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  ⚠ Smut. 

Jimin está harto de él, claro, pero también lo desea desesperadamente.

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El cliente habitual, con las bebidas dulces que ordena y su cabello castaño. Él siempre viene con una sonrisa desagradable en sus labios, pero sus ojos suaves. Él nunca da propina, pero ofrece una sonrisa que se supone que es suficiente paga.

Park Jimin está harto de él, por decir lo menos. No solo está harto de él, sino que está intrigado, molesto, curioso y, sinceramente, cada vez que el hombre entra, solo con verlo siente cosquillas en su estomago y su cuerpo hormigueando. Jimin es un chico muy dulce pero esa dulzura desaparecía solo con ver esos hombros anchos, esa pequeña cintura y esas caderas.

Jimin está harto de él, claro, pero también lo desea desesperadamente.

A veces en su mente se imagina todo lo que le gustaría hacerle a ese hombre. Se imagina situaciones como sujetar al niño contra la pared de esta cafetería, susurrando cosas sucias contra esa oreja mientras sus labios lo muerden. Tal vez la inocente cara de Jimin engaña a la gente, pero detrás de ese tierno rostro tiene pensamientos bastante obscenas.

Ese chico. Jin Él no está ayudando a Jimin ni un poco a ocultar ese lado rudo de él. Todo lo que hace es mirarlo, y sin embargo, solo con esa mirada sentía que la bestia enloquecida y... bueno, lo ponía bastante cachondo. Siente que va a perder el control. Ese hombre lo excitaba demasiado y eso lo hacía enojar, como es que con solo su presencia jodía su cabeza de esa forma.

Hoy Jin viene como de costumbre, con una sonrisa torcida en las comisuras de sus gruesos labios. Jimin sonríe a la señora que está pagando su bebida, asintiendo agradecida dejando el lugar, y luego él vuelve su visión hacia el chico que se aproxima, por lo que veo, todo lo que tiene puesto es probablemente Gucci. Muestra un clásico dandy Gucci con su traje de tres piezas, su corbata con estampado y su bolso, le queda muy bien, su pantalón resalta su cadera y esa camisa sus anchos hombros. Seguramente viene de su trabajo

"¿El habitual?" Jimin pregunta, forzando una agradable sonrisa en sus labios. Jin sonríe y asiente, sus mejillas están enrojecidas, sus dedos sobre el bulto en su bolsillo para sacar su familiar billetera negra.

"agrégame un donut. Me siento muy hambriento hoy"

"No hay problema". Jimin va al gabinete acristalado, "¿qué sabor te gustaría?"

Jin sonríe, más de lo que debería, y Jimin lo mira expectante. "Sorpréndeme". Lo dice con un guiño, con un gesto burlón. Jimin está tan harto que está a punto de derribar la barrera entre ellos, de ver cómo se rompe el cristal y la comida repartida por el suelo. No lo hace, simplemente vuelve la cabeza hacia los pasteles, escoge uno con relleno de arándano y lo mete en una bolsa de papel.

Al darle a Jin su bebida y el donut, Jimin le da la sonrisa habitual: "Que tengas un buen día... Jin".

"Igualmente"

El hombre sale, dejando solo con él el eco de un cuarto dando vueltas y vueltas en la jarra de la punta en el mostrador.

Jimin agarra su polla, tirando de su puño hacia arriba y hacia abajo con movimientos largos. Su cuerpo está sudoroso, su cabello espeso sobre su frente, las piernas abiertas, sentado en el retrete. Empieza a jadear y gemir con el bombeo de su polla. Está absolutamente seguro de que no debería estar masturbándose en el baño de la cafetería, pero no puede evitarlo.

"Ahh... Jin...", deja escapar, con la voz quebrada y profunda en su placer. Él pone su mano en su cadera, yendo más duro y más áspero a su clímax. "Mm, ah mierda, Jin!"

BTS x Jin BottomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora