3.- Ya Estoy Muerta

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Se estaba riendo. ¿Riéndose de mi o de la situación? ¿Estaría riendo porque iba a matarme?

— No voy a matarte Amelia, eso es absurdo —Murmuró por lo bajo— Ven conmigo, quiero hablar.

Hizo una seña a los hombres detrás de mi que me tomaron de los brazos y me condujeron hacia afuera del bar. Liliana y yo intercambiamos una última mirada antes de salir, ella parecía estar preguntándome que era lo que pasaba pero yo sólo respondí con lo que supuse sería una expresión de total incertidumbre.

Frente al bar había una limusina blanca. Anton subió primero y seguido a ello me subieron a mi.

— Aquí podemos hablar con más tranquilidad —Dijo sirviéndose otra copa de vino.

— ¿Cómo que no volveré a ver a Georgio? Prometo que yo no mandé matar a nadie, yo solamente...

— Amelia, Amelia —Elevó las manos frenando lo que decía— Te creía una mujer más implacable e inteligente. Georgio se metió solito en la boca del lobo ayer, fue a perseguir a un hombre muy cercano de una de las personas más importantes del país y eso lo llevó a su muerte.

— ¿Entonces no estás aquí por Georgio?

— No, ya lo dije, estoy aquí por ti. El asunto de Georgio es aparte, no lo juzgo, murió por obedecer a su cabeza inferior y no a la superior— Se encogió de hombros riendo.

— Yo sólo quería saber para quien trabajaba...

— ¿Él hombre que mató a tu familia? —Tomó un sorbo de vino y colocó la copa en el reposa vasos.

— ¿Cómo sabes eso?

— Oh Amelia, deberías irte acostumbrando a que yo sé muchas cosas.

— ¿Quién eres? ¿Qué es lo que chingados quieres? ¿Dinero, sexo...?

— No, no, no, no —Agitó las manos frente a él como si mis propuestas fueran inaceptables— Vamos a empezar de nuevo porque comienzo a creer que mi primera impresión no te ha dejado claro el porqué estoy aquí. Verás, llevo buscándote mucho tiempo...

— ¿Buscándome?

— Si, déjame hablar. En realidad esperaba pasar una buena noche hoy, beber bastante y ya luego preocuparme por hablar contigo después. Lamentablemente no soy muy reconocido por mi paciencia —Sonrió— Estoy aquí por una deuda que tengo con tu padre.

Tan solo con la simple mención de mi padre me sentí como una niña indefensa y perdida. De nuevo era la niña que una vez fue con su mamá al supermercado y se perdió. Vi a Anton a los ojos como si fuera el guardia que me había encontrado llorando, solamente que sabía que no me llevaría con mi mamá o mi papá esta vez, solamente me traería recuerdos desagradables.

— Han pasado casi seis años desde que mi papá está bajo tierra, no sé qué clase de cosa puedas deberle a la hija de un poco de huesos y polvo.

— Aunque no lo creas he pasado todo ese tiempo buscándote —Juntó ambas manos y se reclinó hacia enfrente totalmente serio— Tus padres eran grandes amigos míos...

— Por favor —Me dieron muchas ganas de reírme así que lo interrumpí— No me he movido más de diez cuadras a la redonda en todo este tiempo; y si mis padres nunca tuvieron ni siquiera conocidos, creo que mucho menos amigos. Así que mejor dime ya en qué clase de sentido vienes a joderme la vida con tus mentiras baratas —Pareció sorprendido y permaneció en silencio bebiendo de nuevo de la copa de vino mientras me veía fijamente.

— Tu padre —Bebió el último sorbo y se sirvió más antes de continuar— Él vino a mi unas horas antes de la explosión.

Los recuerdos volvieron, yo estaba de nuevo tirada en la calle viendo como mi casa ardía en llamas.

"— Estaba histérico diciendo que unos hombres habían estado siguiéndolo a todas partes, tenía miedo por ustedes y me pidió que las cuidara...

Recordé la mirada de mi papá cuando nos topamos al salir; perdida y cansada. Nos había abrazado, nos había dicho que lo veríamos más tarde y que tuviéramos cuidado. Recordé las palabras de mi hermana sobre la misma camioneta negra que seguía fuera de la casa.

— Me dio dinero para mandarlas lejos de aquí si algo llegaba a pasarle y en nombre a una amistad pasada yo le prometí que lo haría. Lamentablemente fue demasiado tarde y no pude hacer nada.

Vi a Irina correr por delante de mi cuando dos hombres salieron de la casa con armas y huyeron en la misma camioneta. Intenté detenerla pero ella entró primero a la casa y para cuando llegué a la parte delantera todo explotó.

— Tu padre las había tenido tan en secreto que cuando pasó no tenía idea de quienes eran las personas a las que debí cuidar. Solo tenía los nombres, no habían fotos ni testigos que me dijeran si todos habían muerto ahí. Mandé hombres a la morgue, los cuerpos eran irreconocibles. Tú padre me dijo que había tenido tres hijas y en efectivo eran cinco los cadáveres. Di por sentado con todo el dolor del mundo que no podía hacer nada más.

Reviví lo que fue verme perdida con la vista en las llamas que mataron a mi familia. Recordé las manos que me sostuvieron y me llevaron a su casa antes de que la policía o ambulancia llegara, los días que pasé sentada en aquella cama sin comer ni dormir y las asquerosas manos del hombre que se había aprovechado de mi tantas veces como le vino en gana.

— Pasaron años en los que te creí muerta. Pero no, estás viva y ayudarte es lo mínimo que puedo hacer por ti y por la memoria tu familia.

Había estado tan cerca de la muerte tantas veces que el pánico y la adrenalina me superaban cuando se trataba de peligro. Le tenía miedo a la muerte y a lo que conllevaba irse de este mundo y que hubiera la posibilidad de no reencontrarme con mi familia. Le tenía mucho miedo a olvidarlos.

— Pero estas equivocado —Fruncí el ceño dándome cuenta de lo irónico que era eso— Tu has venido a desenterrar solo otro cadáver más que no irá a ninguna parte. Yo ya estoy muerta, yo morí junto con ellos y así fue para el mundo entero.

— ¿Qué tratas de decirme? —Parecía estar trabajando toda clase de maquinaria y tuerca de su cerebro en ese momento así que me incliné hacia él y murmuré.

— Si tenías la esperanza de encontrar algo más que una chica que baila, no tiene cuna ni apellido y encima lo único que sabe hacer, y muy bien, es coger; entonces no entiendo que vienes a hacer aquí —Se inclinó hacia enfrente también y nuestras narices casi se tocaron.

— ¿Entonces no te interesa saber quién los mató?













Yo tardo días editando y este capítulo me pareció esencial para el desarrollo de la historia así que no podía permitirme cometer errores jeje :v
(En especial si no quería mandar a borradores todo de nuevo para cambiar cosas)

Perdón para mi esposa hermosa Oshly que tuvo que esperar (y que tendrá que esperar más para sus escenas +18 que no prometo nada por cierto xD)

Y gracias por leer jeje <3

~Ram~

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⏰ Última actualización: Aug 12, 2018 ⏰

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