diez

1.8K 134 8
                                    

-¿Would you stay if she promised you heaven? ¿Will you ever win?-iba cantando mientras el auto iba a gran velocidad por la carretera, se podía sentir la brisa del mar y el aire pega justamente en mi rostro.

Recuerdo Perfecto aquel día que decidí abandonar todo por él, el hombre que ahora toma mi mano mientras canta feliz a mi lado.

-¿En qué piensas, Zhavia?-me preguntó, estábamos por llegar a casa.

-En que todo parece un sueño, Tom. ¿Alguna vez te imaginaste vivir fuera de Estados Unidos? Estamos tan lejos de todos que me parece extraño, pero no cambiaria nada de esto.

-Tampoco lo cambiaria, cariño. Cuando nos fuimos de aquel hotel, fue cuando realmente comencé a vivir.-llevó mi mano hacia sus labios para dejar un beso en mis nudillos, quería llorar, porque no podía explicar lo mucho que amaba a Thomas.

(...)

-¿Qué tal esté?-di una vuelta con el vestido blanco, pero la chica frente a mi negó con la cabeza.

-Se que tu boda es en la playa Vi, pero ese vestido no lo puedes llevar. Es horroroso.-Se cruzó de brazos para luego seguir buscando vestidos por la gran tienda.

-Angie, tienes que entender que queremos una boda sencilla.-levante mis hombros y la morena me fulmino con la mirada.

-¿Tú quieres una boda Sencilla, Evara?

-No, pero quiero estar junto a Thomas lo más pronto posible.

-¿Desde cuando es Thomas? Olvidaste que lo llamabas Señor Hiddleston o Daddy.-mis mejillas se tornaron en un color rojizo, así que decidí darle un golpe en el hombro a la chica.

-Cállate, idiota. Comencé a llamarlo Thomas por que ya no era necesario ocultarnos.

-Pues ahora te tienes que ocultar de él viene para acá y no te puede ver con el vestido de novia.-corrí hacia los vestidores cuando escuche la campana de la tienda.

Escuchaba como saludaba a las personas amablemente, su acento en Italiano era sumamente hermoso. Estaba por quitarme completamente el vestido, tocaron la puerta del vestidor.

-¿Qué tal todo ahí, princesa?-Se escuchó su risa detrás de la puerta.

-Se supone que no puedes estar aquí Hiddleston.-Estaba irritada, pues habíamos hablado sobre esta tradición.

-Tú sabes que no creo en esas tradiciones, ¿desde cuando volví a ser Hiddleston?

-Desde que no me haces caso, sal de aquí Thomas.-la puerta del vestidor se abre rápidamente dejando ver al hombre mayor frente a mi, sabía que no era capaz de resistir hasta el día de la boda.

-Eres preciosa, Zhavia.-su sonrisa causaba sus notorios hoyuelos.

-¡Vete!-chille para luego ver cómo Angie jalaba a Tom de la camisa para sacarlo de ahí.

Sería una larga semana tratando de que todo salga Perfecto, no puedo imaginar ese día. Pero lo más triste de todo es saber que mi familia no estará aquí, tengo tanto tiempo sin ver a mi padre, desearía que esta vez comprendiera todo sobre mi felicidad. Siempre cedía cuando se trataba de eso, pero en el momento que notó que Hiddleston realmente era mi vida, no acepto aquella idea.

Do you love; Tom Hiddleston« (EN EDICIÓN)Kde žijí příběhy. Začni objevovat