Michael. Umbrella.

1.4K 47 1
                                    

NARRA T/N:

Aún cuando estaba lloviendo, salí de la casa, usando mis botas rojas y rompe-vientos amarillo, con mi paraguas transparente en mi mano. Abrí el paraguas y me senté en uno de los escalones mojados de la puerta delantera y admiré el cielo gris. A pesar de que no se podía ver el Sol, había la suficiente luz como para poder ver pasar a los autos, ver los árboles chorreando agua y el concreto llenarse de charcos.

Sé que puede sonar lo más común y básico del mundo, pero en realidad amaba la lluvia, su olor, el sentimiento de relajación que trae, su propósito de regar la flora, simplemente era bello.

Un auto estacionandose frente a mi casa me sacó de mis pensamientos. Sonreí al ver quien era. Michael.

Caminé hacia él aún con mi paraguas en mano.

- Hola -saludé besando se mejilla.

- Princesa, ¿por qué estás afuera? Puedes contraer enfermedades... -.

- No me importa, tampoco quiero que te enfermes -levanté el paraguas para que pudiera cubrir del agua a mi alto acompañante.

- Ay, linda, no tenías que preocuparte -besó mis labios- ¿entramos? -.

- ¡No! Quiero seguir afuera -rogué.

- Si alguno de los dos salimos enfermos, será tu culpa -ríe.

- No te preocupes, estaresmos sanos -.

Entramos al porche y nos sentamos donde anteriormente estaba.

- Rayos, te estás mojando el pantalón -.

Él no llevaba rompe-vientos como yo, por lo que no estaba protegido de sentarse en el escalón.

- No importa, sólo disfruta la vista -.

Pasó su brazo por mis hombros y recargue mi cabeza en él.

Hablamos de cualquier cosa, su música, mi escuela, mi familia, comida, videojuegos y nuestros día, para resumir.

El cielo se volvía casa vez más oscuro, por lo que decidimos entrar a la casa. Tomamos una ducha juntos y nos abrigamos.

[...]

- Navidad es en unas semanas, ¿quieres que nos quedemos aquí con tu familia? -preguntó.

- Pero, hace tiempo que no ves a tus padres -.

- Por ellos no te preocupes, tú decides donde quieres estar -.

Él conocía mi gran miedo a las alturas, y sabía que no me gustaba viajar en aviones, por eso nunca he salido del continente... pero es mejor tarde que nunca.

- No, quiero ir a Australia, con tu familia -.

- ¿Estas hablando en serio? La última vez que entraste a un avión, decidiste bajarte antes de despegar -.

- Creo que es tiempo de vencer uno de mis miedos, además... -.

Fui interrumpida por el estruendo de un relámpago, sonido que me sobresaltó del sofá.

Michael sólo rió por mi acción y me volvió a abrazar, en la posición que antes estábamos sentados.

- El próximo miedo que quieras vencer será el de los truenos -.

- Lo añadiré a lista de propósitos -besé su mejilla- ¿en qué estaba? Ah, sí, además, ya extraño hablar con tu mamá, es la persona más dulce que conozco -.

- Oh, ¿disculpa? Pensé que yo tenía ese título -preguntó "ofendido".

- Lo siento, pero tu mamá es mejor -sonreí.

- Vas a lamentar haber dicho eso -comenzó a hacerme cosquillas en mi estómago.

- ¡Mike! ¡Basta! -reí casi sin aire- ¡me voy a orinar! -seguí riendo.

Me acostó en el sofá y se puso sobre mi aún haciendome cosquillas.

- Discúlpate -paró por un momento.

- No -volvió a hacerme cosquillas- ok, ok, detente -.

- Discúlpate -.

- Lo siento -dije aún riendo.

- Perdonada -se detuvo y besó mis labios.

Mis manos pasaban por su cabello y sus labios trazaron un camino de besos desde de mi boca hasta mi clavícula.

- (T/N), tienes mi corazón. Cuando el sol brilla, nosotros brillamos juntos. Te dije que estaría aquí para siempre y ahora que está lloviendo más que nunca, sabes que todavía nos tenemos el uno al otro, puedes pararte debajo de mi paraguas. Puedes correr a mis brazos, está bien, no hay distancia entre nuestro amor -dijo.

- Aww, gracias Mike, pero sé que esa es una canción de Rihanna -.

- Lo sé, por eso te dije eso -soltó una risita y volvió a besarme.

- Te amo demasiado, como no tienes idea -.

- Yo te amo aún más, preciosa -.

Cuando llegó la hora de dormir, nos acomodanos en nuestra cama, y abrazados, caímos en un sueño relajante y cálido.

Cuando llegó la hora de dormir, nos acomodanos en nuestra cama, y abrazados, caímos en un sueño relajante y cálido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

~~~~
Amo el cover, sorry♡

5SOS IMAGINASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora