Un estudiante de danza (Park Jimin) con un cuerpo envidiable y unos ojos penetrantes es secuestrado a los 18 años de edad por un acaudalado señor de 45 años, quien le ofrece una vida de lujos a cambio de sexo, aunque realmente Jimin no tiene opción...
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Shanghai, China | Hoy
—¿Es él?— preguntó Lee Joo Hyuk, mientras veía la foto en sus manos. En esta aparecía un joven rubio caminando en la calle, sin percatarse del espía que le tomó la foto. —Si señor, él es Park Jimin— dijo el hombre vestido de traje negro. —Dame una descripción— pidió el hombre — 18 años, 1.85 de estatura, tipo de sangre RH nulo—Joo Hyuk torció su boca en una mueca, lo más parecida a una espantosa sonrisa. —Lo quiero
Los guardaespaldas se pusieron en marcha, tomaron sus cosas y se dirigieron al Aeropuerto Internacional Pudong, tomaron el primer vuelvo con destino a Corea del Sur y en menos de una hora llegaron a Seoul, depues tomaron su segundo vuelo a la ciudad de Busan. Al llegar a la ciudad, una camioneta negra blindada los esperaba en el aeropuerto, habían obtenido previamente el horario del chico y gracias a su espía conocían todos los caminos que recorría, las clases que tomaba, los lugares a los que asistían, básicamente la agenda completa del rubio, lo cual les facilitó la búsqueda.
Se había hecho de noche, llevaban aproximadamente treinta minutos esperando al otro lado de la calle, estacionados en la cera de enfrente de Busan High School of Arts. Minutos después escucharon a unas personas conversando, la puerta principal se abrió y de está salieron dos personas: una chica pelirroja y un chico rubio.
—Objetivo onfirmado
Lo miraron bajar de las escaleras, se despidió de la chica con un abrazo y comenzó a caminar a su casa, tomó su celular y se puso los audífonos. Los guardias encendieron el auto, y discretamente comenzaron a seguirlo.
Busan, Corea del Sur | 2 horas antes J i m i n
Ese día hacia más calor de lo habitual, pero aún así decidí traerme una bufanda, ¿Por que lo hice?
Faltaban aproximadamente 2 horas para que mi clase de danza contemporánea acabara, y sabía que iba a estar exhausto después de la práctica, esta danza siempre me deja sin energía.
Aún así, amaba asistir a mis clases ya que lograban distraerme de toda la mierda que sucedía en casa, pero ese día simplemente no lograba encerrarme en mi burbuja y olvidarme de todo, algo me preocupaba y no sabía exactamente qué era. Pensaba que podía ser la manera extraña en la que mis padres actuaban esta mañana, o quizá estaba demasiado presionado por la presentación de fin de año. No lo sabía con certeza, pero ese día algo no se sentía bien. Decidí ignorarlo y sin prestar atención en nada, más que en mis movimientos, en coordinar mi cuerpo y mi mente.
Sonó el timbre, indicando que las clases habían llegado a su fin. Me puse mis sweatpants negros arriba de las mallas deportivas y mi rompe-vientos encima de mi tank top. Recibí un mensaje de mi mamá diciendo que no podía pasar por mi por lo que debía caminar a casa, solté un suspiro, realmente estaba exhausto como para caminar hasta casa. En el pasillo me encontré con Lisa, amiga de la infancia, ella estaba en la clase de belly dance, cuyo salón está justo al lado del mío.
