***-**19

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Salí del colegio casual, como siempre lo hacía, con audífonos puestos, con celular en el bolsillo y con unas cuantas monedas para el bus, desearía que algo me hubiera obligado a dejar mis audífonos en casa, ya van a leer porqué...

Siempre para ir a casa tomo dos buses, pero ese día logré coger uno que me llevaba directo a casa, cosa que me resultaba conveniente, de hecho fue muy conveniente...
Llegué a mi parada, todo normal, como siempre. Habia una calle entre mi casa y de donde me encontraba, había cruzado esa calle unas mil veces cosa que había causado una especie de confianza en que lo iba a lograr siempre. Mis audífonos a todo volumen no me permitieron escuchar lo que se avecinaba.... Di un total de dos pasos en la calle cuando un auto me embistió y me arrojó a unos cuantos metros de donde estaba, acabé todo ensangrentado y malherido frente a mi hogar, el que me vio crecer y el que ahora me ve morir.....si tan solo hubiera escuchado al auto venir y si tan solo el conductor no hubiera estado borracho, yo seguiría aquí con vida. Después del impacto tuve unos segundos de lucidez antes que mi memoria se desvanezca y mi corazón deje de latir... en esos segundos pensé en mi familia y el miedo a la muerte que poseía....Haz una imagen mental de todo esto e imagina que ahorita acabo de dar mi último aliento..

El último recuerdo que tengo es algo confuso. Para mi siempre era costumbre mirar a las placas de los carros cuando se acercaban y retenía los números y letras por un momento en mi cabeza, pero esta  vez no pude, lo único que recuerdo es el número 19 al final de la serie numérica..

Siempre me había preguntado que se siente morir, y ese día lo supe...morir es pasar de un estado de dolor a la paz más grande que puedas imaginar, en mi caso sentí mucho dolor por unos segundos, miré hacia la otra vereda pensando en mi familia y derepente mi mirada se desvaneció en un fondo blanco, en mi opinión el blanco más perfecto que había visto. Habia salido de mi cuerpo, pude ver mi ser botado en el suelo, un charco de sangre a mi alrededor y al desgraciado, que iba ebrio un miércoles por la tarde en el volante, desentendido de lo que había pasado..

La gente se acercó a ver que pasaba, todos estaban gritando y asustados, todo ese ruido causó que la gente salga a la calle a ver que pasó y entre esas personas salió mamá...

La vida sigueWhere stories live. Discover now