Little brown secret

they come straight for your heart

—hoy se venga la muerte de Gemma Styles — tras el grito de su padre los hombres cambiaron a lobo y empezaron a correr, solo 3 se quedaron montados sobre grandes caballos negros, su padre el rey y al lado su hermoso hijo, Harry portaba una capa color carmín, traje de guerra y una corona que marcaba su puesto como futuro heredero, a la izquierda el general Luke, lobo temido y respetado por todos se decía que este tenía un corazón de hielo, que nadie podía ablandarlo.

— siguió pensando en lo incorrecto que es esto padre, no podemos causarles el mismo dolor, no seríamos mejores que la basura que mató a mi hermana —

— con suerte y está un familiar de el asesino de la nieve en la aldea — gruñó el rey espoleando su caballo, dejando una nube de polvo tras el.

— estás sentado sobre un corcel, con una gran capa y la corona sobre tu cabeza, mostrándole a todo el mundo que eres el príncipe pero yo veo lo que eres realmente Styles, eres un cobarde que le teme a la batalla, eres un cobarde al que no le importa vengar la muerte de la princesa — dijo Luke antes de partir, Harry odiaba a ese lobo, era demasiado sanguinario para su agrado, era el rival de louis, Harry sabía que se habían enfrentado unas cuantas veces incluso llegó a sospechar que este cayó en el encanto de Tomlinson.
Así como caíste tu.
Quizá era débil por lo que estaba a punto de hacer, quizá era un cobarde que no merecía heredar la manada, pero no dejaría que su manada acabara con sangre inocente.

—es ahora o nunca — se quitó la ropa y la escondió en un árbol, cambió a lobo y salió corriendo, se mezclaría entre los lobos guerreros pero no para matar, si no para poner a salvo a la mayor cantidad de lobos blancos que pudiera, esperaba que louis o niall le hubiesen hecho caso, harían su trabajo más fácil.

Al llegar al lugar que un día fue un tranquilo mercado, ahora estaba lleno de caos, casas incendiándose y lobos peleando, los lobos blancos que estaban ocultos tras los árboles esperando la llegada de su enemigo saltaron al ver una ola negra llegar por el puente, pero no fueron tan rápidos como para impedir que uno soltara un fósforo sobre la paja, Harry vio con horror lo que lo rodeaba, lobos negros matando blancos, lobos blancos matando negros, omegas blancos protegiendo a sus cachorros de los grandes lobos negros, sin importar que fueran 3 contra 1, su mirada se dirigió directamente a una casa al borde de caer por el fuego, en ella una pequeña oreja blanca se asomaba de entre los escombros, harry corrió hacia allí tomando al cachorro y sacándolo de el lugar en ruinas, una vez que se encontraba a salvo, el pequeño lobo cambió a humano, llamando a su madre, harry entró a la casa y tomó a una omega inconsciente por el humo, con mucho trabajo la arrastró fuera de la casa justo a tiempo, pues al salir se derrumbo.

Harry corrió y siguió auxiliando a la mayor cantidad de cachorros posibles, cuando se encontró con un lobo blanco que lo miraba fijamente, el lobo se lanzó sobre harry, quien fue más rápido y logró esquivarlo, pelearon por unos minutos, cuando harry por fin lo tenía sujeto, el lobo cambió a humano y tomó un cuchillo que se encontraba entre la tierra clavándoselo en el cuello y huyendo lo más rápido que pudo.

Harry ignoró el dolor y miró el cielo, estaba atardeciendo, recordó la promesa que le hizo a louis, hizo acopio de todas sus fuerzas y se dirigió a la cueva .

***************

Brendan siguió a louis, quien se había levantado rápidamente y había salido de la cabaña como lobo perseguido por el diablo, este llevaba una mano en su cuello, como si protegiera su marca y miraba al cielo cada pocos segundos.
No fue demasiado difícil adivinar que pasaba.
Louis acababa de sentir que harry estaba en peligro mortal y su lado animal había tomado el control.

Al darse cuenta de lo lejos que estaba de la cueva louis cambió a lobo y corrió

—Y el idiota decía que no cambiaria a lobo por nada de el mundo — dijo él omega entre dientes antes de suspirar y seguirlo, no sabía si era lo correcto, quizá debía dejarlo ir y esperarlo con una cabaña caliente como le habían dicho sus padres que un buen omega hacía, nah ese no era el pensó, corrieron unos kilómetros hasta llegar a un claro.