Treinta y nueve, continuación| NamJoon

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-El pulso está mejor, dejémoslo tranquilo por lo mientras-susurró una enfermera lo bastante fuerte mientras NamJoon tenía sus ojos cerrados.

Pero ya no estaba dormido.

-¿Le dirán sus familiares o quién lo hará?-pregunto otra enfermera.

NamJoon abrió sus pequeños ojos un poquito solo para saber de donde provenían aquellas voces, las enfermeras ni siquiera lo supusieron.

-Lo hará un miembro de su banda, o el mismo CEO.

-Estará destrozado.

-Pobre chico, incluso ella ya tenía el anillo de matrimonio. ¿Alguien sabe que pasó?

-No, la gente que estaba cerca no sabe que sucedió.

NamJoon pedía al cielo que no fuera verdad lo que las personas de afuera decían. Que no hablaran de su Lily.

-Él es un chico famoso, tendrá mucho apoyo-dijo un doctor más irrumpiendo a lado de las enfermeras.
-Ella también era famosa, apenas comenzaba a ser famosa. Tenía un grupo, mi hija era fan de el.-murmuro una mujer más con palabras cortadas-mi hija lloró al enterarse de lo sucedido.

NamJoon apretó sus ojos pidiendo que no fuera verdad. Pero lo era,

-Que ella estuviera muerta ha sido un gran shock para todos,

Y NamJoon abrió los ojos.
Y gritó sin pleno aviso.

Los doctores acudieron a él corriendo mientras la enfermera que anteriormente charlaba se golpeaba mentalmente por haber dicho aquella noticia en voz alta.

NamJoon gritaba tan alto que el edificio entero podía escucharlo, los demás chicos lo escucharon, escucharon a el chico más valiente y el que cuidaba a todos siendo destrozado pro aquellas palabras.

Después se calló, como si nada hubiera pasado. Pero si lo hizo. NamJoon no hablaría en mucho tiempo.

(...)

Los meses pasaron y todos se cansaron. La estrella líder no rapeaba, no escribía, no daba consejos, no nada.

"Se ha vuelto loco" decían a sus espaldas todo mundo. Excepto los 6 chicos que lo acompañaban a todos lados.

-NamJonnie, hyung-llamó el maknae-puedes hablar conmigo, yo...Yo sé que sigues mal, yo escucho tu pesada respiración por las noches mientras escuchas su voz en la música.
-No te obligaré a que digas algo si no puedes. Pero no quiero que te separen de mi-murmuró el más pequeño con los ojos aguados-no quiero que nos dejes.

NamJoon lo miro. Le demostró que lo escuchaba y después lo amarró con sus brazos.
JungKook lloraba, NamJoon lloraba. Ambos eran un mar de lágrimas porque la misma causa provocaría una de las peores consecuencias.

Jimin escuchaba desde la puerta. El no sabía aquello, podría ser demasiado para él pero al enterarse se enojo con todos hasta que le hicieron entender el porqué no estaba enterado.

JiMin , TaeHyung, SeokJin, HoSeok, YoonGi y JungKook se convirtieron en un océano cuando la empresa agradeció a su líder por tanto tiempo con ellos. Pero excusándose que no podían tenerlo más, que entendiera que se había convertido en una carga para los demás y no podía seguir así.

La segunda mayor tristeza para NamJoon ocurrió aquel día cuando lo separaron de sus hermanos. Su corazón no podía latir más, su cabeza no podía pensar y su voz se le había sido arrebatada. NamJoon cerró sus ojos en una cálida noche de Diciembre.

Despertó.

No sabía dónde estaba. Al principio supuso que estaba en el hospital, o en el cielo, incluso se cuestionó su estaba muerto. Pero no, aquel lugar era lo menos parecido al cielo. Era oscuro y una voz le llamaba.

"NamJoon. Puedes hablar ya, no estes mal."

El castaño miraba sorprendido aquel lugar, quería que lo sacaran de ahí impacientemente.

"Tu vida ha sido fatal desde los últimos diez meses. Cuando Lily se fue"

NamJoon tragó la saliva amarga al escuchar eso de nuevo.

"Eres un buen chico, no mereces morir tan jovencito después de una fatalidad.
Te preguntarás qué haces aquí, todos lo hacen al llegar. No sabrás quién habla, ni porque te conozco tanto solo sé que necesitas reescribirte."
"Así que tendrás dos opciones.
La primera cambiará tu destino, el que morirá en el accidente serás tu, no Lily. Ella te llorara un rato, pero después de eso será feliz con otro hombre, ella morirá vieja."

NamJoon estaba a punto de elegir eso, sin antes escuchar la segunda opción.

"Aguarda, NamJoon, no seas impaciente.
La segunda tendrá que ver un poco más con ambos."

"¿De qué se trata?" preguntó de inmediato tragando el dolor acumulado en la garganta.

"Jamás se conocerán"

El chico dejo su boca abierta, sin entender.

"Sus vidas se encontrarán el mismo día donde todo comenzó, donde fueron unidas.
Pero cambiará, jamás se darán cuenta de la existencia del otro y así podrán ser felices para siempre.
Ni siquiera recordarás esto, será como si nunca hubiera pasado"

NamJoon no tuvo tiempo de pensar. Solo sabía dos cosas.

Amaba con todo su corazón a Lily, su historia eran recuerdos y ahora ella no estaba a su lado. El accidente había sido enteramente su culpa, según el. Lily no merecía morir.

La segunda era que amaba a sus 7 hermanos tanto que no podía dejarles solos. Ni al más fuerte de Yoongi ni al más pequeño, Jungkook.

NamJoon no supo en qué momento contesto. Hasta que aquel día comenzó de nuevo.

"14 de Abril del 2017. 5:22 AM"

NamJooon despertó con dolor en la coronilla de su cabeza. Jimin dormía plácidamente a su lado abrazando su brazo mientras que TaeHyung se encontraba a sus pies hecho un ovillo.

Estaba feliz, su cabeza dolía pero su corazón estaba feliz por un extraño motivo. Y volvió a dormir.

El día transcurrió lento y normal hasta las 10:34 de la noche, cuando el grupo "T•Scene" se encontraba caminando hacia su lugar.

Para pasar a el debían pasar enfrente de el grupo surcoreano de 7 chicos.

Y así lo hicieron, una a una pasaron con una inclinación hacia sus sunbaes. Excepto Lily.

Cuando estaba a punto de pasar, ahí estaba Jisoo, su compañera trainee, y fue a saludarla.

Lily nunca tropezó con el pie de NamJoon y el nunca la ayudó a levantarse. Nunca se besaron en la fiesta después de los premios, nunca pensaron en verse de nuevo, nunca visitaron Canadá juntos y nunca hicieron planes de matrimonio.

Pero Kim NamJoon era feliz sin saberlo. Incluso el otro destino lo sabía, el jamás podría vivir sin su Lily.

Bang Bangtan| ReaccionesOnde histórias criam vida. Descubra agora