6. Aquí vamos de nuevo.

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El sexto semestre llegó con bastante prisa a la universidad, sintiéndose en las clases el característico ambiente de estrés entre los estudiantes.

Exámenes, presentaciones y proyectos eran las palabras más comunes que deambulaban por ahí, el típico desorden y ambiente caótico apoderándose del lugar y de sus ocupantes, pero esto sin influenciar de ninguna manera el semblante de la mejor alumna de la carrera.

La rubia mantenía su serenidad como era acostumbrado, en esta situación siendo ella quien ahora esperaba la llegada de su compañera pelirroja.

Ciertamente, era una situación un poco particular, ya que usualmente Tohru llegaba minutos antes de que empiece la clase, ella pensando en ello por momentos y buscando una buena excusa que no exhibiese sus verdaderas intenciones.

– ¿Cómo fue que todo terminó así? –dijo ella suspirando un poco, adentrándose en un recuerdo.

FLASHBACK

Finalmente, luego de varios intentos de Lucoa por contactar a la ahora estudiante de ingeniería, por fin lo había conseguido.

Una vez había acabado el día, ambas se habían reunido en el café donde estaba trabajando la rubia, este cerrado y solo con ellas dos en el interior del establecimiento.

– Me alegro que por fin podamos reunirnos a hablar, ya había pasado un poco de tiempo. –dijo Lucoa sonriendo un poco, Tohru pasando a sentarse con una bandeja y dos cafés.

– Lo siento si no te respondía a veces, he estado un poco ocupada. –añadió Tohru sonriendo un poco, desviando la mirada y bebiendo un poco de su café.

– No me enfadaré porque parece que les fue genial, ¿Viste las estadísticas? No muchos se inscribieron a tu facultad, pero comparados a otros años son muchos más. Me imagino que algo tuviste que ver en eso. –añadió Lucoa animada como siempre, despeinando un poco a Tohru, quien asintió y describió algunas cosas más de lo sucedido en ese día.

La conversación se prolongó por un par de minutos entre diferentes temas, ambas conversando un poco de que había sido de sus vidas o de lo que habían hecho recientemente, hasta que Tohru interrumpió por un momento al pedirle educadamente que cambiasen el tema de charla por un momento.

Lucoa, sé que pasó un poco de tiempo, pero creo que ya tengo una respuesta. –dijo Tohru con seguridad y convicción, esto sorprendiendo un poco a su amiga quien se tomó su tiempo para responder.

– Creo que no te estoy entendiendo, ¿a qué te refieres?

– Recuerdas la última pregunta que me hiciste, ¿Verdad?

– Mmmmm... –dijo ella un poco pensativa, intentando entender lo que su amiga le estaba diciendo– Creo que sé a qué te refieres. Pensé que lo habías olvidado, además que aquella vez me equivoqué mucho en mi deducción. Sé que son buenas amigas actualmente.

– En realidad, te equivocas un poco, es cierto que somos amigas y nos llevamos bien, pero aun así... me gusta Kobayashi. –dijo la joven rubia con bastante ilusión y una sonrisa, su mirada iluminándose simplemente al mencionar aquel nombre.

– Espera... Espera un poco, ¿Lo estás diciendo en serio? –dijo Lucoa al haber escuchado lo anterior, bastante sorprendida de la respuesta a la pregunta que incluso había olvidado, pero aquello refrescándole la memoria.

Amor y universidadWhere stories live. Discover now