THAT BOY ─ PETER PARKER | EN EDICIÓN

CHAPTER TWENTY-THREE | MAY AND BEA

CAPÍTULO 23: MAY Y BEA

CUANDO BEA ABRIÓ LA PUERTA Y VIÓ A MAY TRAS ELLA, no dudó en ir a abrazarla con fuerza. Tenía bastante miedo de perderla a ella también.

—¿Sabes qué está pasando Beatrice?—le preguntó ella con miedo.

Bea negó y se le escaparon un par de lágrimas.—Solo sé que en una estaba haciendo experimentos con Ned y lo próximo fue ver cómo se convertían en tierra, May, todos ellos. Cindy, Betty, Michelle, Ned, Flash . . .—Bea tomó un respiro tratando de no llorar.—Cuando llegué a casa, mi abuela no estaba tampoco May.—y ahí fue cuando Bea comenzó a sollozar.—No sé qué está pasando. ¿Por qué se fueron?

May abrazó a la castaña con fuerza.—Tranquila. Todo estará bien.—May sabía que las cosas no serían lo mismo que antes pero debía de estar fuerte por ambas.—Nos tenemos y eso es suficiente, ¿no?

Bea asintió.—Creo que debemos de esperar a que digan algo en las noticias. ¿Sabes algo de . . . de Peter?

May negó.—Con suerte está bien. Él llegará pronto, lo sé.

May limpió las lágrimas de Bea y le sonrió.—Ven, vamos a hacer algo de comer. ¿Qué te parece algo de pasta?

—Que no sea con salsa roja, por favor.—pidió ella.—Iré a ver que dicen en las noticias.

Bea encendió la televisión a ver si algo pasaba sobre lo sucedido aunque nadie daba respuestas a los hechos que acaban de ocurrir. Rendida, fue a ayudar a May con la comida. Luego de unas cuatro horas, en el canal 4 estaban la Viuda Negra y Steve Rogers en pantalla.

—May, ven a ver.—llamo Bea. La castaña analizó al Capitán América y por un momento se le olvidó lo que estaba pasando. En definitiva era un hombre atractivo.

Como ambas llegaron tarde, apenas pudieron escuchar el final del informe de la mujer del noticiero.— Hace unas horas, un titán por nombre Thanos logró que la mitad de la población mundial desapareciera de forma aleatoria confirmaron los ex-vengadores. Esperamos y confiamos en ellos en que todo se pueda resolver lo más rápido posible.

Tanto Bea como May sintieron como el corazón se le iba del pecho.

—¿Por qué alguien haría eso?—preguntó Bea.—¿Crees qué . . .

Pero Bea no pudo terminar la oración ya que May comenzó a llorar. Bea la abrazó con fuerza y empezó a tratar de calmarla.

—Mi Peter. No pude ni siquiera decirle adiós.—comentaba entre sollozos May.—¿Qué si ellos no pueden lograr arreglar esto? Él se fue, Bea, y lo más seguro que para siempre. No pude decirle cuanto lo amo. Y- y no sé qué haré sin él aquí. Él es mi todo, Bea. Mi pobre niño.

—Lo sé May, sé el sentimiento. Pero son los Vengadores de quienes estás hablando. Ellos nos salvaron cuando vino Loki. También lo de Ultrón, seguro que pueden con esto también.—a este punto Bea no sabía qué pensar con respecto a su novio, pero no podía perder la esperanza.—Ellos encontrarán la forma, lo sé. Además, no sabemos si Peter está desintegrado. Tal vez él fue a ayudarlos y, y está con ellos en la sede. ¿No? No perdamos la esperanza.