☀️ Mamá Bum ☀️

Comenzar desde el principio
                                    

  — Pero si no les dices nada las cosas seguirán igual porque ellos creerán que estás bien así, ya que no les has hecho ningún comentario al respecto. — opinó YoungJae, sentándose en la cama para poder ver de mejor manera a JaeBum. — No es egoísta necesitarlos, Bumie. Son tus padres.

JaeBum sonrió levemente, conmovido ante la seriedad con la que YoungJae se tomaba todas y cada una de sus preocupaciones. Siempre buscaba algo que decir o que hacer para hacerlo sentir más tranquilo.

Sigue mirándome así y me olvido de todo, cielo... Pensó JaeBum, sentándose también en la cama para besar a YoungJae. Las cálidas manos de éste le acariciaron de inmediato las mejillas de lado a lado hasta que se perdieron en su cabello. JaeBum decidió profundizar el beso, mordió con suavidad el labio del menor y cuando éste abrió un poco más su boca introdujo de a poco su lengua en ella, degustando del rico sabor a los caramelos que JinYoung le había regalado a YoungJae.

JB volvió a acostarlo en la cama aún entre besos, disfrutando de los lindos sonidos que YoungJae dejaba salir cada que le lamía los labios. Le habría encantado continuar, pero el camino era largo a Incheon y no quería llegar tarde a recibir a su madre.

  — Tengo que irme. — susurró JB contra los labios de YoungJae, los cuales volvieron a besarlo antes de que continuara hablando. Sonrió un poco y le siguió el beso a Jae. — Ya, bebé... — dijo riendo un poco, ya que YoungJae no paraba de robarle besitos. Tan adorable. — Mañana quiero que me des muchísimos besos ¿está bien? Sólo así mi cumpleaños será perfecto.

  — Te daré todo lo que quieras, Bumie. — respondió YoungJae, peinándole el cabello.

  — Cuidado con lo que dices, bebé. — la sonrisita de YoungJae le hizo ver que al parecer sabía muy bien lo que decía. — Oh... travieso.

Las carcajadas de YoungJae no tardaron en resonar en la habitación luego de que JB comenzara a hacerle cosquillas, llenándole de besos el cuello al mismo tiempo que le enterraba los dedos en el abdomen.

  — Ba- basta, Bumie... ¡Bumie! Me haré pis. — ambos rieron antes de darse un último beso.

JaeBum se levantó de la cama y arropó correctamente a YoungJae, sonrió ante la adorable imagen del menor.

  — Te veo mañana, cielo. — besó su frente. — Te amo.

  — También te amo, Bumie. Hasta mañana. Conduce con cuidado.

JB le besó ambas mejillas y salió de la habitación. En la sala de estar sólo quedaba Mark junto a los menores.

  — ¿Ya te vas, hyung? — le preguntó YuGyeom.

  — Sí, iré a recoger a mi mamá al aeropuerto. — respondió tomando su chaqueta del respaldo del sofá. — ¿Dónde está noona y hyung?

  — En la mesa de la cocina.

JB terminó de tomar sus cosas y se dirigió al lugar indicado. Ahí encontró a JaeHyun y YoungSoo bebiendo café.

  — Hyung, noona. Me voy. — dijo parándose en la puerta de la cocina.

  — Oh, JaeBum-ah. — YoungSoo se levantó de su asiento y se dirigió a él. — Gracias por venir y pasar la tarde con YoungJae. 

  — No hay nada que agradecer, noona. Estaré con él siempre que me necesite. — dijo haciendo sonreír a la mayor. — ¿Se quedará por más tiempo, noona?

  — Sí, quizá lo que reste de la semana. No me iré hasta ver que YoungJae está completamente bien. 

  — Claro. ¿Y usted, hyung? — miró a JaeHyun, éste se quitó las gafas con las que leía un libro.

SUNSHINE ☀️ 2JAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora