Destino (Eduardo Vargas)

453 8 2
                                    

Unos pocos meses después de haber ingresado al equipo de fútbol de los tigres me encontraba con algunos compañeros hablando y molestando en la cancha.

- Debo admitir que las mujeres de aqui estan buenisimas - dijo uno de ellos

- Para que vamos a decir que no - dijo otro

- ¿Que opinas Eduardo? - dijo otro de ellos

No sabía que responder.

- Di algo, no es que nos vayas a salir con que los que estamos buenos somos nosotros - dijo uno de ellos

Los demás se rieron.

- No sé porque piensan esas cosas - dije

- Pues porque en todo este tiempo no te hemos visto con ninguna chica - dijo uno

- Y no vayas a salir con que no hay ninguna porque antes sobran en este lugar - dijo otro

- Solo quiero concentrarme en mi rendimiento con el equipo eso es todo no hay otra razón - dije

- Necesitas a alguien - dijo un compañero

Negué con mi cabeza.

- Así estoy bien - dije

- No te creemos, hasta que no te veamos aunque sea una vez con una muchacha no vamos a cambiar de opinión - dijo otro de mis compañeros

- Tanto quieren eso, esta bien ya se los mostrare - dije

Y como si el destino estuviera de acuerdo aparecieron en ese momento dos chicas caminando, esas burlas acabarían en este momento, no dude y me acerque a ellas, una de ellas iba algo distraída por lo que se asusto cuando me vio tan cerca eso me causo risa.

- Hola hermosas - dije

- Hola - dijo una de ellas la otra fue indiferente

- ¿Como estan? - les pregunté

- Bien y ¿tú? - volvio a responder la misma chica

- Me alegra yo también estoy bien pero que le pasa a tu amiga acaso no me entiende - dije

- Ja ja muy chistosito pues no me pasa nada, gracias por preocuparte, ahora largate y dejanos seguir nuestro camino idiota - dijo por fin la otra chica

Esta chica si que era divertida, primero se asusta, luego me ignora y ahora me insulta.

- ¿Por que tanta agresividad? No estoy haciendo nada malo - dije

- Él tiene razón no tienes porque estar así calmate un poco - dijo la chica que la acompañaba

- No sabía que lo conocias - le dijo a la chica

Esta negó con su cabeza.

- Tú deja de hacer tantas preguntas y mejor ocupate de tus cosas, no tengo porque estar hablando con un tipo que se acerca como si nada a nosotras asustandome al no saber sus intenciones - dijo mirandome

- No soy ni violador, ni secuestrador, ni ladrón y ninguna de esas cosas que te llegaste a imaginar. Pido perdón por haberte asustado - dije

- Es bueno saber que no eres ninguna de las cosas anteriores, entonces seguimos por nuestro camino - dijo ella

Ella arrastró a su amiga para seguir caminando y yo quede cruzado de brazos sin saber que hacer, regresé con los chicos y les mentí sobre lo que habia pasado.

Teniamos un partido en un par de días y cuando llego ese día, el destino volvio a hacer de las suyas.

- Eduardo lo tenias bien guardado - dijo uno de mis compañeros

Historias de futbolistas // One ShotsTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon