido una fuerza desgarradora nos llevo al punto de inicio, tan rápido y a la vez tan lento que pareció que tardamos toda una vida en volver.

Mi boca estaba abierta, y mi expresión era un reflejo de la del Pajarraco, pura sorpresa.

—Una vez que llegamos de nuevo al lago —continuó Bastián—, lo primordial era salir lo más rápido posible de ahí. Empezamos a caminar, sin un rumbo fijo —su rostro se endureció—, nos siguieron un par de bandidos. En resumen, la pelea fue brutal, y le debo mi vida a Ornella.

—No es nada —respondió la susodicha.

— ¿Te parece que mi vida no vale nada pequeña Flor? —preguntó levantando una sus cejas, era obvio que quería aligerar el ambiente.

— ¡NO QUISE DECIR ESO! —gritó escandalizada con la cara de un agradable color purpura, si seguía así terminaría con la cara del color del arcoíris.

Todos comenzamos a reírnos, aunque la risa del Pajarraco era algo forzada, cuando Ornella se calmo lo suficiente continuo.

—Con el equipo de trabajo no llevamos la cuenta de cuantas veces nos salvamos la vida unos a otros.

—No sabía que eras tan buena usando tus hachas, tus cuchillos y todas tus armas.

—Gracias. Cambiando de tema, en resumen tenemos el Fuego Negro, ya es hora de volver a taller y comenzar a trabajar.

—Todavía no, primero debemos asegurarnos que hay terminado la auditoría y no hayan dejado ningún artefacto que pueda espiarnos —acote—. Mi nivel de paranoia está rivalizando con el de Claus.

Bastián sacó su teléfono celular y llamo al Taller,

—Hola, ¿Cómo están? —respondió la voz de Stella, hubo un cambio casi imperceptible en Bastián, la comisura de su boca se elevó apenas dos centímetros y su expresión se suavizó, pobre Lobito, estaba idiotizado con mi amiga, iba a ser interesante de observar.

—Bien, por acá todo normal, estamos todos bien.

Si no empezaban a hablar de algo serio pronto, le sacaría el teléfono y hablaría yo con Stella, pensándolo bien, no era necesario esperar.

—Dame eso —dije y le quité el teléfono de la mano— Hola, Estrellita ¿Cómo están las cosas por allá? ¿El Tío ya volvió a su casa?

—Sí, ya se fueron y peinamos todo. No hay rastros de nada raro o que hayan dejado ningún hechizo, ya es hora que vuelvan a casa.

—Espero verlos lo antes posible, pero todavía no estoy en forma para llegar a Belice con compañía.

—Les tocará viajar como las personas normales, en avión.

— ¿Dónde está nuestro contacto más cercano?

—Están de suerte, en el aeropuerto de Sídney. Hazme el favor de enviarles mis saludos a Tomas, se extraña por el taller.

—No sabía que Tomas estaba acá, que bueno volver a verlo.

—A él seguro que le encantará volver a verte —acotó Ornella.

— ¿De qué estás hablando Orne?

—Nada, nada.

XOXOXO

Espero les guste esta parte del capítulo 16, hay otra parte, ya está escrita, en la semana la espero subirlo.

Cualquier duda comenten, y si les gusto voten la historia.

Muchas gracias por leerme, nos leemos luego

       Yoyo.

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⏰ Last updated: Jul 20, 2019 ⏰

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Estrellas Fugaces y Fuego NegroWhere stories live. Discover now