EL INFARTO

31 4 0
                                    

Vivir en Venezuela es una bendición lástima que mi rostro no me ayuda ,

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Vivir en Venezuela es una bendición lástima que mi rostro no me ayuda ,

vengo de descendencia indígena, aunque muchas personas piensas que soy asiática.

Se dice que en mi país existen las mujeres más bellas del mundo, me miro en el espejo y digo "yo

vine a cagarla"...

Mis ojos son chinos, mi nariz parece de cochinito ni forma tiene, mis labios pachoncitos.

La familia de mami me ha preguntado si tuviera la oportunidad de hacerme una rinoplastia (cirugía

en la nariz) obviamente grito: ¡NOO!

Soy el tipo de personas que no le tiene miedo al hospital, solo le tengo pánico, ¿les parece poco?

Un día me estuve hospitalizada y tuve que estar sola porque mi hermana había dado a luz y la familia estaba con ella pero en otro hospital ,me levantaba toda moribunda, con mareos y debilidad fui al
baño a vomitar saliva porque no había comido nada.

Mientras escucho a las enfermeras gritar: ¡¡¡DOCTOR!!! , ¡¡¡DOCTOR!!!

Me sentí débil, pero al mismo tiempo curiosa, recordé que a dos puesto donde estaba mi cama

Estaba alguien que tenía problemas con su corazón.

Al salir me percate que al señor le estaba dando un infarto. Yo Salí como pude del baño que tenía

un olor putrefacto ,con mi tubo de solución me arrastre hasta mi cama.

Recordar un hospital es imaginar caminar bacterias por las paredes, me sentí traumada

En aquellas circunstancias solo sentía que me iba a enfermar más de la cuenta.

Escuche un aparato que utilizan para el ritmo cardiaco y se escuchó el sonido como cuando

alguien se va a morir, el doctor le puso al hombre como planchas en el pecho.

Y el pobre hombre saltaba de esa cama, enfermeras corriendo inyectándoles algo,

quede boquiabierta y en estado de shock ,estaba viendo la vida y la muerte pelear.

Mi corazón se aceleró y mi mente decía: que no se muera (repetitivamente) fue un día estresante

para mí pero gracias a Dios el señor no se murió, me sentí aliviada y suspire pero fue desagradable

ver a ese hombre pidiendo por su vida ,abrir la boca desesperado como buscando aire y vida, que

frustrante estar en mi cama y no poder hacer nada para salvarlo. Pensar que quizás podía regalarle

algo de mi juventud pero solo fueron pensamientos vagos.

Sé que es ley de vida, nacer y morir pero no delante de mis ojos; volviendo a mi nariz prefiero

Quedarme siendo fea, no soy bonita pero me siento bien tengo un concepto de la vida y es

aceptar todo lo que me ha dado Dios.

No es fácil ser fea y recibir críticas de la sociedad pero mis pensamientos van más allá de la

superficialidad trato de ser racional y más por mis complejos de chica con baja autoestima

Aunque tengo una regla, la única persona que puede pisar mi autoestima y burlarse de mis

defectos , soy yo misma.

El diario de una depresivaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora