Nadie se puede enterar ®

Capítulo 8

—La verdad, hubo un momento en que olvide porqué me juntaba con ellos. —le dije.

—No seas tarada. Necesitas vengarte y me he dado cuenta que las cosas no avanzan en lo absoluto. La madre de Luke ya se recupero, ahora tienes que avanzar con el PLAN I, ¿Okey?. —me dice Kai.

—Okey.

Plan I: "Citas"

—¿Hola, Chase?.—pregunto por el celular.

—Si, hola. No escucho muy bien ahora. Dame un minuto, voy a ir afuera. —asiento.

«No te está viendo, ¿Por qué asientes?»

Ups. :D

—Ahora si. Hola, Emma. —dice. —¿Pasó algo?.

—Solo quería saludar. —digo y miro a Kai que se está golpeando con la almohada.

¿Dije algo mal?

—Que bueno que lo hallas hecho, estaba bastante aburrido. ¿No has podido venir?. —niego con la cabeza y al instante siento un golpe.

—No te está viendo, sonsa. —susurra Kai.

Ups, otra vez.

—No, mi madre no me dio permiso. —le escucho reírse.

¿Se estará burlando de mi?

—Mis padres tampoco quisieron, pero Luke me saco por la ventana. —sonrió y le tiro la almohada a Kai que está empezando a buscar ropa.

¡Ya sé tus intenciones, kai!

—¿Tu crees que podrás salir un rato al parque, ese de los pinos gigantes?

Miro a Kai.

Kai me mira.

«Yo las miro»

Cállate.

Veo a Kai asentir.

—Si creo que podré, ¿por qué?. —le pregunto.

—Como ya te dije estoy aburrido, mejor hablemos en el parque.

—Okey, te veo ahí.

Corto.

—¡Madre Santa de los cacahuates lesbianos!

Ese fue el grito descontrolado de Kai.

—¿Qué pasó? Solo voy a ir al parque.

—No es por eso. M-mira. —señala mi armario.

¡Madre Santa de los cacahuates gays!

—¡MAMÁ!. —comienzo a gritar.

—¡Vamos a la cama!. —exclama Kai e inmediatamente estamos en la cama con mis sábanas tapándonos como un escudo.