XI. Vayan a la página 394.

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XI. VAYAN A LA PÁGINA 394.


AQUILA NUNCA HABÍA VISTO A LEO TAN ENFERMO COMO LO hizo ese viernes; dos días antes de la luna llena en noviembre, y por lo tanto le había pedido que descansara en su cuarto después del almuerzo. A pesar de que había querido quedarse con él, tenía clases en las que ayudar, así que después de darle un beso en la frente y dejarlo con una taza de chocolate caliente y un libro, salió corriendo de su habitación y miró su reloj. Gimió al ver que eran las una y un cuarto.

Casi un mes había pasado, y Remus y Aquila habían regresado a ser lo Remus no querían que fueran: compañeros de trabajo. Todo fue con la idea de hacer lo mejor para su hijo; por lo que ignoraban los persistentes sentimientos que aún pudieran tener hacia el otro.

Pero el cuerpo traicionaba la mente y cuando Aquila se detuvo fuera del salón de clases de Defensa Contra las Artes Oscuras, no pudo evitar sentir un pequeño burbujeo en su estómago.

―Siento mucho llegar tarde, profesor Lu--

Pero no era Remus quién la miraba desde el escritorio.

―Estaba empezando a preguntarme si había olvidado que asiste a esta clase.―Severus Snape se burló.―Cómo le decía a Potter, que también llegó tarde, acabamos de empezar.―luego, se levantó del asiento y se dirigió a la clase.―Baste con decir que el profesor Lupin se siente indispuesto para enseñar y me pidió que diera su clase.

Severus le dedicó una malévola sonrisa y Aquila frunció el ceño; no podía evitar preguntarse por qué Remus no le había pedido a ella que diera la clase. Después de todo, ella sabía exactamente su plan de estudios y ella era la profesora Asistente, lo más lógico es que le pidiera ayuda a ella.

―Ya que el profesor Lupin no ha dejado ningún registro de los temas que han estudiado...―continuó Severus pero Hermione Granger alzó la mano y lo interrumpió.

―Señor, hemos estudiado los boggarts, los gorras rojas, las kappas y grindylows――

―No estaba pidiendo información.―Severus la interrumpió esta vez, haciendo que la chica bajara la mano y se encogiera en su asiento, mientras el calor subía a sus mejillas.

philophobia ━ remus lupin. (2)✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora