Desde la desaparición de sus padres, Alisson Bloom es la única heredera de imperios Bloom, pero su desdén por las reglas y su poco interés por el negocio familiar, la llevaron a entrometerse en un mundo totalmente diferente y un tanto peligroso, per...
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-Bueno ¿Que dicen, están listos? –Pregunto Jayden
-Hagámoslo –Dijo emocionado uno de los integrantes del equipo, sonreí sin mostrar los dientes
-Perfecto –Comente con simpleza mientras me acercaba a la mesa del fondo escogiendo un arma de mi preferencia –No es una de las mías pero servirá hasta traer mis juguetes –Murmure determinando la pistola, Jayden silbo atrayendo mi intención, me voltee de inmediato alzando una de mis cejas con curiosidad -¿Qué? –Pregunte molesta
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-Dile al jefe tu plan –Comento rascándose la nuca, me posicione a su lado y le golpee la parte de atrás de la nuca con mi mano –¡Hey! –Reprocho el, sonreí ante su molestia
-Siempre tan lacayo –Murmure rodando los ojos y salí por la puerta buscando a Dimitri, como siempre todas la guaridas de Zetrov se parecían en estructura así que imaginaba que su oficina debía ser la del final, al llegar toque la gran puerta roja golpee fuertemente con mis nudillos
-Adelante –Escuche, abrí la puerta y pase, pude observar una mesa donde se encontraban alrededor de cinco hombres sentados entre esos Dimitri, di un asentimiento de cabeza como saludo, este se puso de pie caminando hacia mí –Tengo que presentarles a mi mano derecha, mi querida Sunchine –Comento, lo mire alzando una ceja, hace mucho tiempo no escuchaba ese apodo y parece que ellos tampoco por que comenzaron a balbucear y murmurar, Zetrov me tomo del brazo y halo hacia una esquina –¿Que sucede? –Pregunto observándome con curiosidad
-Iré a recoger mis juguetes –Respondí seriamente –Es una buena forma de probar a tu equipo ¿No crees? –Dije sonriente, el asintió con la cabeza
-Está bien, misión aprobada, de todos modos necesitas tus cosas para trabajar –Murmuro entre los dientes –Hazlo, pero no quiero bajas, oíste –Ordeno apuntándome con su dedo, rodé los ojos por su comentario
-Por supuesto –Asegure, el asintió convencido
-Ya puedes retirarte –Dijo rápidamente volviendo a mirar hacia atrás
-Hasta luego señores –Comente divertidamente mientras salía por la puerta y al salir logre ver a Jayden en el pasillo del frente – ¡Hey! –Grite, el volteo –Mueve tu trasero, princesa –Dije sonriente, provocando que me fulminara con la mirada para después entrar a la habitación a prepararse, me dispuse a seguirlo en silencio entrando cuando se estaba quitando la camisa, me observo de reojo y siguió con lo suyo, fui hasta el armario y vi mi traje, inmediatamente lo saque y me quede observándolo siendo presa de los miles de recuerdos que me traía hasta que Jayden interrumpió mis pensamientos chasqueando sus dedos
