El beso del zorro (Narusasu)

Capítulo 3

Lo recibió la oscuridad, no podía ver lo que había a su alrededor, ni siquiera sus propias manos. No escuchaba ningún ruido, ni siquiera el sonido de los tambores que antes atormentaban sus oídos.

Las luces de la habitación se encendieron como arte de magia, Sasuke miro las velas que flotaban alrededor, sus llamas bailaban por el suave viento. Sus ojos se apartaron y capto con atención la cama que se encontraba en medio de la habitación, las sábanas de color carmesí y los pétalos de rosas, le daban mala espina.

"Por favor que no sea lo que estoy pensando"

.- Tienes un olor diferente.-

Sus sentidos se activaron al escuchar una voz desconocida, lentamente puso su mano en la empuñadura de la espada, la espada que utilizó para el ritual todavía estaba con él, algo que agradecía. Escucho con atención los pasos del hombre a su alrededor, lo rodeaban como si fuera una presa que estaba a punto de ser devorado.

El hombre se detuvo enfrente de el, algo que aprovechó y con un rápido movimiento saco la espada de su empuñadura.

El hombre miro la punta de la espada que había aterrizado en su rostro.- Que curioso, es la primera vez que utilizan la espada para algo más.-

Sasuke frunció el ceño.- ¿Quién demonios eres?.-

El hombre sonrió.- Soy Naruto, el demonio zorro.-

Sasuke alzó una ceja, desde su infancia había creído que el zorro era alguien temible, su madre lo describía como un zorro enorme, con nueve colas que destruía todo a su paso, que sus ojos eran rojos como la sangre, pero lo que veía era diferente a las historias que escuchaba.

Este hombre que se hacía llamar el zorro tenía ojos azules, cabello amarillo y tres líneas en cada mejilla, parecido a los bigotes de un gato.

.-Las apariencias engañan.-

Sasuke estuvo de acuerdo, pero aun así no se movió.

Naruto sonrió.- Sabes que matarme, hará que tu nación quede en ruinas de nuevo ¿Verdad?.-

El azabache bajo el arma.- Si te quisiera matar, ya lo hubiera hecho.-

.-Si bueno, tampoco hubiera servido ya que soy inmortal.-

Sasuke guardo la espada.- Pero aun así no quiero que mi familia sufra.-

Naruto fruncio el ceño.-¿Y por qué enviaron un varón en vez de una mujer? Ese no era el trato.-

.-Es una larga historia.-

.-¿El emperador no tuvo hijas?.-

.-No, el primogénito también es varón.-

.-Entiendo.- Naruto se apartó de su vista y lo rodeó de nuevo.- Pero tienes la complexión de una chica, si no hubiera escuchado tu voz lo hubiera creído.-

.-¿No castigaras a mi familia?.-

.-No, me sirves, de vez en cuando hay que probar cosas diferentes.-

"¿Probar?, eso significa ¿Qué me comerá?, ¿Eso es lo que hace con sus ofrendas?"

Naruto se detuvo de nuevo enfrente de el, vio sus ojos llenarse de pánico.- No te comeré, si eso es lo que piensas, en realidad consumo otra cosa.-

Sasuke lo miro con confusión.-¿Cómo qué?.-

.-Tu energía.-

.-¿No es casi lo mismo?.-

.-No, sólo te sentirás débil, los seres humanos recuperan su energía cuando comen, en este caso tu beberás un té que hará que recuperes energías rápidamente.-