★2★

5.7K 474 358
                                    

Siento algo posarse encima mio, abro los ojos y lo único que veo es oscuridad, trato de levantarme del sofá pensando que era de noche pero algo me toma de las muñecas y las lleva encima de mi cabeza con algo de fuerza.

Trato de hablar, pero las palabras no salen. Vuelvo a intentarlo pero una voz me interrumpe.

— Aquí no puedes hablar si yo no lo ordeno. — Abro de más mis ojos para acostumbrarme a la oscuridad, una luz dorada aparece lentamente enfrente mío que parecía una, manzana. — Así que te lo preguntaré una sola vez, ¿Como llegaste aquí? — Un esqueleto color negro con tonalidades doradas era el que estaba encima mío aprisionando mis muñecas con fuerza.

— Yo... No lo sé, debería estar durmiendo en mi casa... Dormir... Esto en un sueño ¿verdad? — miro directamente a ese esqueleto, no me parecía raro ver uno ya que tengo un amigo así.

— Si estas soñando como demonios llegaste aquí si solo mi hermano y yo podemos entrar. — me miro desafiante.

— Ya te lo dije, no-lo-se, y ¿podrias soltarme? Me lastimas. — Lo miré de la misma forma.

— ... — No dijo nada, solo me soltó, logre sentarme estando el aún encima mio y sobandome las muñecas, de pronto salieron unos tentáculos negros de su espalda y volvieron a tomar mis muñecas pero esta vez con mas fuerza al igual que mis piernas. — Que humana tan irritante. — se acerca mas a mi rostro.

— ¡Sueltame maldito saco de huesos! — dije intentando sacarme de su agarre.

Este solo hizo mas fuerte el agarre haciendo que un par de lagrimas salieran de mis ojos, al verlo a la cara una sonrisa siniestra estaba plasmada en su rostro, pero, yo veía otra cosa, veía; dolor, sufrimiento, tristeza. Me quede viendolo unos segundos aún con lágrimas resbalando por mis mejillas, él se dio cuenta, iba a hacerme con uno de sus tentáculos pero se detuvo, se acerco a mi oído.

— Te llaman... — susurró muy suavemente a lo que yo no entendí de que hablaba. Luego sonríe con algo de compasión y me suelta. Yo extrañada lo miro para luego decirle algo... Las palabras no salen. — No puedes hablar. — fue lo último que escuche decirle.

Luego de eso el "techo" estaba cambiando de una fría oscuridad a una luz que te envolvía en calidez.

Desperté.

Me senté rápidamente en el sofá algo agitada y por el sueño que acababa de tener.

— _____, ¿Estas bien? — escuché una voz masculina sentarse al lado junto a mí.

Miré a mi izquierda y ahí estaba, un esqueleto con su típica sonrisa, pero con cara de preocupación.

— ¿Sans... Que haces aquí? — confundida toqué mi mejilla que estaba mojada por las lágrimas. — ¿Como entraste?

Él secó mis mejillas y me miró. — Primero; estoy aquí porque te llame cuatro veces y no contestaste y segundo; se te olvida que puedo teletransportarme. — Sans me sonrió acariciando mi cabeza. — Y dime ¿Que soñaste para que estés así?

—Yo... —¿Que diría?, ¿Que un Sans malvado y de color negro entró en mis sueños y casi m me mata? — ... No lo recuerdo...

— Pues debió ser muy malo como para no acordarte. — dirigió su mirada a mis muñecas. — ¿Y esto?

Miro mis muñecas y rápidamente me fijo en mis piernas. Tenían las mismas marcas que la había hecho aquel esqueleto, y aún solían.

— ¿Quien te hizo eso niña? — dijo en tono serio.

— No sé. — odio mentirle a mi cómico amigo.

Sans suspiró algo pesado.

—Bueno, cuando quieras decirme dímelo. Ahora tienes que cambiarte.

— ¿Eh, porqué?... — Sans se quedo unos segundos en silencio mirando expectante para que me acordara de... — ¡El cumpleaños de Asriel es hoy!, ¿¡cómo pude olvidarlo!? — salté del sofá yendo en dirección a mi habitación escuchando de fondo a la risa del esqueleto. — ¡Cállate Sans!







Capítulo 2 terminado

Espero que les haya gustado y a lo mejor en próximos capítulos haya un poco más de 7u7, ya saben, pero nada fuerte (ya que mis ideas no dan para tanto).

Y de paso digo que mis ideas no se me esta yendo tanto a la gaster madre :3.

~Hasta el próximo

★You saved me★ [Shattered Dream x Lectora]Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora