The boy in my dreams (VERSIÓN ORIGINAL)

Segunda Temporada- Cap 11

El chico sabe perfectamente lo que provoca, sentía unas inmensas ganas de voltear entre sus brazos y estrellar mis labios con los suyos...y no de manera pacifica.

—¿Ahora te quedas callada? Por la noche no haces lo mismo —susurró besando levemente mi hombro, mire alarmada a todos, sintiéndome totalmente incomoda pero ellos estaban atentos a nosotros mientras contenían una risa.

Mi madre por su parte solo me miraba con una sonrisa burlona, diciendo un gran "te dije que tenían que estar juntos". La situación de mi padre era otra cosa.

Este apretaba sus puños al igual que la mandíbula, el enojo lo rodeaba y sus ojos solo le gritaban a Kyle un gran "Suelta a mi hija o corto tus pelotas".

—¡No te concentres en tu padre, Tessa! Levanta el muro, estoy viendo un par de pensamientos y no vas a tardar en sentir las emociones de Kyle.  —Vaya que ya las sentía, la lujuria y la diversión parecían rodearme y dejarme ahogada entre ellas.

—Vete papá. —Él no podía estar allí—. Por favor.  —Escuché como replicaba y maldecía pero finalmente me hizo caso y se fue de allí.

—Sigue, Kyle. —Corrió un poco mi pelo antes de volver a dejarme escuchar su voz demasiado ronca, ¿cómo demonios hacía eso?

—Otra cosa que extraño es recorrer las curvas de tu cuerpo con mis manos, supongo que tu también lo extrañas. —Sus dientes rozaron mi oreja mientras sentía su respiración chocar contra allí, mordí mi labio antes de hablarle.

—Ya para —exigí, o eso pareció pero realmente era una suplica, no iba a poder mantener el muro todo el tiempo.

—¿Acaso te incomoda que sea sincero? Extraño todas esas cosas, escuchar como suplicas por mi, como te aferras a mis hombros, como suspiras contra mi cuello. —Sus manos quedaron sobre mi abdomen mientras apoyaba su mentón en mi hombro—. Extraño despertarme y verte envuelta entre mis sabanas, demasiado agotada para despertarte por mi mirada sobre ti...Extraño ver tu cabello exparcido en mi almohada, te extraño a ti.

Mi muro seguía fortaleciéndose pero no lo diría o él solo haría las cosas peores, no tenía demasiada resistencia.

—Kyle, por favor.

Él tenía que parar, ya.

—Tu voz estaba más agitada la última vez que me rogaste por más.  —Mordí mi labio antes de girar entre sus brazos y rodear su cuello—. Hasta que parecemos entendernos.

Recorrí con mi uña su mandíbula, lo vi mirar mis labios y supe que lo tenía justo donde quería.

—Suerte para la próxima, guapo. —Besé la comisura de sus labios y me dispuse a salir de la sala con una sonrisa triunfal cuando sus mano atrapó mi brazo, me hizo girar con fuerza provocando que me chocara con su pecho demasiado fuerte y trabajado, se parecía a la roca debajo de mis dedos—. ¿Qué haces?

—Tú no te vas a ninguna parte, mi suegra me dio una misión ¿recuerdas? —Abrazó mi cintura y me pegó aún mas a el como si eso fuera siquiera posible—. Voy a ser sincero, te extraño más que a nada y no solo me refiero a hacerte el amor, tú eres mas que eso...Demonios, extraño tus comentarios irónicos, tus regaños por la lavadora, tu forma de mantener a todos en orden, extraño que comiences las discusiones por nada y luego corras a mi de la misma forma que yo corro hacía ti, simplemente no paro de buscarte en cada lugar en el que estoy. Esa locura llamada amor golpea como una condenada perra.

No pude evitar sonreír mientras rozaba su nariz con la mía, lo vi sonreír justo cuando sus emociones derribaban en el muro, no porque este fuera débil sino porque sus sentimientos eran demasiado fuertes, incluso para un muro.

Su amor me hizo perder la noción de si había o no un suelo debajo de mi, el sentimiento de protección y el miedo a perderme llegaban al limite donde me quitaban el oxigeno de mis pulmones, me maree y no pude evitar sostenerme de sus hombros mientras él se aferraba a mi cintura en el momento en el que notó que mis piernas ya no soportaban mi peso.

—¿Qué hice?! —Su tono de voz estaba totalmente alarmado pero mamá solo se acercó a mi y apoyó su mano en mi hombro.

—Tus sentimientos son demasiado fuertes para el muro primerizo que ella logro construir.

—Entonces apártela para que no me toque, no puedo verla así. —Tomé aire mientras sólo escuchaba su conversación sobre mi pero me sentía tan descompuesta como para no poder hablar, carraspeaba mi garganta por la picazon, parecía que repentinamente me sintiera deshidratada.

—No, cuando digo que tus emociones son tan fuertes es porque lo son, aunque te suelte ella seguirá sintiéndolas porque hasta yo las siento —respondió mamá—. Solo que mi muro las aleja de mi, ahora tienes que concentrarte, Tess.

Asentí con la cabeza y tome una bocanada de aire para luego comenzar a imaginar los ladrillos rojos nuevamente, uno sobre otro hasta alcanzar alturas elevadas, me impedía ver otra cosa así que solo volví a asegurarlo antes de colocar el último.

Sentí que podía respirar.

—Eso fue...sentí que me ahogaba —dije con la voz ronca, vi como Kyle me levantaba en brazos y nos llevaba al sofa, me sentó sobre sus piernas y escondió su rostro en mi cuello.

Había tenido demasiado miedo y dolor por verme así.

—Estoy bien...no sé como tú lo estas —susurré sobre su cabello, acepté el vaso de agua que me dio Clarisse y se lo devolví una vez que lo vacié.

—¿A que te refieres?

—Tus emociones son devastadoras, no me permitían respirar. ¿Cómo lo haces?

—Jamás había notado la falta de aire hasta que tu llegaste a mi vida, ahí supe lo que era poder respirar.

Sonreí sin poder evitarlo.

—Será así por mucho tiempo, lo sabes ¿cierto?

—Lo sé y por eso mismo tengo una propuesta para ti. —Vi como me regalaba una sonrisa torcida cuando quitó su rostro de mi cuello, sus expresiones eran determinadas—. Quiero que te vayas a vivir con nosotros una vez que todo esto acabe.

—¿Hablas en serio?

Creo que mi voz le había demostrado mi sorpresa porque él solo dejo escapar un risa antes de besar mis labios, mordiendo mi labio al apartarse.

—Si, lo he hablado con los chicos y...

_¡Ya era hora! —gritó Brad—. Desde hace mucho estábamos esperando que te arriesgaras a proponerle eso. ¡Solo te faltaban los huevos! —Me reí, antes de lo que creí humanamente posible Kyle me había dejado sobre el sofá y estaba parado imponente frente a Brad, de todas maneras no dejaba su sonrisa burlona.

—¿Quieres ver si tengo huevos? —Brad hizo como si le prestara atención a algún sonido lejano.

—Lo siento, man, pero las vacas me llaman. —Se volteó y se fue de la sala causando nuestra risa, los cojones de él se habían ido de visita.

—¿Así que aceptaras su propuesta? La de todos, mejor dicho. —Los mire con usa sonrisa antes de encogerme de hombros.

—Claro que si, no queremos que un día destrocen la casa entera ¿no? Supongo que seré la niñera.

—Hum, el juego de la niñera me tienta bastante. —Kyle me guiñó un ojo antes de morderse el labio inferior—. ¿Cuando lo ponemos en practica, cariño?