diez

3K 355 29
                                    






Mientras lo ve esperando por él apenas sale de su trabajo, Luhan no puede sentirse más que incómodo.

— ¿Te vas?

El pelicastaño voltea en la dirección de su voz sin mirarlo a los ojos— Sí, me voy —en cuanto está dispuesto a subir a su coche y dejar al otro atrás, este se acerca rápidamente.

— Quiero que hablemos.

— Pues yo no quiero —aún estaba un poco resentido por el modo en que había sido tratado.

En cuanto pone su mano sobre la manija de la puerta, Sehun agarra su hombro para voltearlo bruscamente, y él reacciona tratando de quitárselo de encima

— No sé a qué has venido y no me interesa —suelta bruscamente.

— No —sentencia el otro ceñudo, ajeno al hecho de que estaba forcejeando para mantenerse cerca del pelicastaño—Quiero hablar y tú me oirás.

—¡¡Suéltame!!

— No, debes oír lo que tengo que decir porque eres mi novio.

— ¡Yo ya no soy tu novio! —espeta un Luhan rojo de furia— ¡Todo esto ha terminado!

— ¡¡¡NO HA TERMINADO!!! —grita el otro de vuelta, igual de enfurecido y sacudiéndole los hombros— ¡¡¿Lo entiendes?!! ¡¡¡Nada aquí ha acabado!!!

Luhan se siente enfermo y enfurecido, y por primera vez reacciona asestándole su puño directo en la mejilla, dejando al otro sorprendido y con el rostro de lado.

Silencio.

Sehun voltea en su dirección, se toca la mandíbula y ríe.

— A veces olvido que eres un hombre ¿sabes?

Luhan aparta la mirada y se va sin dudarlo.

Porque ahora es consciente a un nivel un tanto abrumador de que si sus sentimientos hubieran llegado más lejos, solo saldría perdiendo.    





La Importancia [Hunhan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora