✶7 ✶

28 1 0
                                    

-¿Champaña?-ofreció un camarero de mayor edad con una sonrisa. Ella levantó un poco las comisuras de los labios y agarró con delicadeza una de las copas.

-Gracias-se alejó, echó la champaña a una de las plantas y volvió a la sala.

Ajena a su alrededor, escuchó nuevamente esa voz que aveces tanto la irritaba.

-Iris.

-Adiós, Sean.

-Oh vamos-se colocó a su lado-Solo quiero hablar.

-Habla con alguien más-pronunció con dureza.

-Prefiero hablar contigo-sonrió divertido-¿Te gustaría marcharte de esta tonta fiesta e ir a alguna otra parte?, te llevo a donde sea.

-¡Aquí están!-exclamó Cronos con aire de superioridad junto a Gregory-¿Has visto a tu madre, hija?

-No.

¿Qué acaso no podía estar tranquila un segundo?

Buscó la salida con la mirada, hasta que sintió unos dedos agarrarla suavemente del brazo.

-Iremos a buscarla, Cronos-pronunció él, deslizando su agarre hacia su mano y tirando de ella para comenzar a caminar.

El corazón de la pelirroja comenzó a palpitar rápidamente sin razón alguna. Él le había afectado repentinamente.

-De nada-comentó el ojiverde ajustando su corbata con su mano libre.

-¿Por qué?

-Te libré de tu padre. Te hice un favor, ahora me debes uno.

-Adiós-ignoró lo que dijo Sean y soltó su mano.

-Sé que me seguiste cuando estaba corriendo hacia a Isaac y escuchaste toda la conversación-la intriga en su voz era bastante notoria-Lo que me hace pensar si sabes algo de esa noche.

-¿Sabes?, no. No tengo ni la menor idea de esa noche de la que tanto se comenta-caminó hacía la salida.

-Buenas noches, adiós-se despidió del chico que los había recibido.

Ya afuera de la gigantesca casa, sintió la brisa helada chocar contra su piel. Se quitó sus tacones y descalza, buscó el auto de sus padres con ojos de águila.

Si en algo era buena, era ser sigilosa. Para su suerte, cuando su padre la tomó de la cintura y la llevó donde Gregory, con su mano derecha metió la mano en el bolsillo del traje de Cronos y sacó las llaves sin complicaciones.

-A casa-pronunció mientras subía y encendía el automóvil. En verdad no quería ir pero, estaba bola de pelos y era importante.

-Eh, ¿No te ibas a ir sin mi, no?-y de nuevo estaba ahí él, arruinando sus planes, como siempre- ¿Sabes?, siempre he querido saber a qué lugares siempre vas cuando te escapas.

"Me tienes que estar jodiendo" pensó.

No te estoy jodiendo respondió una voz.

-¿Qué mierda fue eso?-murmuró para si misma.

-¿Huh?

-Nada-dijo pero justo cuando iba arrancar el auto, Sean subió de copiloto.

-Muy bien. ¿Adónde vamos?

Ella no respondió. Siguió pensando en esa voz. Porque definitivamente no era Sean, ni su conciencia. Arrancó y salió del palacio.

✶ ✶ ✶ ✶

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jan 27, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

IrisWhere stories live. Discover now