Sirius Black: el velo de la muerte¹

Piertotum Locomotor

Los momentos difíciles, el peligro, la muerte, el inicio de la guerra; siempre son recordatorios constantes de que todo puede terminar en un abrir y cerrar de ojos, tanto lo bueno como lo malo. Y tal vez eso era lo que había llevado a Tonks y Remus a casarse tan sólo un par de semanas después de que Remus se reconciliara con su propia condición.

Aunque ellos no eran los únicos, pues, al parecer, los otros amigos de Isadora, Ric y Allie, aunque no habían dado un paso tan grande como el de los Lupin, habían dado uno y ahora se encontraban en pareja.

Por otro lado, Bill ya se encontraba en buena forma y completamente compuesto, eso si se exceptuaban las cicatrices que habían quedado de por vida en su rostro.

Hasta ahí todo parecía inmejorable. Pero la situación de la Orden del Fénix era otra historia. Habían pasado dos semanas desde el funeral de Dumbledore y todavía era difícil cubrir las obligaciones que ahora habían sido delegadas a dos líderes interinos: Alastor Moody y Kingsley Shacklebolt.

25 de Julio 1997

Faltaban pocos días para el cumpleaños de Harry Potter y por ende faltaba poco para que él pudiese, finalmente, irse de la casa de sus tíos.

Sirius aún seguía enojado por el hecho de que no habían dejado que Harry se quedase en su casa durante el verano. Pero Dumbledore había dejado en claro que Harry debía usar la protección de su madre el mayor tiempo posible ya que era lo único que a impedía a Voldemort acercarse a él; el encantamiento era más fuerte y seguro que cualquier encantamiento Fidelio.

La Orden había elegido la casa de Sirius e Isadora para esa reunión de la Orden, ya que era la única que hasta ese día permanecía oculta y Grimmauld Place ya no era una opción puesto que Snape conocía su ubicación.

Inmediatamente después de la muerte de Dumbledore un grupo de miembros de la Orden tuvieron que desmantelar Grimmauld Place, donde ahora solo quedaban muebles viejos, habitaciones vacías y Kreacher. El elfo se negaba a irse de la casa y como Sirius no lo quería en la suya no le ordenó que se vaya, simplemente lo dejó quedarse allí.

- No podemos esperar hasta el treinta y uno – dijo Sirius, que tenía Raphaella sentada en su falda –. Es muy arriesgado, Voldemort sabe que ese día el encantamiento se termina.

- Los mortífagos deben estar vigilando la casa ahora mismo, da igual cuando lo hagamos, no podemos sorprenderlos con la fecha – añadió Kingsley Shacklebolt – pero debemos aprovechar lo más posible el tiempo, así que no nos conviene sacarlo de la casa todavía y el plan que teníamos ya hay que descartarlo, no es seguro confiar en el ministerio ya.

- Y otra cosa, hay cambio de planes, no voy a llevar a Harry mediante aparición conjunta.

Instantáneamente se escucharon murmullos entre los presentes, mezcla de curiosidad y desacuerdo.

- Bueno, bueno, silencio – pidió Moody – Ese plan valía sólo si estábamos seguros de nuestros contactos en el ministerio, y ya no estamos seguros. Están bloqueándonos las salidas mágicas "para seguridad de Harry"

- Eso no tiene sentido – opinó Isadora.

- No, no lo tiene, lo que quiere decir que alguien está asegurándose de que Potter no pueda salir de esa casa sin ser detectado, por ende, Voldemort ya se infiltró en el ministerio.

- ¿Entonces? – preguntó Allie.

- Vamos a usar poción multijugos – declaró Moody – fue idea de Mundungus Fletcher.

- ¿y vamos confiar en que él no diga nada a los mortífagos sobre el plan? Es arriesgado – opinó Sirius.

- ¿De dónde vamos a sacar poción para todos nosotros? – preguntó Tonks