Capítulo 47

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Narrador omnisciente

Keana amaba a Lauren, tan simple y tan sencillo y a la vez tan difícil y complicado como eso. Y como tantas otras veces en el pasado, quería verla feliz. Lauren estaba atravesando sin duda una de las épocas más difíciles de su vida, que de por sí ya había sido difícil desde siempre, y es por eso que Keana había decidido hacer lo posible para que ella estuviera bien, aunque eso significara renunciar nuevamente a lo que sentía por ella puesto que Lauren solo la veía como una amiga, casi como su hermana.

Organizó una pequeña reunión en su casa con algunos de sus amigos, obviamente Lauren estaría ahí y creyó que si Camila iba, podrían comenzar a acercarse nuevamente, a ver cómo resultaban las cosas. Cuando le dijo a Camila sobre su plan, ésta dudó un poco, pero sabía que era la única manera de estar con Lauren aunque no sabía si la iba a reconocer o no, y aunque su pecho doliera de solo pensar en que podría ni siquiera notar su existencia, haría lo que fuera para estar con ella.

Al llegar a la casa de Keana sentía que su corazón se le saldría del pecho, pocas veces se había sentido tan nerviosa como ese día. Toco el timbre y trataba de controlar su respiración para no desmayarse, Keana abrió y la dejó entrar dándole una sonrisa sincera y comprensiva, algo que Camila jamás pensó que podría pasar. La vida da muchas vueltas.

Al entrar escaneo el lugar con nerviosismo hasta que por fin vio a Lauren quien hablaba animadamente con unos chicos que ella no conocía pero tampoco le importaban. La risa de Lauren era estruendosa y parecía el único sonido en ese jardín lleno de personas donde la música era alta, aunque ese sonido tan familiar era lo único que retumbaba en sus oídos en ese momento. Lauren pareció darse cuenta de que alguien la miraba pues volteó hacia donde estaba Camila y dejó de hablar. Cuando sus miradas se encontraron fue como un corto circuito, como un choque, era la simple conexión que las unía y que era tan fuerte que era imposible de ignorar. Las dos se miraron por lo que pareció una eternidad hasta que uno de los chicos que hablaba con Lauren llamó su atención y pareció como si un hechizo se hubiera roto. Luego Keana también llamó la atención de Camila y casi la arrastró donde Lauren.

-Camila, ellos son Luis, Cameron y... -Lauren miraba a Camila intensamente con el ceño fruncido, entonces Keana entendió que Lauren no podía reconocerla -Y Lauren...

-Hola -dijo Camila tímidamente a los tres chicos que la miraban quienes devolvieron el saludo, excepto por Lauren quien seguía mirándola con una expresión de confusión total

-¿Lauren está todo bien? -Preguntó Keana quien se preocupó de la reacción de la ojiverde

-S... Sí, está todo bien, es solo que... Solo que, te me haces conocida -dijo Lauren dirigiéndose a Camila quien la miró y sintió su corazón latiendo a mil por hora

-Tal vez ya me conoces -dijo Camila dándole una sonrisa triste a la más alta

-Claro que no, si te conociera seguro que no te olvidaría, debe ser muy difícil olvidar a alguien como tú -dijo Lauren con los ojos brillantes y llenos de emoción, ella no sabía que realmente si la conocía, mejor que a nadie

-No cambias Jauregui -dijo Luis a la morena quien se sonrojó al darse cuenta de lo que había dicho

-Lo siento, eso fue... Eso fue, o diablos, lo siento... -dijo Lauren nerviosa

-Bueno bueno, chicos acompáñenme por unas cosas a la cocina por favor, sean unos caballeros, Camila diviértete por favor, Lauren sé la anfitriona por mi, debo buscar algo ¿está bien? -Lauren miró con un poco de pánico a Keana, no podía creer que la iba a dejar sola con la chica hermosa que había llegado y a la cual pensó, había hecho sentir incómoda

Camila no dejaba de jugar con sus manos nerviosamente y miraba al suelo sin saber qué hacer y mucho menos qué decir. Como siempre, Lauren era la extrovertida de las dos y trató de romper el hielo.

-Entonces Camila... -dijo la más alta con cuidado

-Así es...

-Es un bonito nombre, es latino, amm, ¿eres latina o algo así? Tus rasgos son, es decir, bueno, quiero decir...

-Soy mitad cubana

-¡No puede ser! Yo también -dijo Lauren con una gran sonrisa, lo que hizo que el corazón de Camila casi se saliera de su pecho

-¿Y hablas español? -dijo Camila tratando de seguir la conversación

-Claro, por supuesto, hablo la idioma, cocino la comida, soy latina -dijo Lauren con un español un poco extraño, haciendo que Camila soltara una gran carcajada pues le pareció muy gracioso el error de Lauren, Lauren la miró extrañada pero también sonrió, ella pensó que el sonido de la risa de Camila era sin duda uno de los mejores sonidos que había escuchado en su vida

-Bueno, a veces tengo errores, solo lo hablo con mi familia y cuando vivía en Barcelona -dijo Lauren encogiéndose de hombros

-Yo también vivo en Barcelona... -dijo Camila

-¿En serio? Carajo, ¿segura que no nos conocemos? -dijo Lauren entre confundida y emocionada

-A lo mejor ya me has visto... -dijo Camila con una sonrisa triste

Lauren se quedó mirándola como si estuviera buscando algún recuerdo en su mente, pero a veces todo era tan confuso que prefería no forzarse pues los dolores de cabeza eran insoportables cuando se estresaba. Prefirió dejarlo pasar y no pensar demasiado.

-Pues, si no te conozco, me encantaría hacerlo ahora -dijo Lauren sonriendo y Camila hizo lo mismo, tal vez en la memoria de Lauren no estaba tan presente pero ahora, Camila estaba segura de que aún lo estaba en su corazón.

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Gracias por leer.

Bad Reputation | Camren Where stories live. Discover now