Maldito Romeo

19 "Algunas lágrimas"

Capítulo 19

Max hizo que nuestras frentes se chocaran, me iba a besar, pero fue interrumpido por Lea.

-¡Chicos la película esta por empezar!- se nos quedó mirando por unos segundos hasta que habló- Veo que los tórtolos se reconciliaron.-alcé los hombros.

-Eso parece- dije y Max me miró sonriendo de oreja a oreja.

Lea tomó mi mano para llevarme hasta la sala y detrás nuestro estaba Max tratando de seguir nuestros pasos. Nos fijamos los números de los asientos  que nos habían tocado para buscarlos y ubicarnos en ellos. James encontró nuestros lugares, él se sentó en la punta, a su lado Oli, le seguía Lea  junto a Sam, yo después de él y por último Max en el último asiento al lado mío.

La película acababa de comenzar y nos empezábamos a pasar el paquete de palomitas de maíz. Habían pasado pocos minutos y sentí la mano de Max sobre mi pierna desnuda, me agarró un escalofrío por todo mi cuerpo. Hace tiempo que no sentía esta sensación que me volvía loca y nerviosa al mismo tiempo. Su mano comenzó a subir por mi muslo y cerré mis ojos y mordi mi labio inferior  para tranquilizarme y no estar encima de Max. Mi respiración se notaba más acelerada cuando llegó a la altura del short, así que la saqué la mano para entrelazar nuestros dedos.

-¿Te pones nerviosa Thompson?- me susurró al oído haciendo que mis vellos se me erizaran.

-No. ¿Por qué lo dices?- le pregunte tratando de estar lo más segura posible para que no se de cuenta.

-Tal vez porque tu pierna esta temblando-me dijo con una mirada divertida. Desvié  mis ojos a mi pierna que se movía sin parar así que puse mi otra pierna encima para que no sea tan notable.

-No es cierto- dije con la mirada fija en la pantalla.

-¿Ya te he dicho que eres una mala mentirosa?

En este momento me encontraba con la mano de Max y la mía formando una sola mientras que mirábamos la película. Los minutos pasaban y seguíamos en la misma posición  hasta que sentí como me invadía el frío en la mano de la que tomaba a Max, miré hacia mi izquierda y él ya no estaba. Me levanté de mi asiento mientras que Sam besaba a Lea y James le hablaba a Oli por lo tanto no notaron que ni Max ni yo nos encontrábamos allí.

-¿Max? ¡¿Max?!- No lo encontraba por ningún lado, llamé a su teléfono pero no contestaba.

Ay Max ¿donde te has metido?

Les pregunté a las personas que trabajaban allí si lo vieron pero nadie sabía. Bajé al garaje  y finalmente lo encontré sentado cabizbajo dentro de su auto; entré y ni se molesto para ver quien era.

-¿Estás bien Max?- le pregunte preocupada.

No recibí ninguna respuesta pero en ese instante escuché un sollozo y sin pensarlo dos veces me acerqué a darle un abrazo. Nos quedamos unos minutos en silencio hasta que habló finalmente.

-La película me hizo acordar a mi pasado cuando mi...-se le deslizaban varias lagrimas.

-Max no hace falta que me lo cuentes en este momento. ¿Quieres que nos vayamos?- le pegunté mientras que le secaba las lagrimas con mi pulgar.

-Si- dijo en un susurro que se me hizo difícil escuchar, pero lo entendí cuando asintió con la cabeza. Encendió el auto y nos dirigimos para nuestras casas.

Max ya estaba más tranquilo así que me acompañó a la puerta de mi casa. Las luces se encontraban apagadas ya que mi hermano se fue de viaje por una semana a una competencia de fútbol americano y mis padres se encontraban fuera del país por cuatro días por temas de trabajo, eso significaría que me las tendría que arreglar para cocinar en estos días.