Capítulo 1.2

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El pasillo de un tono completamente blanco me enceguece, la cabeza me duele demasiado y mi estómago me pide a gritos que lo alimente.

El como llegue a este lugar aun es una incógnita para mí, solo sé que desperté en un tren de transporte rodeada de adolescentes y adultos jóvenes igual o más confundidos que yo, hablando entre ellos, generando pequeñas teorías por su parte y deseando haberse despedido de su familia.

Familia...

Después llegamos a este lugar, por fuera la estructura era bastante curiosa.
Estaba compuesta de cuatro edificios, Completamente diferentes en tres sí, unos más anchos y altos que otros, unidos por puentes de cristal, y un enorme jardín alrededor y en el centro de todos estos. El lugar parecía estar alejado de la ciudad, pero no estaba fuera del Edén y el ambiente era completamente diferente. A través de los patios, circulaban algunas personas que supuse trabajaban aquí, con uniformes de distintos colores que los identificaban en los diferentes ámbitos que desempeñaban.

En la entrada de lo que parecía ser, el edificio más pequeño - que contaba con dos pisos -exceptuando la planta baja-, nos estaba esperando un hombre de unos 50 años, algo canoso, con un traje blanco. El hombre, que hasta ahora sabía que se llamaba Sandler, nos dió una cordial bienvenida al lugar que ahora conozco como CHA:OS, y nos dió unas cuantas indicaciones que debíamos seguir antes de que se nos fuese asignada una tarea o una habitación.

Para comenzar, mientras cruzamos por las puestas de cristal del edificio unos hombres de seguridad, con trajes color verde, no estuvieron haciendo entrega de ropas de un color gris rata y una vez terminaron de entregarlas, nos hicieron pasar por un sin fin de habitaciones que parecían no tener fin, todas estaban conectadas entre sí y cada una contenía en ella una actividad o acción diferente.

En la primera nos encontramos con unas regaderas, en las que el pudor no importaba en lo absoluto, todos comenzaron a despojarse de su ropa, sin importar si los miraban o no, pero a mí me era muy difícil hacerlo. En ese momento, una chica, que parecía tener la misma edad que yo, de un cabello rojizo y tes pálida, sé acercó a mí y al igual que yo, parecía no tener muchas ganas de que todos aquí le vieran.

-No comprendo por qué no hay una cortina que nos divida -Mencionó la chica una vez estuvo a mi lado y me quedé pensando un momento.

-Tal vez... ¿No querían gastar de más? -Mi respuesta hizo que la chica soltará una corta carcajada, y yo dibuje una pequeña sonrisa en mi rostro, que se borró cuando un chico, se paró desnudo frente a nosotras.

Ambas nos quedamos boquiabiertas, debía admitir que el chico tenía un buen abdomen, sus músculos se veían muy marcados, y el no era feo en si, tenía unos ojos castaños bastante lindos, el cabello alborotado y su tono de piel era bastante atractivo, un bronceado que casi nadie lograría.

Continué analizando al chico, de pies a cabeza (evitando su zona íntima) y no fue hasta que sentí un codazo de parte de mi acompañante, que me di cuenta de que el chico, me miraba mientras lo observaba detenidamente, las mejillas se sonrojaron, y la cara me comenzó a hervir, dirigí mi mirada, a un punto donde no tenía que mirar a nadie y me puse más seria de lo que estaba anteriormente.

-¿No piensan quitarse la ropa? -Cuestionó el chico, más a mí que a mí acompañante en general.

-No frente a ti -contesté, sin dejar hablar a la chica de lado y lo más seca posible para que el chico se alejara de una vez por todas.

-Que lástima -Comentó, como divagando en su mente y yo levante una ceja mientras giraba el rostro para verlo a la cara, acto que supuse esperaba, ya que dibujo una sonrisa en su rostro y continuo. -Yo que también quería examinarte de pies a cabeza desnuda -Concluyó, logrando que las mejillas se me volvieran a sonrojar y la chica a mi lado soltó una carcajada, acompañada del chico desnudo frente a nosotras y ahora la que la golpeó a ella fui yo.

Survival Game (CHA:OS 1) Where stories live. Discover now