—No quiero escucharte ni verte nunca más, ¿escuchaste? Vete, que estás haciendo un drama y mis vecinos te escucharan. 

En realidad mi única vecina era un viejita que vivía al otro extremo del pasillo. Vivía aquí desde antes de que me mudara y era muy amable. Tenía dos gatos y, cuando ella debía viajar a visitar a sus hijos, yo me hacía cargo de los animalitos. Estaba segura que ella no escucharía los gritos desde su departamento pero aún así me sentía incómoda de tan solo pensar que lo haría y se quejaría con el dueño del edificio. 

—Necesitamos hablar, por favor —se escuchó un sollozo por su parte y no pude evitar derrumbarme. Me senté al lado de la puerta y lloré, lloré sin reprimirme. Al parecer Hanbin hizo lo mismo ya que se escuchaba su llanto mezclándose junto al mío. No sé cuánto tiempo pasó, solo sé que me quedé dormida. 

Abrí mis ojos y lo primero que pude observar fue oscuridad. Me sentía horriblemente contracturada. Me encontraba sentada en el piso con mi cabeza apoyada en la puerta de mi departamento. Y allí regresaron todos los recuerdos. Me levanté rápidamente del suelo y prendí las luces de mi departamento. Le tenía pavor a la oscuridad. Luego me dirigí con temor hacia la puerta. ¿Seguirá allí? Ya habían pasado más de dos horas. Probablemente se dio cuenta que no tenía sentido seguir luchando por mi y decidió marcharse de mi vida. Suspiré y tomé valor al abrir la puerta. Mi sorpresa fue enorme al encontrarme a Hanbin dormido en el suelo con las mejillas cubiertas de lágrimas secas. Mordí mi labio inferior. La culpabilidad comenzó a crecer en mi. 

Me agaché a su lado y acaricié su mejilla. Se veía hermoso cuando dormía. En realidad él se veía hermoso de cualquier manera. Para mi, mi novio era la persona más perfecta que existía en el universo. Comencé a sacudirlo levemente. No podía quedarse a dormir en el suelo. Le diría que era hora de marcharse a su departamento a descansar. 

—Hanbin, despierta —susurre. Al escuchar mi voz él abrió rápidamente sus ojos y se sentó. Estaba a punto de decirle que se marchara cuando se tiró hacía mi y me envolvió en un abrazo. 

—Suni, por Dios creí que nunca abrirías esa puerta —murmuró con voz ronca debido a que acababa de despertarse. Amaba su voz ronca pero no era momento de pensar en ella. Quería separarme pero no me lo permitió. —Mi amor, por favor, no —se notaba tan angustiado que mi corazón se encogió. Decidí corresponder el abrazo. Diablos. Era demasiado débil frente a Hanbin. 

—Está bien, no te pediré que te vayas —dije suavemente y sentí cómo se relajaba en mis brazos —Pero entremos al departamento, por favor. No quiero asustar a mi vecina. 

Minutos más tarde nos encontrábamos sentados en mi cocina. Había hecho un café para él y un té para mi. Ambos estábamos cansados y nuestros cuerpos dolían debido a la posición en que dormimos pero era obvio que había algo de lo que debíamos hablar.  

—¿Empezaras? ¿o estas esperando a que te eche de mi departamento? —dije irritadamente. Él se sorprendió debido a mi tono de voz y asintió con la cabeza. 

—Mi amor, nunca quise ocultarte algo. No te avisé que iría a un club porque ni siquiera yo lo sabía. Los chicos habían mencionado que irían a un club por la noche pero no sabía que yo estaba incluido en el plan. Tuve una discusión con ellos debido a que me querían obligar ir al club. Jinhwan me reprochó que ya no pasábamos tiempo en grupo y es verdad. Cada vez que tengo un tiempo libre prefiero pasarlo contigo en lugar de realizar actividades con ellos y eso nos está alejando —fruncí el ceño. No sabía que había ocasionado tantos problemas internos en iKON. —Obviamente no es tu culpa. Soy yo quien decide en qué y con quién pasar el tiempo. Tu no tienes la culpa de que me divierta más contigo. En fin, me sentí culpable y acepté ir. Luego llamaste y te mentí, ya que sentía que te enojarías con ellos si te decía la verdad acerca de cancelarte. Aunque hubiese preferido mil veces quedarme contigo y ver doramas a ir un club—tal vez tenía razón. Tal vez en su momento sí me hubiera enfadado un poco pero luego se me pasaría. Entendería que ellos también necesitan pasar tiempo con Hanbin fuera del trabajo. 

—Eso no justifica lo de la modelo —dije fríamente. Nunca le hablé de ésta manera a Hanbin y pude notar cómo le afecto ya que un escalofrío lo recorrió de pies a cabeza. Él nunca había conocido mi faceta perra-sin-sentimientos. 

—Amor, lo de la modelo es exageración de los medios. June invitó a un grupo de modelos para venir con nosotros pero yo no estaba enterado. En el club una de ellas se acercó y hablamos un rato. No te mentiré, al principio fue agradable pero luego confundió mi amabilidad con algo más y le dejé en claro que yo no estaba interesado en ella. Luego ella se emborrachó demasiado. Los demás estaban como ella o aún peor así que decidí llevarlos a casa. 

—¿Llevarlos? —murmuré inconscientemente. Estaba confundida. ¿Por qué utilizaba el plural? 

—Sí, no solo la llevé a ella a su casa. También a June, Chanwoo y Bobby. Pero claro, los periodistas sólo exponen lo que les conviene. —mordí mi labio inferior. Me sentía culpable. Pero aún así no podía confiar en el tan rápido. Mi corazón no me lo permitía. —Te juro que como máximo pasé treinta minutos junto a ella. Luego estuve con Bobby o incluso solo. Las personas lo exageran para meterme en problemas. —se acercó a mi y acarició mi mejilla. —Sólo puedo amarte a ti. Mi corazón no quiere mirar a otras mujeres. 

Y no lo pude evitar. Me lancé a sus brazos y lloré. Lloré mares de lagrimas mientras él me mantenía junto a el y acariciaba mi cabello. Me sentía tan mala novia. Lo hice pasar un momento horrible, lo hice llorar y sufrir. Me merecía lo peor del mundo. 

Luego de unos minutos logré tranquilizarme. Hanbin me prometió que no me mentiría más, que no existirían secretos entre nosotros. Y le creí. Sus ojos parecían sinceros. Al final, realizamos todo lo que el sábado anterior no pudimos. Comimos, miramos doramas y nos mimamos muchísimo. Cuando el sueño estaba por alcanzarnos, nos dirigimos hacia mi habitación y nos acostamos en la cama. 

—No pudimos ir al cine —murmure con tristeza. El me miró con ternura y acarició mi mejilla. 

—Tenemos una vida entera para ir al cine. Ahora disfrutemos la compañía del otro. Es lo único que necesito para ser feliz. 

♡ ♡ ♡

Y los bebitos se arreglaron<3. 

Si leen, no olvidar votar. Me hace muy feliz y me motiva a publicar capítulos más seguido. Mucho lov♡

hanbin's girlfriend ➹ hanbin/b.i & tu [iKON]Where stories live. Discover now