••capítulo FINAL••

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Narrador omnisciente :

Luna: ¡¿Están listos?!

Nina: ¡A la cuenta de 10 abren sus ojos!

Matteo: ¿Nos prometen que esto no es una broma?

Ámbar :¡10!

Luna: ¡9!

Nina: ¡8!

Ámbar: ¡7!

Luna: ¡6!

Nina: ¡5!

Ámbar: ¡4!

Luna: ¡3!

Nina: ¡2!

Ambar: ¡¡1!!

Gastón: wow...

Matteo: como es posible...

Gastón: es impresionante...

Frente a sus ojos estaba la más hermosa pista de hielo con un gran letrero "Los vamos a extrañar perdedores "

En la pista estaban todas las personas que eran importantes para ellos, sus padres, sus amigos y ellas.

Sin duda las chicas habían organizado una gran fiesta de despedida.
Todos  estaban haciendo lo que más amaban ellos y ellas, patinar.

Los chicos rápidamente fueron a buscar  sus patines.

Simón: yo sinceramente pensé que era una broma.– les dijo a sus hermanos.

Matteo: yo igual, me sorprendieron mucho, este lugar es hermoso.

Gastón: yo lo único que puedo pensar es que las voy a extrañar, no tuvimos la mejor relación, pero sin duda había cariño, especialmente nina. Me dediqué tanto tiempo a odiarla en vez de amarla.– dijo con tristeza, el sin duda no quería irse, no después de haber encontrado su lugar ideal.

Matteo: hoy es nuestro último momento con ellas, hay que disfrutarlo como nunca.– dijo con entusiasmo.

Simón: exacto, esta noche hay que  disfrutar con ellas.

Gastón: Entonces vamos, que no tenemos tiempo que perder.

Ellos rápidamente se pusieron sus patines y fueron tras sus amadas.

Gastón visualizó a nina hablando con una amiga de ella que no sabía como se llamaba, el rápidamente patino en busca de ella.

Gastón: mmm perdón por interrumpir pero te la voy a robar un momento.– le dijo gastón a la amiga de nina.

Se empezaron a alejar un pasos de ella.

Nina: ¿Gastón que pasa?, ¿estás disfrutando de la fiesta?

Gastón: si la fiesta está increíble, lo que me pasa es que ya me cansé de fingir que no me importas.–el se acercó lentamente hacia ella.

Y la besó como nunca lo había hecho.
Éste día iba a estar para siempre en su corazón.

Matteo vio como sus hermano no perdía el tiempo.

Éste gastón, pensó el.

El estaba buscando a su luna por toda la pista, pero por alguna razón no la encontraba.

–¡Cuidado!–dijo una persona atrás de el.

–¡lo siento chico fresa!–  dijo una luna apenda por haber chocado.

Matteo: cuanto apuesto que estabas en tu mundo.

Luna: ¡Sí!, estaba pensando como lo haremos para ganar la competencia.

¡Esto Es Guerra!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora