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Carly siempre me había alentado a defenderme, siempre me decía que se tenía que estar preparada. Para Evolet era una alocada idea ¿preparada? ¿A caso sus hijos iban a entrar al ejército o ser perseguidos por una horda de asesinos? Ridículo. Sus madres tenían diferentes puntos de vista al resolver un problema y por más que lo intentaban no podían llegar a un acuerdo.

Siempre me divertían las peleas tontas entre mis madres (exceptuando aquellas recientes sobre mi orientación sexual) me era agradable ver como a pesar de discusiones mis madres se amaban.

Pero ahora al ver como Ryan me miraba con su sonrisa llena de cinismo y desprecio todos los consejos de mis madres no los recordaba, aunque desechara la idea de temer y mostrar una vez más mi parte vulnerable no pudo evitar temblar en los brazos de Michael.

—Audrey ¿te encuentras bien? Estas temblando.

No hizo ninguna falta responder a su pregunta.

— ¿No es una pareja preciosa? Sabes Audrey al verlos quise hacer uso de mi don para las fotografías pero ya que estaba acompañado quise pasar a saludar —Sentía la palma cada vez más sudorosa de Michael apretando mi antebrazo, su cara estaba muy pálida y no encontraba palabras para decirle que todo saldría bien. —No quise ser descortés con el traidor y la pequeño hetero.

— ¿Qué es lo que quieres Ryan?

La verdad ni siquiera quería saber la respuesta, deseaba salir pitando de allí con Michael pero seis personas contra dos no era muy alentador.

—Darles una pequeña lección por supuesto, pero me asegurare con mis amigos que la tercera sea la definitiva —Mire asustada a Ryan, no quería golpes otra vez, estaba agotada de eso y sabía que serían mucho peor. Mire aterrada buscando los guardias que paseaban por el parque —No te preocupes Audrey, antes de que alguien pueda oír los gritos ya será demasiado tarde.

Miro con suplica a Michael ¿A caso se iba a quedar callado? No entendía porque no trataba de tranquilizar a Ryan. Di un tirón a su mano para que reaccionara. Demasiado tarde.

Ryan me separo de Michael arrastrándome por el cabello, sentía un dolor insoportable en este e intento arañar y golpear sus brazos para que me suelte.

— ¿Pero qué demonios haces Ryan? La estas lastimando idiot…

Uno de los amigos de Ryan le dio un puñetazo en el vientre a Michael evitando su frase, dos chicos más lo sujetaron.

Tenía tanta impotencia, estaban lastimando a mi chico de ojos negros y no podía hacer nada. Pataleaba y me zarandeaba con brusquedad por lo que los otros restantes me inmovilizaron. Me sentía estúpida y débil.

Poco a poco mi cuerpo y cara se fueron llenando de moretones y sangre al igual que los de Michael, aun así no cese mis gritos de auxilio.

—Para Ryan, por favor —Machael escupió saliva mezclada con sangre —Por favor.

— ¿Por qué lo haría?

—Porque ella solo ha sido un error.

De todos los golpes que había recibido ese fue el más doloroso.

¤ ¤ ¤ ¤

Lo siento por hacerlos esperar tanto. Yo también soy lectora en esta plataforma y me saca los mil colores cuando el escritor o la escritora no actualizan.

No voy a sacar excusas tontas. No estaba ocupada (si lo estuviera, hubiese sacado un efímero tiempo para escribir algo), Estoy perfecta en salud, mi familia está bien, no me secuestraron, no estaba descubriendo la cura contra el cáncer, no estaba firmando la paz mundial.

Simplemente no tenía inspiración. Lo que publico es sobre la marcha, ni yo misma sabré que pasara al final. Tenía pequeñas ideas pero no salían como esperaba al plasmarlas en papel o mejor dicho en pantalla.

Creo que mí tiempo de sequía lo he superado, lo siento de verdad haberlos hecho esperar y agradezco aquellas personitas que me escribieron preguntando mi estado.

Aquí les traigo dos nuevos capítulos, espero que los disfruten.

Por cierto he editado los capítulos anteriores, no alteraran los capítulos siguientes. Si gustan pueden releer la historia y comentarme si les ha gustado el pequeño cambio.



18/02/2019

DifferentWhere stories live. Discover now