Tema: Cazadores + Una anécdota de una ex-novia loca
1-No molestes a los felinos del bosque.
Anécdota escrita por: tennmyc21
Tengo una buena anécdota.
Hay un lugar de cacería en el bosque que suelo frecuentar. No es un lugar lejos de la civilización ni nada de eso, el terreno es un dolor en el culo, pero es un lugar bastante escondido que está cerca de mi casa.
De todos modos, es un buen lugar para conseguir presas pequeñas como zorros o tejones y en ocasiones ciervos. Una mañana, había llegado al lugar a las 5:30 am, y tenía tiempo para un poco de cacería antes de caminar y dar un paseo por el lugar.
Tenía una sensación extraña en el estomago, pero pensé que solo era el café que había bebido antes de llegar allí. Entonces, decidí comenzar a caminar y tras unas 300 yardas de caminata, me encontré con un montón de árboles, ramas y escombros caídos que no había visto antes.
Era la primera vez que cazaba en ese lugar en particular en esa temporada en particular, así que imagine que quizás algunas personas habían hecho algunos trabajos de mitigación de incendios, eso explicaría los escombros y las ramas.
No le preste demasiada atención hasta que me di cuenta de que había algo extraño moviéndose allí. Eran movimientos bastante pequeños pero eran lo suficientemente visibles para notarlos. También era alrededor de las 5:45am, y durante esas horas, la naturaleza tiene una especie de quietud que hace que cualquier movimiento sea notable.
Entonces, me detuve y empecé a examinar el montón para averiguar qué estaba pasando. Me imagine que había un conejo allí, tal vez algunas ardillas. pensé que quizás me había ganado un buen premio gordo. Empecé a decidir cual sería la mejor forma de obligar a salir a lo que sea que estuviese allí y como podría darle un buen tiro con mi escopeta.
Me di cuenta que estaba justo al lado de una rama de tamaño decente, y que mi mejor movimiento sería pisar la rama para que el ruido alertara al animal y así este saliera de su escondite. Si todo iba según lo planeado, todo se congelaría por un momento, entonces lo que estuviese allí se lanzaría de su escondite.
Después de eso, intente averiguar de donde podría intentar salir y escapar el conejo, y cuando finalmente tuve una buena idea de dónde este podría intentarlo... BAM pisé la rama y la partí por la mitad.
El movimiento se detuvo, y la calma y quietud del bosque regresaron. Pero no fue un conejo lo que salio de allí.
En realidad, lo que estaba haciendo ruido allí, había sido un león de montaña. Un puma enorme, con sangre en su boca y rostro, asomo su cabeza.
En este punto, estaba a unos 10 metros del montón. Tenía mi escopeta, pero realmente no quería dispararle al león. Tampoco quería disparar al aire para asustarlo, porque en general esta era una experiencia increíble y que muy pocas personas tienen oportunidad de ver.
¿Quién más puede decir que se encontró con un puma en el bosque?
El animal se congeló y comenzó a observarme con curiosidad. Luego, en un rápido movimiento, saltó del montón de ramas y escombros, corrió colina arriba, se alejó unos 40 metros de mí y desapareció entre los árboles. Nunca he visto algo que cubra 40 yardas cuesta arriba de una manera tan rápida y elegante. Una de las cosas más geniales que he experimentado.
Fui a ver el montón de escombros cuando se fue. Cuando me acerque, descubrí que estaba devorando el cadáver de un ciervo.
Todavía esta es mi anécdota favorita de encuentros en el bosque.
