CAPÍTULO 1 ( La cita )

Depuis le début
                                    

—¿Eh?

—Nada, nada, edes el pollo poque edes lindo —le sonrió dándole un besito en el cachete.

El pequeño rubio abrió sus ojitos sorprendido por lo que el niño había hecho. Su corazoncito saltó y eso lo asustó, la sensación bonita le hizo esbozar una grannsonrisa. Sus mejillitas se encendieron de un bonito rosa mientras bajaba la mirada. JiMin empezó a jugar con su piecito debido a su nerviosismo.

—Edes dindo... —sonrió el pelinegro—. ¿Quiedes jugad conmigo?

—Sí —asintió el menor con su cabezita.

—Entonces espédame aquí, no te vayas. Idé por mis juguetes.

JiMin asintió nuevamente y haciéndole caso al niño se sentó entre el pastiro mientras su vecinito pasaba la reja y desaparecía tras ella.

—¡No te vayas a id! —gritó JungKook regresando para sacar su cabezita por la rejita.

JiMin sólo negó y sonrió mientras su corazoncito latía demasiado rápido.

JungKook llegó a los pocos minutos con una caja llena de juguetes. Los ojitos de JiMin se abrieron demasiado y más que la idea de ver tantos juguetes, lo que le emocionó más fue jugar con aquel pelinegro.

Los minutos pasaban entre ambos niños que jugaban según su imaginación. JiMin se estaba divirtiendo de verdad, algo que no había pasado cuando jugaba con MinJi y era debido a que JungKook lo dejaba tocar cualquier juguete y le hacía escoger primero. Estaban tan felices jugando, cuando lamentablemente el juego de aquellos dos niños fue interrumpido por la voz de la señora Park.

—¿JiMin? —lo llamó—. ¿Qué es lo que estás haciendo?

Ambos niños miraron a Ye Na y se levantaron del suelo sacudiéndose sus overolsitos. JungKook miró a la señora e hizo una reverencia, él era todo un caballerito.

—Buenas tades señoda Pal.

—Hola pequeño ¿cómo es que has llegado hasta aquí?

—Pod ahí —dijo el inocente niño señalando el palito movible de la reja.

La señora Park sonrió ante ello, pero rápidamente volvió a ponerse seria pues ella tenía que hablar con JiMin y tal vez castigarlo.

Unos minutos antes, MinJi había llegado llorando diciéndole que JiMin le había pegado y se había ido a jugar en el jardín con el niño nuevo. Ye Na no pudo creer lo que MinJi le decía y saliendo de la cocina fue hasta el patio. Tal como su hijo le había dicho, JiMin se encontraba con el pequeño Jeon jugando.

—JiMin, entra a casa, tenemos que hablar —le dijo muy seria. JiMin se sintió mal por eso y sus ojitos volvieron a hacerse rojos—. JungKook ¿verdad? —dijo la mujer suavizando su expresión y dirigiéndose hacia el pequeño pelinegro.

—Shi señora Pal.

—JiMin tiene que entrar conmigo ahora y ya no podrá jugar ¿quieres que te lleve a casa o tal vez quieras quedarte a jugar con MinJi?

JungKook frunció su ceño al escuchar aquellas palabras. Él no quería jugar con el hermano de JiMin, él quería jugar sólo con JiMin, así que mirando al otro niño que lo miraba expectante, volteo su carita y negó.

—Ño, me idé pod la dejita nuevamente. Gacias por su ayuda de todas fodmas —dijo como si fuera un niño grande. La señora Park sonrió ante el curioso niño y algo en ella la enterneció—, adiós JiMinnie, espedo podamos jugad ota vez sin intedupciones.

Y diciendo aquello, le dio un besito en la mejilla a JiMin, cogió sus juguetitos y se regresó por la rejita pasando hacia su patio. Finalmente entró por la puerta trasera hacia su casa.

ʟᴀʙɪᴏꜱ ᴄᴏᴍᴘᴀʀᴛɪᴅᴏꜱ ➳ [ ᴋᴏᴏᴋᴍɪɴ ]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant