Ella me necesita.

1.1K 89 18
                                    


Estaba en las albercas con mis primos y sus amigos. No me caían mal pero tampoco bien, eran muy encimosos.

— Ya me enfade — dijo Alexis.

— Yo también — bufé.

— Pareces toro — reímos — ¿Quieres una cerveza?

— Sabías que eres mi primo favorito — dije riendo, aunque en realidad lo era.

— Si ya sabía, vamos — tomo mi mano y fuimos a la barra.

— Aunque ahora que lo recuerdo tu no tomabas — dijo riendo.

— No lo hacía pero ahora sí — le dije y tomé de esta.

— ¿Porque terminaste con X? — pregunto ladeando su cabeza.

— ¿Enserio quieres saber?

— Si no quieres no pero si quiero saber — reí.

— Solo jugo conmigo, nunca me quiso de verdad — dije recordando ese día como si hubiera sido ayer. Me acabe mi cerveza de un trago y pedí otra.

— ¿El te lo dijo? — pregunto mi primo sin creerlo.

— De frente — asentí — es increíble que ya pasó un mes y aún me duele como ese día — dije derramando un par de lágrimas.

— ¿No has vuelto a hablar con el?

— No hasta hoy, en...

— La transmisión — dijo y asentí limpiando mis lágrimas.

— Tengo sentimientos encontrados hacia el ¿Sabes? Lo amo como loca pero también lo odio y desearía que esto jamás hubiera pasado, no haberlo conocido y no haber aceptado salír con el — negué.

— Las cosas pasan por algo, tal vez si no hubieras salido con el sería con otro chico peor que el — me sonrió tocando mi hombro.

— Quisiera pensar eso pero me duele tanto — llore más y mi primo me abrazó.

— Perdón no quería que te pusieras haci — dijo consolandome — viniste a divertirte y yo ya te arruine el día.

— Claro que no — le sonreí y limpie mis lágrimas — vamos con los demás — dije y nos fuimos con nuestra cerveza en mano.

— Hola chicos ¿Dónde estaban? — pregunto mi prima.

— Fuimos por una cerveza — dijo Alexis.

— ¿Tomás? — me preguntó Mara.

— Agh que si — dije rodando los ojos y reí.

Después de un rato decidí salir de la alberca y me acosté al lado de esta para que me diera un poco el sol.

— Hola — dijo alguien y yo me enderece.

— Ah, hola — le dije al chico y me volví a acostar.

— ¿Te puedo acompañar?

— No — dije de mala gana.

— Hay ándale — se acostó al lado de mi.

— ¡Que no! — le grite y me senté en la orilla de la alberca.

Mala idea, porque ya lo tenía al lado de mi.

— ¿Ahora que quieres? — volté a verlo y me robó un beso.

Lo empuje y él me volvió a agarrar, ¿Es enserio? ¿Porque siempre me pasa lo mismo a mi?

— Déjame en paz — dije safandome de su agarré pero el me agarró más fuerte.

— Ya estate quieta — dijo y para mi buena suerte no había nadie ¿A qué hora se fueron todos?

Save Me-XxxtentacionWhere stories live. Discover now