Capítulo 23 Vuelta a casa

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Al llegar a su casa, Samuel comenzó a cantar a voces de la alegría, de tener un peso menos encima ya que sus amigos les apoyaban en todo. Fue hacia la cocina aún alegre y se preparó algo de comida recordando que sus padres volvían hoy a casa. Les echaba de menos, se notaba su ausencia en casa, además ahora debería informales de los cambios en la relación con Willy.

Cuando terminó de comer, limpió todo lo que había utilizado y se fue a grabar ya que aún no había preparado ningún vídeo. Encendió el ordenador y mientras se cargaba todo miró Twitter e hizo un par de cosas más hasta que se cargó todo. Abrió Skype y Luzu estaba conectado así que le llamó y al minuto le respondió.

-Hola Luzu. - saludó sonriente.

-Hola Vegetitta. - sonrió de manera pícara.

-¿A qué viene esa sonrisa? - comenzó a reír.

-¿Así que vienes a Los Ángeles con Willy? - continuó con su anterior sonrisa.

-Sí, pasaremos más tiempo juntos. - sonrió algo nervioso.

-No no no, yo no quiero molestar no vaya ser que interrumpa algo de pareja. - dijo serio y negando con las manos.

-Qué chaval... -suspiró.

-Es verdad, si vais a vivir solos no voy a ir yo a interrumpir. - continuó fingiendo seriedad.

-Si vas a estar todo el día mareando. - estalló en carcajadas.

-Yo no mareo, yo me preocupo por vosotros, por vuestra relación, si sois felices, si usáis protección... -comenzó a reír de manera incontrolada.

-¡Luzu! - gritó Vegetta sonrojado.

-Es mi deber como amigo. - dijo entre carcajadas y casi sin poder respirar.

-Chaval... cállate, cállate... no vaya a ser que no os visitemos nunca. - se puso serio.

-Vale, me calmo... - tomó aire.

-Mejor... ¿jugamos a algo? -dijo calmando su enfado.

-Me apetece jugar a GTA... por cierto... - sonrió de lado- ...Lanita está muy emocionada con lo vuestro y se alegra mucho de que vayáis a vivir juntos en Los Ángeles.

-Me alegro de que se lo haya tomado tan bien, pero ¿por qué se lo has dicho sin permiso? - preguntó algo mosqueado.

-Porque es mi novia y ahora vamos a vivir los cuatro muy cerca. -respondió burlón.

-Vale... vamos a jugar ya. - sonrió y dio una palmada.

-¿Solos tú y yo? Llama a alguien más a ver si se te pone celoso Willy. -no contuvo la risa.

-Pues voy a llamar a Willy a ver si quiere jugar. -sonrió- Tú mientras ves llamando a Frank y a Alex.

-Vale, ahora hacemos una llamada los cinco. Adiós. - se despidieron y fueron a llamar a los otros.

Willy llegó a casa feliz y su madre asomó la cabeza hacia el pasillo desde la cocina. Le sonrió y se acercó a él, le dio un beso en la mejilla y le dijo que ya iban a comer.

-Hijo, ¿qué tal ha ido? -preguntó alegre su madre cuando ya estaban todos en la mesa.

-Bien, tendremos que ir tres días por la mañana y por la tarde y vamos a estar nueve youtubers. Yo creo que irá todo muy bien y que gustará mucho. -respondió con mucha alegría en sus palabras.

-¿Cuánto falta para eso? - preguntó curioso su padre.

-Un mes o algo así. Debemos comenzar a avisar pronto. -continuó sonriendo.

El hilo rojo WIGETTAWhere stories live. Discover now