Hermanas TERMINADA

Capitulo 40

Narra Yvonne:

Estaba muy borracha. Tan borracha que no podía siquiera mantenerme unos segundos quieta en la silla. Ivan también lo estaba, o eso parecía, no iba a dejar de tomar ni aunque mi propia hermana me lo pidiera. Nos quedamos casi toda la noche en ese bar, lo peor de todo es que mañana tenemos un día laborar super normal, de todos los días, y nosotros aquí ahogando este dolor en todo ese alcohol que ya he bebido y que lo seguiré haciendo. 

Me puse a prestar atención en que Ivan me miraba fijamente y sonreía cada vez que yo hacia algo gracioso, no había mirado lo bien que se ve. Nos quedamos un rato mas y luego, cuando las seis de la mañana se hicieron, nos fuimos. Ivan me dijo que iba acompañarme en el taxi hasta mi casa, casi no podía ni caminar. 

-Uou, tranquila, debes caminar despacio -Dijo sosteniéndome

-Riendo- Lo siento.. no tuve un buen día hoy -Dije- Necesitaba esto, emborracharme -Dije mientras no dejaba de balancearme

En un momento, pise a Ivan sin querer y comencé a reír, alrededor de su cuello pase mis brazos y quedamos frente a frente. ¿Por que no iba a pasarla bien esta noche? Lo bese tan apasionadamente, lo toque, le bese el cuello, necesitaba sacarme este dolor de encima y quería seguir pasándola bien. Ivan se quedo quieto unos segundos, pero luego de eso no se detuvo, me acorralo contra la pared pero frenamos cuando llego el taxi. 

-Se acerco a mi oído- Vamos a casa.. 

-Suspire- Vamos entonces.. -Dije con media sonrisa y volví a besarlo- 

Desperté con el sol en la cara, desnuda, envuelta en las sabanas de una cama de dos plazas, en una habitación que no recordaba como había llegado pero si recuerdo lo bien que la pase aquí. Mire hacia un lado, Ivan todavía dormía en las mismas condiciones que yo, sonreí. Mire el reloj, eran las 2 de la tarde. Suspire y me levante de una. Me cambie, tenia que ir a ver a mis hermanas, seguramente deben estar esperándome. Por suerte no tenia mucha resaca, gracias a Dios que no la tenia. Mire al hombre a mi lado, era hermoso, la verdad que fue una de las noches mas lindas que pase. Le deje una nota en la cocina diciéndole que tenia que irme, así que, tome otro taxi y me fui directo a la casa de Alegra. 

Cuando llegue, Ann estaba bajando de su auto, volteo rápidamente y se encontró conmigo que la miraba desde la puerta de la entrada de la casa. Ella era la que mas odio llevaba en su cuerpo, en su alma pero nunca lo había dejado salir. Me hizo una media sonrisa y entramos juntas a la casa donde ya estaban todas en el living. Emelie se puso de pie para darnos la bienvenida y nos dio a cada una, un vaso con whisky helado. Todas estaban con su vaso en la mano. Ann, sin decir ni una palabra, se sento en el sillon junto a Cecile.

-No quiero seguir bebiendo -Dije y deje el vaso- Ayer fue suficiente

-Emelie suspiro-

-Bien.. -Dijo Cecile- Hora de hablar

-Marie me miro-

-Mire a Emelie- Eres la mayor, comienza 

Emelie le dio un sorbo al whisky y sin dejar de mirar el vaso, aclaro su garganta y luego nos miro a todas. 

-Creo que.. cada una debe hacer lo que sienta. Por mi parte.. no voy a volver hablarle a esa mujer, para mi murió hace muchos años y hoy vuelvo a confirmar que esta mas que muerta 

-Ann le dio un sorbo a su vaso- Pienso lo mismo. Ella nos dejo por dinero, por su felicidad sin pensar en sus cinco hijas, criadas por un hombre que dejo todo por nosotras. 

-Emelie me miro- Tu turno..

-Trague en seco- Estoy en la misma que ustedes dos. Voto por el lado del odio

-No quiero volver a verla -Dijo Cecile-

Era el turno de Marie, pero ella solo opto por cerra los ojos y llorar sin parar. Las cuatro fuimos a su lado y la abrazamos con fuerza, nosotras sentiamos lo mismo que ella, ese dolor pesado, sin remedio alguno. Todas comenzamos a llorar junto a Marie. Ella era la unica que nunca pudo sentir nada, ni amor, ni odio, ni soledad, ni nada, ni siquiera pudo sentir un poco de calor materno. 

-Lo importante de esto.. -Dijo- No es cuanto odiamos a esa mujer.. sino... -Llorando- que seguimos unidas..

-Siempre -Dijo Cecile-

-Nunca las dejare, hermosa -Dijo Emelie-

-Sonriendo se aferro al abrazo- Como no amarlas -Dijo Ann

-Hermanas -Dije-