2. Janis

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Esa mañana había despertado como cualquier otra de fin de semana, con la diáfana luz del Sol filtrándose por las persianas, estiró sus brazos y se levantó de la cama sin ninguna prisa, se dirigió al baño, lo primero que hizo fue mirarse al espejo, sin dejar de notar algunas imperfecciones en su cuerpo, algo que no cualquiera vería pero que a ella la atormentaban cada mañana.

Lavó su rostro con agua tibia, se colocó una bata encima de su ropa para dormir, mientras bajaba las escaleras saludó de buena manera a las personas a su alrededor, se sentó en el gran comedor, la recibieron de inmediato con una taza de té caliente, perfecta para cada mañana.

- Buenos días, Elisa ¿Sabes si mi padre ya despertó?

Elisa era una de las empleadas domésticas de medio tiempo.

Su padre le había prometido un desayuno sólo para ellos dos, Janis quería hablarle acerca de un nuevo papel que había conseguido en una obra de Shakespeare, interpretaría a lady Macbeth, algo que la tenía bastante emocionada.

- ¡Ah! El señor Giorgio...Tuvo que salir muy temprano, pero dijo que estaría aquí para la cena.

Elisa se dirigió a la cocina, Janis suspiro pesadamente.

- Ni si quiera cenaré aquí - dijo para si misma.

Se había vuelto habitual que los planes de compartir la mesa con su padre se quedarán en eso, en sólo planes.

Aunque Janis no se sentía capaz de reprocharle algo, tenía una vida envidiable, nunca había trabajado por nada y a pesar de eso poseía casi todo lo que deseaba, prueba de ello era la ociosa vida que llevaba.

Pensaba que su padre tenía cosas más importantes que hacer que lidiar con una adolescente de 16 años.

Al terminar su desayuno, que consistió únicamente en una taza de té y un plato de frutas, se alistó para pasar un rato en la piscina.

Se vistió con el bañador de dos piezas que había comprado la tarde anterior, después de clases, lucía bien en su esbelto y joven cuerpo, pero parecía no ser suficiente. Aunque su jardinero disfrutaba la vista, de pronto cortar los rosales que se mantenían apacibles a pocos metros de la piscina le resultó una idea irresistible, el chico rondaba entre los 20 años tal vez , a Janis nunca le había importado preguntar su nombre ni mucho menos su edad, pero gozaba de los "inocentes" coqueteos, disfrutaba como la veía y fingir que ella le correspondía, pero tan sólo de pensar en él intentando algo más con ella...Simplemente le era insoportable.

Se perdió en el agua un par de minutos más, nadando de un extremo a otro, era curioso como miles de pensamientos podían cruzar por su mente debajo del agua, le era entretenido torturarse con la idea de Thomas siéndole infiel, no, no se trataba de amor precisamente, pero ¿Que dirían los demás? ¿Que dirían sus amigos?
Su padre desconocía la existencia de un noviazgo, Janis pensaba que muchas veces él la tomaba por un ser asexual o por una inofensiva niña de 9 años, que absurdo.

No es que siempre haya sido indiferente con ella, las cosas cambiaron tras las muerte de su madre cuando ella tenía 11 años, es como si ella hubiese sido el lazo que los mantenía unidos, que los hacía ser una familia.

Cualquier persona pensaría que su padre se había convertido en un adicto al trabajo después de la muerte de su esposa, pero Janis sabía que había algo más. No podía culpar a su padre por salir con mujeres, no podía culparlo por intentar seguir con su vida, aunque eso consistía dejar a su única hija sola la mayor parte de la semana.

Tendió una toalla en el recién cortado césped, protegió sus ojos con unos lentes de Sol, jugueteó un poco con sus dedos e intentó no mirar cuando se sintió observada por el hombre frente a ella.

Backstage Queens (PAUSADA)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang