Capítulo 20

6.8K 633 19
                                    

- Papá, ¿estás cómodo o quieres que te ponga otra almohada?

- Estoy bien cariño, tú ve a descansar. Se supone que ya debes estar trabajando.

- Pero papá...

- Tu papá tiene razón, no te preocupes, vete tranquila, si pasa algo, te llamo. - dice mama quien no se les despega a papá ni un poco.

- Está bien, pero sepan que los quiero.

Apenas acabamos de llegar de mazatlan, mi papá se quedó cinco días en el hospital, por lo que tuve que posponer todo. Incluyendo la cita con el grandioso arquitecto Zamarripa, que ni es arquitecto y mucho menos grandioso, mas bien es un hijo de puta con buen aspecto.

Me arranco a mi departamento y llego directamente a tomar un baño. Uno muy reparador y grandioso baño.

Me pongo una pijama de franela y una blusa de tirantes, preparo un café y galletas, para después irme a mi habitación a ver una película.

Estoy muy augusto viendo a mi novio Viggo Mortensen en esa película de la mafia rusa... que hay dios mio. Odio a Naomy  Watts.

* Knoc- Knoc

A las 11 de la noche? Nop. yo no abro.

*Knoc- Knoc

Vete a la mierda quien quiera que seas

* NKOC- NKOC

Está bien, puede que el edificio se este quemando y yo ni en cuenta.

Me paro, tomo un suéter de esos delgaditos y mis pantuflas, tengo el cabellos suelto y todavía húmedo por el baño.

tocan de nuevo y le grito a quien sea que esté fuera: - ¡Ya voy!  ¡Escuche la puerta las primeras cien veces! ¡Dios!

Quito todos los cerrojos y abro la puerta.

- ¡¿Me extrañaste?! Yo a ti si...

- ¿Carlos? ¿Que haces aquí? ¿estas sobrio?

- No, no lo estoy... Mi Dios, te extraño como un loco... y ese... ese novio tuyo que no me dejaba acercarme a ti, a decirte que lo siento... que te amo

¿Que carajo?

- De quien hablas... sabes qué, pasa, no vas a manejar en esas condiciones.

Está como nunca lo vi en mi vida, descontrolado, desaliñado y ebrio. Carlos no bebe. O bebía. Lo llevo hasta la sala de mi casa y lo siento. Tiene la cabeza hacia abajo y por miedo de que vomite mi sillón, traigo el cesto de la basura.

- Carlos... ¿como te sientes?

- Mal. Me dejaste Raquel, después de tres años me dejaste. Iba a proponer te matrimonio, íbamos a tener una boda bonita y dos hijos. Nos mudaríamos a una bonita casa en el sur y todo seria genial.

- Carlos ahora no creo que sea el momento. Ya mañana que no seas una piltrafa humana hablaremos.

Asiente con la cabeza y lo vigilo por media hora para que no vomite y luego mi casa sea la escena de una muerte.

Se queda dormido y lo contemplo. Ahora está un poco mas en forma, y podría decir que mas guapo, pero está ebrio. Definitivamente no solo yo he cambiado.

Despierto con el olor a café inundando mis sentidos. Soy una loca del café, adicta, mas bien. Me estiro en la cama y miro el reloj que marca las ocho de la mañana.

Voy me lavo los dientes, y salgo. Cuando llego a la cocina, veo de espaldas a Carlos, quien tiene la cabeza baja y la mirada perdida.

- Buenos días. ¿Como te sientes?

La DecoradoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora