Instituto [McLennon]

[5]

Narra Paul

─ ¿Acaso hiciste lo que creo que hiciste? ─me preguntó el castaño con un brillo particular en los ojos.

─ Ha-hacer... ¿Hacer q-qué? ─tartamudée bajando mi mirada hasta la pantalla del celular.

El rió suavemente. Yo lo odiaba por volverme loco.

─ Sabes a que me refiero ─buscó mi mirada bajando un tanto su cabeza─. ¿Me darías otro de esos? ─yo volví mis orbes para encontrarlos con los de él.

─ Yo...debo ir a clases...John ─intenté excusarme.

─ Te esperaré hasta que salgas ─dijo recuperando su postura erguida quedando un tanto más alto que yo.

Yo estaba a punto de tartamudear algo en respuesta, cuándo una figura apareció desde uno de los salones y fue directo hacia nosotros; Era Ringo.

─ ¿Cómo es que no estás en clases Lennon? ─indagó mientras nos miraba a ambos con desconfianza.

─ Estoy algo ocupado ─este respondió y sonrió al verme.

Yo no había olvidado el consejo que me había dado el chico de prominente nariz, pero en gran parte me daba igual. Quería conocer a John con todo y consecuencias.

─ ¿Ustedes son compañeros? ─solté con curiosidad.

─ Si Paulie ─respondió Ringo con cariño─. Tú también deberías estar en tu salón pequeño ─me señaló.

─ Por favor Richie, ¿Pequeño?, Si es casi tan alto como yo, más bien el chiquitín aquí eres tú nada más ─Lennon soltó una risa exquisita que me contagió─. Anda Paulie, ve a clases.

─ Uhm, claro ─asentí levemente pero no me moví.

─ Ya Limones, que si quieres empezar una guerra de apodos molestos, sabes que estoy dispuesto ─lo retó Ringo.

─ Narizón ─soltó de inmediato el castaño.

─ Miope ─John rió y por alguna razón pasó un brazo por mis hombros para rodearme.

─ Bongo ─el casi rubio frunció el ceño.

─ Winston ─respondió fríamente estirando la "o" y con un amago de triunfo.

─ Ya, ya─bufó el de ojos almendrados─. Vuelve a la clase Rings, yo voy enseguida.

─ Yo voy al baño ─luego señaló a John─. Y tú ya deja tranquilo a Paul para que vaya a su sala ─Ringo respondió y siguió su camino.

John me giró de tal forma que quedé de espaldas a él y sentí un escalofrío cuando sus labios rozaron mi lóbulo izquierdo. Había acercado su rostro lo suficiente como para hacerme sudar.

─ No olvides responder mis mensajes, Macca. ─susurró rápidamente─. Quiero salir contigo ─concluyó dejándome ir hacia mi salón.

Moría de la vergüenza por lo que no miré ni una vez atrás.

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Me encontraba en el último bloque, hoy saldría a las dos de la tarde. La clase estaba llegando a su fin y con ello noté que mi celular vibraba con demasiada frecuencia. Eran mensajes del castaño, por lo que desbloqueé el móvil y me dispuse a responder.

Johnny
En línea

macca!

maccaaaaa

POLMA!

avísame cuando estés por salir Macca.

quiero ver tu lindo rostro :)

la clase está por terminar...

porqué tienes tantas ganas de hablar conmigo?

cualquiera en su sano juicio querría pasar tiempo a tu lado

me pones nervioso con las cosas que me dices John...

¿ y eso...es algo malo?

no...claro que no... sólo que eres la primera persona que me las dice...

eres único Paul, quiero acercarme más a ti.

estaré en la salida.

No respondí el último mensaje, una parte de mí quería lanzarse en los brazos del castaño, pero la otra no lograba convencerse de que todo aquello era real; el pesimismo y la vergüenza estaban consumiéndome. Con algo de ansiedad guardé mis cosas en la mochila y partí rumbo a la entrada del Instituto, quería ver a Lennon, pero me odiaba por no lograr mostrar algo de personalidad ante él.

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─ ¿Por qué tan calladito? ─preguntó. Caminábamos hacia la parada de autobús mientras el mantenía su mirada al frente.

─ Te lo había dicho...las cosas que dices me ponen nervioso ─le respondí con timidez, intentaba armarme de valor para sostener una conversación.

─ ¿Y eso por qué? ─indagó acercándose a mi.

─ Uhm, no lo sé...─evadí su contacto sutilmente pero el me rodeó con uno de sus brazos.

─ Digamos que te gusto... ─susurró suavemente en mi oído, seguramente para que la gente del paradero no lo oyera.

─ ¿¡Q-qué dices!? ─solté igualmente bajo.

Cuándo me giré para encararlo, el no había movido su cuerpo ni un centímetro, por lo que nuestras facciones quedaron peligrosamente cerca.

─ Que si yo te gustara, entendería por qué te pones tan nervioso ─dicho eso, juntó nuestras narices por una fracción de segundo, acariciándolas.

Yo me quedé inmóvil. Estaba impactado, por un segundo imaginé que el castaño posaría sus labios en los míos; Porque a pesar de ser la timidez hecha persona, los ansiaba con increíble desesperación.

Perdonen lo corto del capítulo!!!! 😭 Tengo demasiado que hacer y no logro encontrar tiempo para éste pequeño bebé literario jijijdjsj😣

Muchas muchas infinitas gracias a quienes están siguiendo la historia💕 son más lindes que el sol😳🐱✳️

Deitripper🙋