CAPITULO 5💕

128 11 2
                                    

«¿Realmente a qué viniste aquí si los odias a todos?»

¿Cuál era su problema?

-Odias a mi tía- continúa hablando cerrando el libro de golpe. Sus ojos oscuros se posaron en los míos, haciendo que instintivamente me perdiera en ellos. Había algo en su mirada que llamaba mi atención, pero aparté mis pensamientos acerca de sus ojos para contestarle de forma reacia.

-Pues, no sé si lo olvidaste, pero aquí vive mi padre.

No me contestó sino que abrió el libro continuando con su lectura o simplemente ignorarme.

-Así que los de su tipo leen - dije en un susurro más para mí, que para él, mientras caminaba de regreso a la casa. Pero al parecer, hablé lo suficientemente alto para escuchar su respuesta a medida que cerraba el libro de golpe.

- Pues, para perder el tiempo como tú, trato de distraerme, y no andar con cara de, "los odio a todos". -lo miré con saña queriendo queriendo decirle todas las palabras ofensivas en mi mente. Pero me contuve inspirando varias veces a medida que una sonrisa jocosa se dibujaba en mis labios.

 -Pues tú tampoco te quedas atrás. Necesitarás más que ese libro para esconder tu estúpida y horrible cara de ogro, por lo que resta del año.

-Pues deberías hacerme compañía. Necesitas esos libros más que yo -sin detener la ira que antes controlaba ,me acerqué quitándole el libro de sus manos. Me miró con el ceño fruncido por mi atrevimiento. 

No entendía cómo lo hacía para sacarme de mis cabales.

-¡Deja de meterte conmigo! ¿Me oyes? ¡No sabes con quién te estás metiendo!- le arrojé el libro esperando que le cayera en la cara, pero fue más ágil por lo que lo sostuvo a tiempo.

Me miró con diversión antes de volver a perderse en las letras del libro. No entendía por qué me molestaba tanto, todo lo que hacía.

-¿Me dejarás leer o ya quieres que te preste el libro para que escondas esa cara odiosa por un buen rato? -empuñé mis manos queriendo estamparla en su cara, para borrarle su sonrisa de diversión. No había sido buena idea haber venido.

-¡ERES LA PERSONA MÁS DETESTABLE QUE HE CONOCIDO EN TODA MI VIDA!-grité llena de cólera, lanzándole una mirada cargada de odio.

Me alejé a toda prisa de allí, porque si pasaba un segundo más, no sabía de qué pudiera ser capaz. 


-¿Dónde estabas? - Preguntó Ele, al verme entrar a la cocina. La miré con los ojos entornados al recordar el episodio con el insoportable.

-Pues estaba en el jardín, pero tuvo que aparecer el ogro insoportable para acabar con mi paz.

Sonrió causándole gracia mi comentario.

-Ele, es en serio. ¿Cómo soportan a ese...? No tengo palabras para dirigirme a ese... tipo. 

-Todos tenemos nuestras forma de ser.

-Él es un ogro, insoportable. Y ya cambiemos de tema. No le demos tanta prioridad a ese neandertal -volvió a reír haciendo que riera con ella. Estaba muy enojada, pero Ele con su risa contagiosa hizo que me uniera a ella. -¿En qué puedo ayudarte? -pregunté mientras me ponía de pie. 

-Tú sólo siéntate, que el almuerzo ya casi está listo.

-¡No, te quiero ayudar! - Exclamé entusiasmada. 

No objetó mucho, me permitió ayudarla a preparar almejas gratinadas. Aprendí a preparar ese exquisito plato gracias a papá. Cuando vivíamos juntos a él siempre le tocaba preparar la cena los viernes, y sólo sabía preparar ese plato. Al principio le quedaba horrible, pero luego después de horas de prácticas le quedaba delicioso.

Amarga Soledad |EDITANDOWhere stories live. Discover now