La vida de Ricardo esta sumida en la monotonía como fotógrafo en una revista que se distribuye a nivel nacional, hace fotografías sobre la naturaleza, fiel seguidor de los cuentos debido a las historias fantásticas que le contaba su padre cuando era...
Empezamos a comer, después de que ella dijera la oración, era increíble ver como esa niña tenía un corazón tan inocente, no es que para mí fuera algo de otro mundo, sino que por un segundo imagine como alguna vez, decíamos palabras similares mi hermana y yo cuando éramos muy pequeños, quizá la vida pasa tan rápido que no vives realmente el presente, solo sigues acariciando las manecillas del reloj, rogándole al destino que el pasado vuelva a repetirse a una vez, tan solo para no olvidar a los que se quedaron en el transcurso de nuestra vida.
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Al terminar de comer, acompañe a Cinthia a su auto; todo era tan perfecto que habíamos olvidado darle el regalo a Mari.
- Aun no le has dado el regalo a la hija de mi hermana - le dije algo nervioso, no sabía porque me sentía de esa manera
- Te equivocas, cuando te fuiste por unos minutos, yo personalmente me encargue de entregarlo
- ¿Que le pareció?
- Le encanto, se puso muy contenta, era un libro que estoy seguro que le ayudara mucho, tiene demasiadas paginas pero como está muy bien ilustrado, creo que no sentirá muy pesada la lectura.
- Nunca pensé que le regalarías un libro a una niña, porque he visto que en la actualidad no hay fieles seguidores de las historias.
- Yo sé que Mari es una niña diferente, no deberías subestimarla, tal vez en un futuro, ella te de una gran sorpresa, además en la vida pasan muchas cosas, que a veces no imaginamos lo que puede suceder, el futuro es algo incierto.
- Tienes toda la razón, debo de quitarme esa manía de creer que yo se las respuestas sobre todo lo que puede ocurrir, nadie lo sabe
- Un ejemplo muy claro, lo somos tú y yo, en la universidad era una chica demasiado superficial, tenía todo a mi alcance, no tenía que esforzarme para conseguir lo que yo quería, debo confesarte de que te tenía mucha envidia a ti y otras personas
- ¿Envidia de qué? Yo no era nada en particular, era muy ermitaño, fue muy raro que Marco y yo nos volviéramos muy buenos amigos
- Te vuelves a equivocar mi querido Ricardo, lo que envidiaba de ti, era que tu personalidad era autentica, no te importaba agradarle a nadie, algo me decía que había lealtad en ti, los maestros te felicitaban porque eras muy inteligente, recuerdo que en varias ocasiones ganaste concursos de conocimiento, en ese tiempo yo quería lograr cosas por mi propio merito, pero no fui muy valiente como para enfrentarme al mundo, como te repito era muy superficial
- Pero ¿Que paso con todos tus amigos que tenías?
- Me dejaron sola y los novios que tenía era unos completos idiotas, desde ahí empezó mi mala racha, soy un tonta, no supe cómo enfrentar los problemas y comencé a hacer cosas muy malas de las que hasta la fecha me arrepiento, estoy consciente de que tarde o temprano pagare mis errores solo espero que no sea con las personas que más aprecio
