Capitulo 25

6.3K 348 9
                                    

Helloo!♥ que tengan un buen fin de semana:) espero les guste el capitulo, voten y comenten porfavor! subire un Maraton cuando la novela llegue a 1k likes

▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼

Narra Hayes

Se dio la vuelta y se encaminó hasta el baño para arreglarse. Me senté en la cama mientras esperaba y todo apenas me hacía temblar un poco; la idea de que ella estuviera allí, y yo estuviera tan cerca de lo que podría ser su cuerpo; pero no era solo un gran cuerpo lo que me atraía tanto hacia ella. Había algo mas allá de eso, mas allá de sus ojos, de sus labios tan atractivos. Quizás era la manera en la que me hacía pensar las cosas mas de una vez; cuando nunca lo eh echo. Me hace querer ver que todas las cosas sean importantes; cuando en realidad nunca lo fueron. No hasta ese momento; cada cosa que decía, la pensaba. Excepto esa maldita apuesta. Lo único por lo cual debía pensar aun que sea un segundo, fue a lo que me cerré y acepté, pero.. ¿es lo que los idiotas hacen? Era un idiota; que no entendía las fases del amor, ni el amor en si mismo tampoco. Pero había algo que me quedaba mas que claro; tenía que fingir no estar enamorado de ella, y no sería una tarea fácil. Estaba seguro que estaba perdiendo la apuesta, como un mal perdedor que siempre fui.
Después de un rato de pensar y pensar, apareció por la puerta. Lucía el uniforme del colegio; le quedaba sensacional. Se había atado el cabello hacía atrás, y se había puesto un poco de brillo labial.
- Te vez hermosa- le sonreí. ¿ estaba metiéndome mucho en el papel de la apuesta, o de verdad se lo quería decir? ¿se daría cuenta, en su inocencia o inteligencia, que mis intensiones no eran perder?
- me veo igual que todos los días- musitó sonriendo.
- Entonces todos los días te vez igual de hermosa- le respondí. Agachó la cabeza algo avergonzada.- Eh.. ¿nos vamos?- pregunté.
- ¿ya? - miré el reloj. Eran las 7:30 y las clases comenzaban a las 8:30. 
- Iremos en moto.. Querida- le sonreí. Ella miró el reloj una vez mas y con penuria su adorada cama; sabría que habría dado algo de dinero por quedarse un rato mas durmiendo.
- ¿Qué escusa le daré a mis padres?- preguntó.
- Que tienes que llegar temprano porque eres parte del comité de limpieza- me encogí de hombros.
- Apuesto a que eso ni siquiera existe- entre cerró los ojos.
- El tiempo se esta agotando cariño, mejor ve a decirle a tus padres.. Yo te esperaré abajo- le sonreí mientras me daba media vuelta y saltaba por la ventana.
<<Moto, moto, moto, moto,moto,moto>> pensé buscando el vehículo por todas partes. No estaba allí. Comencé a sudar un tanto nervioso hasta que recordé donde la había dejado; entonces me dirigí atrás de los arbustos. Allí se encontraba mi adorada moto. 
Me senté un tanto en ella de manera que cuando ____ saliera me pudiera ver.
Pensé en ella; pensé en ella una vez mas, y luego, cuando pensé otra vez, no eran tres veces, si no que eran cien.
<< ¿Qué pensará de ti, querido Hayes?>> me decía a mi mismo en un intento por subir mi autoestima y pasar el rato conmigo mismo mientras las esperaba << seguramente que eres un tipo muy guapo, tierno, increíble.. Si yo fuera ella no te dejaría pasar ni aun que estuviera loca>> repetía, una y otra vez hasta que mis pensamientos eran contrarios; nunca.
- ¡claro que si Hayes! ¡la tienes en la palma de tu mano!- exclamé emocionado después de tantos minutos de halagos hacía mi mismo.
- ¿a quien tienes en la palma de tu mano?- una dulce voz preguntó desde atrás. Me di la vuelta; ____ esperaba una respuesta de brazos cruzados.
- Esta hoja- arranqué rápidamente una del árbol que se encontraba a mi costado y la puse en la palma de mi mano. Lógica razonable.
- ¿nos vamos?- preguntó frunciendo el ceño.
- Sonríe; te vez mas bonita- le dije. Ella negó con la cabeza.- después de ti cariño- se subió lentamente a la moto procurando no hacer nada mal para no caerse. Me subí seguido de ella; lo que resultó algo incómodo porque me tenía que acomodar cuando ella ya estaba allí.
- Finalmente lo logré- le sonreí. Ella seguía con la mirada baja.- Vale ¡era una broma! No pensé que te enfadarías, estaba hablando solo, ni siquiera me refería a ti
- Oh, entonces hay otra chica..- musitó ella lentamente.
- Espera, espera.. Espera… ¿estas celosa?- pregunté. Parecía estar confundido por fuera, pero por dentro, mi corazón solo deseaba que ella dijera con alegría que si.
- ¡claro que no!- exclamó como si fuera obvio- Estamos en una apuesta ¿lo recuerdas? Podrías dejar tu ego contigo mismo para cuando esta apuesta termine
- Lo tomaré en cuente cuando pierdas- musité divertido echando a andar la moto.

I Chose U (Hayes Grier y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora