Capítulo 4: Sentir

303 36 18
                                    

Holi, perdonen la demora, la vida me consumía, pero hago acto de presencia u-u.

Gracias por leer! Es un capítulo bien largo, pero cortarlo se me hacía no-cool. Perdón si me comí acentos o palabras, tengo hambre, ñami.


TOUCH & Sketch

Capítulo 4: Sentir


El tintinear de las copas, las risas y algarabía alrededor resaltaba lúgubremente la mesa para doce. Once personas y una silla libre. Ya comenzaban a murmurar y mirar al reloj.

Hana apretó el mantel y cabizbaja se tragó las lágrimas.

—¿Aún nada? —preguntó SangHyuk en un murmullo a WonSik, sentado a su lado. El hombre colgó el celular y bufó.

No atendía el teléfono.

—N-No... —ambos miraron de soslayo a la prometida.

—¿Hana? Eh... —WonSik estiró a alcanzar su mano y le dedicó una sonrisa para confortarla. El mesero cruzado de brazos esperaba la señal para servir la cena. Las copas con agua gasificada hacía mucho estaban vacías.

—Ha de ser el tráfico, esperemos un poco más —trató de animar su hermana. Hana remordió sus labios y asintió.

—Su hijo es un sinvergüenza —escupió su padre con asco sin quitar los ojos del padre de HongBin— ¿De quién aprendió a abandonar a su mujer una noche antes de la boda? —burló socarrón— ¡Falta a una cena! ¡Una jodida cena! ¿Qué quedará para el futuro?

—Yo le había advertido a ella que ese era un inútil como hombre...

—¡Mi hijo no es de esos! No me quedaré aquí soportando sus insultos —defendió soltando su copa vacía. La madre cabizbaja quería llorar de vergüenza— Cielo, debe estar atrasado, nada más. Él no te haría eso —Hana asintió pese las cejas fruncidas hacia abajo y los labios temblorosos.

—¡Es hora de que digan la verdad! ¡WonSik, SangHyuk! —reprendió alguien más.

—¡Yo no sé nada, se los juro!

Cada palabra era una estocada para ella.

El padre de Hana se levantó de golpe y abandonó la mesa entre maldiciones. Su mujer le persiguió preocupada.

—¡Como lo vea mañana le parto la cara! —bramó antes de salir del restaurante de un portazo.

El silencio prevaleció para volver a esos murmullos odiosos, donde ella era protagonista, pero no como había soñado alguna vez.

SangHyuk chasqueó con la lengua y desvió la mirada a otra parte.

Dos horas de retraso, no atendía llamadas ni mensajes y nadie sabía dónde estaba.

Más bien...

Sólo él, posiblemente.

Miró a Hana.

••••••

Sus dedos se engancharon a la ropa interior.

Se relamió los labios y se volvió a mirarle.

Sin tocar su corazón sabía que lo estaba enloqueciendo.

Siempre lo lograba, con cualquiera.

—¿Quieres que te parta el culo? —preguntó. HongBin palideció, haciéndole reír travieso— Dios... Todos reaccionan así.

Touch and Sketch (LeoBin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora