Dime que me quieres

Capítulo 15

Todos terminamos pronto ya que los cuatro teníamos bastante hambre. Justo después de comer nos fuimos a dar un paseo por la orilla del mar. Aida y Liam iban abrazados por la cintura y Harry y yo cogidos de la mano. Cuando llegamos a la otra punta de la playa Aida y yo nos tumbamos en la arena con los ojos cerrados y empezamos a sentir algo raro y unas risitas.

-¿¡Pe-Pero qué hacéis!? -Exclamó Aida al darse cuenta de que Liam y Harry habían comenzado en enterrarnos en la arena.

-Sólo estamos jugando- Rió Liam ante la cara de Aida. Yo no podía parar de reír. Me levanté de la arena desenterrándome y abracé a Harry haciéndolo caer en el suelo y comencé a llenarlo de arena. Aida hizo lo mismo con Liam.

-Oh, esto no te lo perdono... -Me dijo Harry. -¡PAREZCO UNA CROQUETA! -Esto último me hizo reír escandalosamente.

-¡HA! No te quejes que yo también estoy bien rebozada... -Le dije mirándolo mal.

-¡PUES AL AGUA QUE VAS! -Oímos gritar a Liam y los dos comenzamos a reír mirándolos. Liam tenía en brazos a Aida y ahora estaba corriendo hacia el mar.

-¡BUENA IDEA LIAM! -Gritó Harry.

-N... ¡NO! -No me dio tiempo a decir nada más y ya me tenía en brazos, al igual que hizo Liam con Aida, y corriendo hacia el agua.

Una vez los cuatro en el agua empezamos a jugar y hacer tonterías hasta que nos cansamos y salimos a tumbarnos en las toallas.

-Vaya... Mirad que casa hay a ese lado del acantilado. -Dijo Aida mirando a la parte derecha de la playa. Era una casa realmente preciosa, era blanca con muchos ventanales y cristaleras.

-Parece abandonada. -Dijo Liam. -No hay gente dentro y además no hay ningún cartel de venta ni alquiler.

-Pues hay que ser tonto para abandonar esa casa... Es impresionante. -Dije yo.

-¿Y si vamos a la casa a ver cómo es por dentro? No está lejos. -Dijo Harry con cierta ilusión en sus ojos.

-Hmm, no se si eso estará bien... -Dijo Liam.

-Sí, porfi Liam, ¡vamos! Esa casa es preciosa y además está abandonada no puede pasar nada malo. - Aida puso pucheros.

-Está bien. ¡Vamos! -Liam le sonrió.

LIAM PDV*

Vamos camino de la casa del acantilado. No sé por qué Harry me ha pedido que dejemos a las chicas que vayan un poco más adelante, supongo que quiere hablar conmigo a solas.

-Tío... ¿Tu y Aida estáis juntos? -Me preguntó.

-Harry, creo que eso es más que evidente.

-Eso ya lo sé, me refiero oficialmente... ¿Le has pedido que sea tu novia?

-Pues... Ahora que lo dices no...

-Es que yo tampoco y no sé como decírselo... Estoy nervioso... -Dijo pasándose las manos por la cara y después por sus rizos.

-¿Harry Styles nervioso por una chica? No puede ser... Estás enamoradoooo, uuuuh. -Canturreé para darle algo más de gracia pero Harry no me contestó, permanecía serio. No puede ser... ¿Sigue sin admitirlo? La va a buscar solo por todo Londres un dia lluvioso en mitad de la noche ¿y todavía no admite que está enamorado? Este tío es tonto. -Pues no sé tú, pero yo si lo estoy... Y se lo voy a pedir hoy mismo.

-Yo... No sé...

Me adelanté hacia donde estaban las chicas, abracé a Aida por la cintura y le di un beso en la mejilla. Enseguida Harry se unió a nosotros entrelazando los dedos de su mano con los de la mano de Carmen. Cuando nos dimos cuenta estábamos frente a la gran casa blanca del acantilado. Era totalmente impresionante, entramos dentro y también tenía un jardín trasero donde había una piscina, pero estaba llena de hojas. Aunque eso no pareció importarle a Harry que fue corriendo hacia ella de la mano de Carmen y se tiraron en bomba. Yo preferí ir a ver la casa con Aida. La casa tenía dos pisos, abajo estaba el salón que tenía una cristalera gigante a ambos lados de la sala una daba a las vistas del acantilado y el mar y la otra al jardín trasero, también tenía un baño; en el piso de arriba había cuatro habitaciones con un baño cada una y todas ellas tenían vistas al mar. Fuimos entrando a todas, pero había una en especial que era impresionante tenía unas vistas que podías contemplar durante el tiempo que hiciera falta. Es el sitio perfecto para hacer lo nuestro oficial.

-Liam... Tenemos que hablar -Me dijo Aida sentandose en la cama matrimonial que había en esa habitación. Dios ¿me va a dejar? NO, NO, NO. Ahora que decidí hacer esto NO POR FAVOR.

-Yo también quería decirte una cosa. -Me senté a su lado.

-A ver, dime, tu primero.

-No, no... Tu primero -Si me deja iba a quedar como un estúpido.

-Vale, lo dire yo... -Se sonrojó y empezó a ponerse nerviosa. -Pues... He estado hablando con Carmen y me he dado cuenta de que lo nuestro todavía no es oficial, osea, todavía no somos novios...- Ay, menos mal... Tiene la misma idea que yo.

-Eso mismo te iba a decir yo... Que... ¿Quieres ser mi novia? Oficialmente, por supuesto. -Le sonnreí acariciándole la mejilla.

-¡Claro que sí! -Me contestó con una amplia sonrisa y se abrazó a mi con tanta fuerza que me hizo caer hacia atrás en la cama, quedando ella encima de mi y me besó con ganás. Yo la volteé quedando yo encima de ella.

-Te quiero. -Le susurré al oído, con lo que a ella se le erizó la piel, y comencé a darle suaves besos en el cuello, sentí algo por mi espalda y me di cuenta que era su mano acariciando mi piel por debajo de mi camiseta. Yo pasé mi mano por su cintura a medida que los besos se hacían más intensos, tanto que sentía el calor brotar de nuestros cuerpos.

-¡LIAM! -Sentimos a alguien gritar a lo lejos.

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HOLA GUAPAS. Pues que lo siento otra vez por tardar tanto pero es que no hay quien pille el portatil... Espero que os haya gustado el capítulo.

¿Se atreverá Harry a tener algo realmente serio con Carmen? ¿Reconocerá que está enamorado? ¿O es que no lo está? ¿Quién habra gritado el nombre de Liam? ¿Que habrá pasado? Si queréis saberlo, seguid leyendo!

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P.D.: GRACIAS POR LEER :)

P.D.2: Os dejo la foto de la casa del acantilado. 

Carmen .xx (@1Dalwayswithyou)