stray kids ; oneshots

WooLix ; Human Right

Woojin le dijo en un mensaje que pasaría a recogerlo a las nueve con el coche; a las nueve en punto bajó al portal de su edificio y se encontró al chico esperando fuera del coche. En persona le pareció todavía más guapo. Cuando el chico se dio cuenta de que Felix lo veía le mostró una sonrisa algo nerviosa y Felix, como era de esperarse, se sonrojó e intentó saludarle sin parecer torpe. Eso no salió del todo mal, y pudo acercarse al chico sin caerse ni temblar.

-¿Estás listo, Lix? Tengo una pequeña sorpresa.

No se esperaba que le tuviese algo especial preparado, pero lo agradeció. No era bueno en citas que incluían cena romántica o cosas típicas de las citas a ciegas. Montaron en el coche y al encenderlo, empezó a sonar la radio. Felix no se lo podía creer.

-Woojin, ¿te gustan The Strike? -Una sonrisa se plantó sobre los labios del más joven.-

-Es uno de mis grupos favoritos, ¿te gustan?

-Digamos que también es mi grupo favorito.- Definitivamente el chico tenía algo especial.-

-la canción que suena en el coche.-

Sin evitarlo, Felix se puso a cantar la canción que sonaba y Woojin le acompañó al instante. Era una de sus favoritas porque la sentía muy suya, como si él la hubiese escrito. Y llevarla de fondo mientras observaba como la ciudad se alejaba por la ventanilla del coche le producía una felicidad indescriptible. Se giró y en silencio, observó como el chico conducía y la cantaba. Se veía increíble, como un sueño.

'' I used to run with the ghosts of my hometown. ''

Su voz sonaba dulce y masculina; el perfil de su rostro era algo fuera del mundo que Felix conocía, nunca había conocido a un chico tan atractivo que estuviese interesado en él. Eso le hizo sentirse más seguro consigo mismo. En uno de los semáforos, el coche se detuvo y Felix se atrevió a acariciarle la mano que tenía la palanca de cambios, consiguiendo que Woojin depositase un beso sobre su mejilla. El coche arrancó de nuevo y Lix, sin despegarse de su sonrisa, volvió a ver la ciudad a través de la pequeña ventanilla. Las luces se alejaban de ellos con rapidez, y por primera vez, apreció lo bonita que se veía de noche.

Y quiso perderse aquella noche con aquel chico.

'' I get lost but I'm never gonna let you down. ''

Entraron en la carretera que los llevaba hacia las afueras, la ciudad había pasado a un segundo plano de nuevo, y se encontró volviendo a depositar toda su atención en el chico que llevaba al lado. Woojin, bajó ambas ventanillas y Felix sacó uno de sus brazos por ella. La brisa se sentía cálida a pesar de que ya era noche cerrada.

-Estamos a punto de llegar, Lix. -Notó como la voz del mayor temblaba un poco, no era el único nervioso.-

Estaban yendo hacia el puente que se inauguraría dentro de dos días. Debajo del puente cruzaba un río y en él se reflejaba el cielo iluminado por las estrellas y la luna -que estaba en cuarto creciente- Felix no se creía que pudiese entrar allí. Siempre había querido estar en un puente de noche.

El mayor paró el coche, girándose hacia Felix. Maldito, Chan. ¿Por qué siempre tenía razón? Aquella sería la mejor noche de su vida.

-Me comentaste que te encantaría estar en un puente de noche y, por casualidad, me llevo con el ingeniero....Se me ocurrió traerte aquí. No sé si es algo cutre pero...-Felix se había lanzado a sus brazos. No se lo podía creer.-

-Esto es...joder, me encanta. Gracias, Woojinnie. -Los brazos del mayor rodeaban su cintura con cuidado, acariciándola despacio.-

-¿Quieres verlo desde fuera?

Los dos chicos salieron del coche y se adentraron en la nueva construcción; su amigo le había asegurado que no habría nadie, podían estar tranquilos. Woojin tomó la mano de Felix, quien entrelazó los dedos sin dudarlo. Estaba fascinado con las luces del puente, que tenía un color blanco que podría colapsar al de las estrellas. Se sentía pequeño, en el mejor de los sentidos posibles.

-Lix, falta algo. Dame un segundo.

Woojin corrió hacia el coche y abriendo las puertas, encendió la radio y subió el volumen. Human Right empezó a sonar y Felix a bailar con la canción. ¿Qué diría su amigo se lo viese en ese momento? En un puente, de noche y bailando con aquel chico como si fuese la última noche de su vida. Viviendo.

'' So, do you wanna be my lover tonight? ''

Las manos de Woojin tomaron su cadera y lo acercó a su cuerpo; sus brazos no tardaron en rodear el cuello del más alto, apoyando su frente en la del chico mientras sus cuerpos se movían sintiendo como la melodía los envolvía.

'' Tell your story, lean in close and show me what I need to know ''

Los labios del más joven se acercaron peligrosamente a los del mayor, quien sin pensárselo, atrapó el inferior y lo atrajo más hacia él. Sus labios encajaron como si fuesen hechos para ello. Felix ladeó un poco su cabeza para poder profundizar más el beso, entreabriendo sus labios para que las lenguas pudiesen bailar.

Su diestra se dirigió al pelo del chico, enredándose con un par de mechones rebeldes. Llevaba toda la noche queriendo hacerlo, acariciar el sedoso y oscuro pelo del coreano. Era incluso más suave de lo que se había imaginado. Notó como sus piernas se elevaban, y supo que no sólo él buscaba más contacto, rápidamente sus piernas rodearon el torso de Woojin.

'' And I can tell that you're here for help oh boy you're not foolin me. ''

Su cuerpo fue apoyado en el capó del coche; en ese momento los besos se volvieron más suaves, inclusive cariñosos. Cuando se separaron a por aire, ambos tenían las respiraciones alteradas y estaban sonrojados. Woojin lo envolvió entre sus brazos y Felix se permitió apoyarse en su hombro, abriendo los ojos para grabar aquello en su memoria.

Giró su rostro e hizo lo mismo con la carita de Woojin, besándolo de nuevo antes de bajarse del capó para bailar de nuevo. Llamando al chico para que lo imitase. Ambos estaban en su mundo, la única diferencia es que ahora lo compartían.

'' Moving is the only way to heal your soul. ''

No tardaron en correr juntos por hasta el final del puente, gritando y riendo como dos locos. Abrazándose a medio camino, para que Woojin lo levantase y diese vueltas en el aire, bajando de nuevo al suelo con la sensación de haber volado. Su alma se sentía ligera.

Sus miradas conectaron de nuevo; las luces se reflejaban en los ojos negros del mayor, formando pequeñas constelaciones que tintineaban cuando sonreía. No pudo evitar besarle de nuevo, no quería luchar contra lo que estaba sintiendo. No tenía sentido.

No olvidaría aquella noche nunca.

'' Dancing is a human right. ''