SANGRE FRÍA

23 1 1
                                    


- Tienes que matarlo - me decía ella - Tienes que hacerlo. Está sufriendo innecesariamente.

- Pero...- balbucí yo.

- Pero no, Alicia. Estamos solos los cuatro, aquí no hay ningún tipo de ayuda...ni la habrá.

Suspiré forzada.

- Creo que deberíamos intentar algo.

- ¿Para qué?- dijo Stan más para si que para los demás.

Miraba fijamente al horizonte con los ojos muy abiertos

- No hay salida. Ninguno de nosotros somos médicos. No debemos jugar a ser dioses, el curarlo está fuera de nuestro alcance, está...está demasiado grave.

Yo miré a Lord tirado en el suelo ante mi con un inmenso boquete en el costado. Mezcla de sangre, carne y bilis salía a borbotones, aunque yo seguía intentando tapar la herida con mi "antigua" camisa. Lord ya estaba inconsciente y sudando a chorros.

- Y ¿por qué he de hacerlo yo?-dije egoístamente.

- Porque eres la que tiene sangre fría y determinación - dijo Chase.

- Si, pero mi determinación se inclina a intentar salvarlo.

- Sabes que no viviría, puede que le alargaras la vida unos días, pero unos días de sufrimiento innecesario - contestó Molly.

Suspiré profundamente y me levanté. Busqué en mi mochila y saque la pistola. Le puse el cargador y la preparé para disparar. Me acerqué a Lord empezando a sudar tanto como él. Pasaron un par de minutos en los cuales lo miré dándole el último adiós. 

Entonces vi que los otros se habían alejado. "No se quien tiene más sangre fría, yo votaría por ellos", me dije.

Levanté el arma y disparé. Le di en la cabeza y murió en el acto. Durante un rato seguí observándolo sin poder parar el torrente de lágrimas. 

La vida iba a ser muy dura a partir de entonces.

MICRORRELATOSWhere stories live. Discover now