Capítulo V

316 63 32
                                    

Las lluvias siguieron, las clases fueron canceladas por inundación en la escuela y salir de casa significaba querer que un rayo te partiera.
Pero después de casi dos semanas de lluvia, se vieron  los primeros rayos de sol caer por la húmeda tierra.
Estar en casa por ese tiempo fue bueno para aclarar mi mente, organizar las cosas para ejecutar mi acto y además ahora que lo pienso no he tomado una vida desde hace tiempo.
<Mamá dice que no salgas>se interpone Michael.
Giro los ojos, saco de mi bolsillo un cigarrillo y lo pongo en mis labios.
<Muévete>lo enciendo frente él.
<Me dijo que no te dejara salir, últimamente llegas muy tarde>aprieta el rostro a causa del humo.
Suelto una simple risa, coloco mi mano sobre su cabeza y lo muevo del camino.
<Entonces no llegaré tarde>me abro paso y salgo de casa.
Al estar fuera lo primero que me llega es el sonido de las aves, después los tenues rayos del sol tocan mi piel.
La mañana es tranquila, eso es bueno para un asesinato pero el problema es que no puedo. Usualmente asesino a la primera persona que veo pero no puedo, algo me lo impide, me molesta. Al intentar acercarme a alguien me alejo, así de simple
Por pensar en todo eso me da una jaqueca, enciendo otro cigarrillo, camino a un campo, tomo asiento sobre el húmedo pasto y cierro los ojos.
Algo en mi mente me lo impide, siento en mi estómago náuseas y ansiedad, probablemente mi cuerpo intenta advertirme que debería guardar energía para mi plan.
<No sabía que te gustaba salir en las mañanas>se escucha la voz de una chica acercarse, abro los ojos ligeramente y miro hacia la voz.
<No me gusta>desvío la mirada de ella y vuelvo a cerrar los ojos. Podría matarla a ella pero es mi mejor manipulación, la llamo "amiga" y es que le he dicho e inventado tantas cosas sobre mi vida por si alguien sospecha de mí ella les dirá que no soy capaz de hacerle daño ni a una mosca.
<Sabes hay un rumor...>se acerca, toma asiento junto mí y suspira, con un sonido le indico que prosiga<Algunas personas dicen cosas sobre ti y Frank...>
<Es Cierto>la interrumpo con indiferencia.
<Las personas de este pueblo no son muy amables con gente como ustedes>se apresura a hablar con preocupación.
<Entonces no hables>digo entre dientes. Usualmente no soy tan duro con ella pero mi cabeza no deja de gritarme, siento abstinencia por algo que he hecho desde hace tiempo y me molesta.
<Iré con unos chicos de la ciudad a las canchas a jugar ¿vienes?> suspira rendida de mi actitud y se pone de pie.
Odio pensar en un juego con chicos sin cerebro y gastar mi tiempo ahí pero puede que valga algo la pena. Esos chicos de ciudad nunca ponen atención y atrapar a uno para tomar su vida no será tan difícil.
En el camino la chica me cuenta entusiasmada sobre sus futuras vacaciones, pretendo escucharla e interesarme pero realmente estoy pensando en cómo será, tal vez podría cortar su garganta y esperar que se desangre o simplemente improvisar.
<¿Y por qué conoces a gente de la ciudad?>pregunto al ver a los chicos jugar baloncesto detrás de las rejas.
<Mi primo viene de visita y trajo unos amigos>se apresura a caminar a la entrada dejándome atrás.
Los chicos al verla la saludan alegres, ella hace bromas y ríe, sigo caminando acercándome y examinando a cada uno.
<¿Quién es el raro?>me mira uno de ellos, los demás me señalan con la mirada e intento sonreír.
<Gerard, es un amigo>responde la chica con una risita, le sigo la risa y me encamino a saludar a los demás con una muy buena falsa sonrisa.
Desprevenido, un chico lanza el balón hacia mi, lo atrapó algo torpe y me quejo por el golpe.
<Empieza raro>sonríe, da unos pasos hacia atrás, con torpeza boto el balón en el suelo y camino.
Mi "amiga" se adelanta y me quita el balón de las manos, los chicos ríen pero pretendo que no me molesta. Al fin, uno de ellos terminara pidiéndome piedad.
En estos momentos el partido ya ha avanzado, he tocado la pelota unas pocas veces y la mayoría de ellas es por que me golpean con ella.
El tiempo parece pasar tan rápido que ya pasa del medio día, algunos de los chicos se han ido a tomar el almuerzo y es hora de que yo me retire. O eso les haga pensar.
<Bueno, un gusto conocerlos pero también me voy>levanto la voz para que las cinco personas de ahí me escuchen.
<Quédate un poco más Gerard>habla la chica y detrás de ella se escucha un "shh"
<Adiós>tomo el suéter que ya antes me había quitado y me alejo lo bastante para que ellos no noten que sigo ahí.
Esta estrategia es simple, hacerles creer que ya no me encuentro ahí. Cuando uno de los chicos restantes muera, sospecharan de la última persona que estuvo ahí y yo no seré una de ellas. Es lógica.
La espera comienza a hacer e larga, enciendo un cigarrillo y juego un poco con mi navaja, observo hacia las canchas para ver que ya solamente tres personas se encuentran ahí, la chica, su primo y otro joven.
Comienzo a aburrirme y la verdad ya el sentimiento de no poder asesinar a quien sea se ha ido, me pongo de pie de mi escondite pero me detengo al ver que la chica y su primo están saliendo de la cancha dejando sólo y vulnerable al chico.
Apago el cigarrillo, salgo de mi escondite y me dirijo hacia él.
<¿Qué haces aquí?>levanta la voz desde lo lejos al notarme.
Antes de responder me acerco aún más<Olvidé mi suéter>sonrío de manera macabra.
<Lo traes puesto>me señala y su mirada se confunde.
Pongo una mueca torpe, primero necesito sacarlo de las canchas e ir a otro lugar.
<¿Quieres ver el lado macabro del pueblo?>me atrevo a sonreír. A los niños los atraen con dulces, a los mayores con cosas fuera de lo normal.
Me mira dudoso, juega un poco con el balón en sus manos.
<Bueno>levanto los hombros y le doy la espalda esperando a que acepte, siempre lo hacen.
<Te sigo>pronuncia, sonrío lentamente y camino ansioso.
Camino a las canchas me percaté de un pequeño callejón, significa que tendré que hacerlo rápido.
<Dicen que si entras a lo profundo de este callejón oscuro una voz en tu cabeza sonará y la razón pronto pierdes>hablo al detenerme frente el lugar.
<Tonterías>bufa el chico y gira su cuerpo para regresar a las canchas.
<Entraré yo entonces, le diré a los demás que no pudiste ni mirar a la oscuridad>río un poco y me adentro al lugar, con cautela saco la navaja de mi bolsillo y la escondo en mi mano.
Ya algo profundo, escucho los pasos del chico, sus ojos se abren al intentar encontrarme.
Está algo distraído por lo que me apresuro a sus espaldas y coloco la navaja en su cuello.
<Me gustaría divertirme un poco antes de hacerlo pero es de día y los pequeños no tardan en salir>relamo mis labios, el chico intenta salir pero pongo presión en su cuello.
<¿Qué quieres?>tartamudea<Te daré dinero>se escucha su voz tartamudear.
<Lo único que quiero es derramar tu sangre>suelto una risa.
<Te buscarán si lo haces>se apresura a hablar.
<Nadie lo ha hecho, ¿Por qué habrían de hacerlo ahora?>y antes de que pudiera decir otra cosa, deslicé la navaja por su cuello, solté rápidamente el cuerpo y desde arriba miré cómo su vida se desvanecía.
Deshacerse del cuerpo no es algo completamente necesario, de hecho es mejor no hacerlo ya que puedes hacer unos errores como dejar huellas y ser muy obvio.
Me alejo de él, antes de salir del callejón doy un vistazo para asegurarme de que nadie venga, salgo del lugar y me apresuro para alejarme, con el interior de mi suéter limpio el metal de la navaja pero un cuerpo choca contra el mío. Molesto levanto la mirada y me encuentro con el castaño.
<Gerard>sonríe al pronunciar mi nombre<Bravucones eh>opina al notar la navaja en mis manos, rápidamente la meto en mi bolsillo y asiento torpemente.
<¿Qué haces aquí?>bajo la mirada para no ver sus ojos.
<Salió el sol, iba para tú casa>habla olvidando el asunto de la navaja.
<Vamos>lo tomo de la muñeca forzándolo a alejarnos, en cualquier momento alguien encontrará el cuerpo, podría ser ahora y Frank y yo estamos muy cerca de la escena, no dudarán en tomarnos como sospechosos, notarán la navaja que cargo.
<Suéltame>se queja ya que he apretado el agarre<Estás demasiado extraño>aplica fuerza y jala su mano zafando el agarre<Parece que viste un muerto>acaricia su muñeca ya que al parecer lo lastimé.
Sus palabras causan desastre en mi mente, como si el supiera todo lo que hago y de a poco me estuviera sacando la información así que me lanzo a sus labios y aprieto nuestros cuerpos. Él posa una mano en mi cuello y profundiza el beso.
<Vámonos ya>digo algo calmado, él sonríe y permite que tome su mano de una manera apropiada.

El beso me tranquilizó permitiéndome mantener la calma por fuera pero mi cabeza me da vueltas, recuerdo las palabras del chico, luego las voces de la gente que he asesinado.
Frank me hace sentir que lo que hago está mal. Está cambiando mi mente.
Mientras más rápido lo mate estos sentimientos se irán.



______
Perdón por no actualizar pero la verdad no había tenido tiempo.
Uno de ustedes me dijo que a gerard se lo imaginaban como revenge y sería mejor si les decía en cuál era me estoy basando.
Les voy a dar fotos, solamente que en la historia han de tener como 17-18 años

Les voy a dar fotos, solamente que en la historia han de tener como 17-18 años

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
&quot;Psychotic Kid&quot; [frerard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora