Un buen acuerdo (1)

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18+ NSFW
Historia ficticia salida de una mente imaginativa, sólo para entretener, no pinchenmamen


Soy un tipo normal ni mucho ni poco, no soy el clásico semental (25+ cm ya saben) ni tengo el cuerpazo de un vikingo, soy así, común, sin más chiste, por la calle no destacaría, hombre casado por 17 años, de cabello castaño (ahora escaso), más velludo de lo que quisiera, algo pasado de peso. padre de tres, dos chicos, parecidos a mi lado familiar, y una chica Alexa mi consentida, tan parecida a su madre, pero con sus diferencias, castaña clara, delgada unos senos medianos, un traserito respingón de bonita forma como duraznito, coronando una piernas largas, piel apiñonada, sus lindos ojos castaños risueños.

Pasarón los años mi hijo el mayor se fue a trabajar apenas termino su carrera, el segundo consiguió una beca en el extranjero, y nos quedamos los tres solos, mi pequeña mientras crecía más de una vez me sorprendí mirándola, atraía mi atención (lo atribuía a que me recordaba a su madre de joven) alguna ocasión a sus doce años traía unos shorts blancos que envolvía su hermoso culito... quede sin palabras, no fue si no hasta que derrame el café sobre mis piernas, que volví en mi y al limpiarme observe mi tremenda erección... cosas que un padre no debiera sentir. Fueron cosas del pasado, que trate de sepultar, ignorar, algunos dirán:

¡monstruo! Pero ya dije soy una persona normal, tratando de sobrellevar las cosas, seguir fiel, ya sabes, la vecina que aún aguanta y no le eres indiferente, las compañeras de trabajo que tienen problemas en su relación y buscan un calentón, los roces en el transporte (tentador)... alguna vez quede atrapado detrás de una chica muy joven (algo que no busque, en serio) su cabello largo, su uniforme de secundaria.. iba para su Escuela y bueno quede entre los empujones trás ella, mi verga quedo exactamente entre sus nalgas, envueltas en esa falda tableada, yo podía sentir todo (ya que no era muy gruesa)y hacia que todo amoldarse, sentía como si sujetará mi falo y lo asicalara cada frenon o movimiento, solo me hacia frotarme sobre ella más y más, intente quitarme, pero no pude, fueron tres paradas supercachondas, donde termine como un burro y a pesar de haber "llegado" seguía así, lo bueno que mi esposa aguanto la faena (había que desahogarme con alguien).

 iba para su Escuela y bueno quede entre los empujones trás ella, mi verga quedo exactamente entre sus nalgas, envueltas en esa falda tableada, yo podía sentir todo (ya que no era muy gruesa)y hacia que todo amoldarse, sentía como si sujetará mi f...

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Así que nunca tuve pensamientos raros , mi pequeña era eso: mi pequeña.

Ella apenas ingreso al bachillerato conoció a un chico mayor, algunos semestres adelantado, Carlos, parecía bue

na persona, un chico agradable, pero nunca me convenció del todo, tenía un aire de que ocultaba algo, esa persona parecía tener una doble vida, no se si me explicó, como si ocultara su verdadera cara, un lobo intentando parecer oveja, siguieron la relación, pero yo estaba en desacuerdo, lo notaba controlador, exigente y algo abusivo; así que fué cuestión de tiempo, que mi niña cambiará, se volvió retraída, recelosa, note algunos moretones y dolencias, una mañana persivi que le era incómodo sentarse, Vi un leve rubor al acomodarse en la silla, como recordando el porqué está así...en otra ocasión traía una mascada al cuello, pero pude ver que era para ocultar algo, pensé
-un chupete-
pero no, eran marcas de un collar o correa de perro, algo la había sujetado, de forma bruta, así que decidí hablar con el susodicho, ya que no quería confrontar a mi hija sin argumentos, o en el peor caso, equivocarme y perder su confianza.

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