—Ustedes sí que tienen problemas—suspiró Niall—, demonios que mal me siento.

—Por lo menos tú descansarás, yo tendré que armar la tercera guerra mundial con Harry—blanqueaste los ojos—, en fin, todo pasa por algo supongo.

Harry llegó diez minutos después, al verte sentada en el sofá frunció el ceño. Saludó a los dos chicos y se sentó en una silla hablando normal, como si nada hubiera pasado. Tenías ganas de levantarte y pegarle una bofetada para que despertara a la realidad. ¡Mocoso! Arqueaste una ceja divertida cuando él te miró, parecía enfadado y te encantaba. ¡QUÉ ESTUVIERA ENFADADO! Se merecía arder de celos.

—Nosotros ya nos vamos—se levantó Harry—, vamos _____(TN).

—Un placer haber pasado la noche con ustedes chicos—sonreíste diciendo eso para enfadar más a Harry—, nos vemos pronto. ¡Adiós!

—Adiós ____(TN)—rió divertido Niall.

Subieron al coche y ninguno sacó un sonido, Harry se dedicó a conducir y tú a mirar por la ventana con gesto distraído, todavía te sentías mal por haber bebido, necesitabas otra pastilla con urgencia. Gruñiste, no deberías de haber bebido. ¿Cómo se suponía que le dirías a Harry que te habías besado con Niall? ¿Se lo tomaría bien o pensaba gritarte el doble para después abandonarte? Bueno … habían opciones y opciones.

—¿No íbamos a recoger a Scar?—parpadeaste cuando te diste cuenta que estaban parando en tu casa.

—Baja del coche—habló.

Suspirando te bajaste del coche y lo esperaste, él bajó también y los dos entrar al edificio, seguramente cuando estarían en la casa él explotaría como bomba. Reíste imaginándote a Harry explotar … demonios, ¡estabas pensando en tonterías! Él estaba furioso y tú tenías pensamientos inmaduros.

—¿Ya explotarás?—preguntaste cuando entraron dentro.

—¿Dónde has estado? Te quedaste con Niall y Greg, ¿te emborrachaste?—preguntó mirándote serio.

—Sí, me quedé con ellos, nos emborrachamos hasta no poder andar y después hicimos un trío espectacular—hablaste sarcástica—¡los dos la tienen más grande que tú! ¿Contento o te doy los detalles?

—¡Mentira, estás mintiendo!—apretó los labios.

—¡Pues claro que sí idiota!—reíste—Nos emborrachamos y no sé, acabé en casa de Niall, bebimos un poco más y después nos dormimos. Eso es lo que pasó.

—¿Dónde dormiste?

—Bueno eso … eh …

—¿Dónde?—insistió.

—En la cama de Niall … con él—completaste.

Él asintió e hizo la cosa más rara y sorprendente. Si te habría insultado, empujado o hecho cualquier otra cosa te habría sorprendido menos, pero no, él te estaba besando. Metió su mano en tu pelo y te besó con fuerza, casi con violencia. Gemiste y te separaste de él para tocarte los labios, él te los había mordido sin piedad. Lo miraste a los ojos y volviste a besarlo, esta vez enganchaste tus piernas a su cadera y los dos se dirigieron al sofá donde cayeron con violencia, él encima de ti. Nunca habías visto a Harry tan enfadado y sus besos lo confirmaban, aún así, se veía sexy.

—Con que Niall y Greg … ¿verdad?—balbuceó abriéndose el cinturón.

—Sabes que era broma—le contestaste.

—Te enseñaré que nadie más te lo hará como yo—gruñó.

Levantó tu vestido, te quitó las bragas y volvió a besarte, al poco rato se cayeron del sofá por el constante movimiento. No entendías porqué Harry estaba tan enfadado por esa broma que habías dicho, ¿tal vez habías herido su ego masculino? Reíste sin poder evitarlo, a veces era muy idiota, pensabas que ya sabía que no serías capaz de engañarlo. ¡Menos con Niall y Greg que los veías más como hermanos que cualquier otra cosa!

—Harry, tranquilo—pusiste tus manos en su pecho—, me haces daño.

Sus constantes movimientos, apretones … besos … estaba haciéndote daño sin querer y todo por los celos. Le acariciaste la mejilla y lo tranquilizaste, no sabías porqué estaba tan celoso pero pensabas averiguarlo más tarde. Cuando los dos terminaron lo sujetaste entre tus brazos, meciéndolo suavemente.

—Dime por favor que no cogiste ese dinero de Paul—susurró.

—Harry cariño, tenemos que hablar sobre eso—le apartaste los rizos de la cara—, no podemos estar así. Iba a hablar contigo pero te fuiste, al minuto desapareciste y no supe cómo encontrarte así que … me fui yo también.

—No podía hablar contigo en ese momento, estaba demasiado enfadado—se separó de ti para empezar a colocarse los pantalones bien—. Demonios, nos hemos comportado como salvajes.

—¿Tú crees?—reíste bajándote el vestido.

—¿Cogiste el dinero?—preguntó ahora de pie mirándote.

—Déjame explicarte todo, sentémonos en el sofá—te levantaste tú también.

—Contéstame con un sí o no, es simple—se negó a sentarse.

—Sí, sí que lo he cogido—asentiste finalmente con un suspiro.

—Bien, todo ha quedado claro entonces—sonrió sin humor—, eres una maldita interesada, pues has conseguido todo, has sido la novia de Harry Styles, ahora seguro darás miles y miles de entrevistas por nuestra separación, ¡te harás rica!

—No, no es así, Harry, escúchame—empezaste a hablar desesperada—, yo cogí ese dinero pensando que me ayudaría para la operación pero …

—¡Si tu hermana está bien!—te interrumpió—¡Está bien, no tiene nada! ¡Ella no merece una hermana como tú! Debería de darte vergüenza, ella es inocente y pura, no como tú. ¿A cuántos has engañado con tu historia y haciéndote la víctima? ¡No me creo nada, nada de lo que me has contado! ¡Eres una interesada y una mentirosa!

—¿Tú crees?—lo miraste humillada—¿De verdad Harry? Pensaba que tendrías un poco más de inteligencia en esa cabeza llena de rizos pero no, ¿cómo fue que me engañé? ¡Eres el típico niñato, un mocoso que se cree mucho porque unas mocosas se mueren por él!

—Te recuerdo que hace cinco minutos te has acostado conmigo en el suelo como si fueras una cualquiera—sonrió él cínicamente.

Parecía que estaban en los viejos tiempos. Él te insultaba y tú lo golpeabas. Estampaste tu palma contra su mejilla haciendo que sus ojos se encendieran en fuego vivo. Sabías que odiabas que le pegaran pero tenía que respetarte, habían estado tiempo juntos, habías pensando que él tal vez te conocía un poco pero no, te habías equivocado, él era un mocoso inmaduro que a la mínima juzgaba sin escuchar las opiniones de nadie. Negaste con la cabeza decepcionada y te negaste a llorar, él ya había dicho bastantes cosas, no valía la pena enseñarle que te había lastimado.

—¿Sabes qué?—sonreíste—Me besé con Niall, ¡sí!

—No me extraña … eres una …—apretó los dientes mirándote de arriba-abajo.

—Y con esta 'cualquiera' has estado meses, ¿cómo se siente cariño?—le empujaste un poco—¿¡Cómo se siente!? ¡Maldito mocoso! Pensé que teníamos algo, no sé cómo algo así se me pasó por la cabeza. Contigo una no puede tener una relación seria porque eres todavía un niño que juega a los cochecitos.

—Bueno, bueno, aquí habla la señorita víctima ‘me pegaba mi ex-novio pero lo dejé por el bien de Scar’, ¿sabes qué? ¡Ni siquiera creo que algo así ha pasado! Seguro que Ben fue uno de los tantos tontos que han caído en tu juego de inocente. ¡Te mereces que alguien te golpee por ser tan falsa!—gruñó enfadado.

—¿De verdad? ¿Me vas a pegar Harry?—sonreíste tristemente—¡Hazlo!

—No te mereces ni siquiera eso …—te miró con desprecio antes de salir de ahí.

Cuando salió te sentaste en el sofá y te quedaste mirando la nada, ni siquiera fuerzas para llorar te quedaba, Harry había tirado por la borda todo lo que habían tenido. No había sabido escucharte y lo sentías en el corazón porque lo amabas, lo peor de todo era que lo amabas.

UNA NOVIA POR CONTRATO {harry styles y tu}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora