Mi Evans (James Potter Y Tú)

Capítulo 36

*Narra Sasha*
Entre más se acercaba noviembre, Sirius se estaba ganando unos buenos golpes de mi parte, recordándonos que seria su cumpleaños y que quería hacer una fiesta, lo cuál ya sabíamos todos, pero él pensaba que lo olvidaríamos.

—Si no se calla, lo golpeare —le dije a Remus, quien me sonrió y me dio un beso en el dorso de la mano. Por qué tiene que ser tan lindo.

—Tranquila, si no lo haces tú, lo hará _____________ —me dijo divertido y la miramos, estaba en la cocina haciendo de comer, pero se notaba que agarraba con fuerza su varita—. No creo que lo mate —reímos.

—Ya llegaron —Sirius nos miro mientras entrábamos a la cocina—. Le decía a ____________ sobre...

—Tu fiesta —dijimos algo aburridos y Sirius rodo los ojos.

—¿Y qué haremos es tu cumpleaños, Canuto? —preguntó James, llegando a la cocina.

—Por fin. Alguien que habla mi idioma.

Después de cinco minutos, _____________ los corrió de la cocina, para que hablaran en la sala, lo cuál fue muy gracioso porque los amazo con su varita y ellos asustados salieron corriendo de la cocina.

—Te dijo que el cuatro ojos no te convenía —le dije divertida, ella y Remus rieron.

—¡Te escuche! —me grito James.

—Será mejor que nos vayamos —me dijo Remus, iríamos a ver a mi madre y mis hermanos.

—Cierto, nos vemos más tarde.

—Salúdame a los gemelos —dijo mi amiga sonriendo.

Ambos salimos de la casa de los Potter y caminamos rumbo a una colina para aparecernos y aparecer cerca de la casa de mi madre. Cuando llegamos, los gemelos nos recibieron con la alegría de siempre y no pude evitar sonreír, al igual que Remus.

—Pensé que llegarían más tarde —nos dijo mi madre saliendo de la cocina y nos sonrió—. Me alegra tenerlos aquí.

Estuvimos un gran rato con ellos. Aunque los gemelos hicieron que los ayudara a montar sus nuevas escobas y Remus se quedo hablando con mi madre, lo cuál se me hizo muy raro.

—Inclínate un poco más —le dije a Andrew—. No vueles tan alto o mamá nos matara —le dije a Matthew que ya estaba en el aire con su escoba.

—Cuando vayamos a Hogwarts jugaremos quidditch —me dijo sonriendo Andrew.

—De golpeadores —Matthew también sonrió.

—Bueno, _____________ les puede ayudar en eso. Era muy buena y más cuando le lanzaba el bate a Sirius —dije riendo un poco.

—Y no olvides la vez que también se lo lanzo a James porque decía que la quería cuidar —dijo Remus llegando con nosotros y me abrazo por la espalda.

—Claro que lo recuerdo —hice una mueca—, mi cabeza también porque el golpe lo recibi yo en lugar de James —suspire y él rió bajito—. ¿De que tanto hablabas con mi madre? —pregunte dandome la vuelta y poniendo mis manos en su cuello.

—De algunas cosas —sonrió y me dio un beso en la frente—. No te preocupes, no fue nada malo —dijo cuando aun lo miraba con un poco de duda—. Solo espera unos días y ya.

—¿Cuánto ? —pregunte haciendo un puchero y él rió.

—El fin de semana —beso mi mejilla—. Por cierto, te vez hermosa hoy —sonreí, seguía siendo tan lindo desde el primer día que nos hicimos novio.

—Bien, ustedes dos —les dije a mis hermanos—, ya bajen y vayan a lavarse las manos para cenar.

El fin de semana se me hizo una eternidad y eso que solo faltaba dos días. Estaba en la casa de mi mejor amiga, quien me estaba ayudando a arreglarme, junto con Alice y Lily, pero ninguna me decía porque.