Capítulo 46: Reencuentro

Start from the beginning
                                    

—¡Corre!—grita corriendo lo más rápido que puede, no tiene que decirlo dos veces.

Corro a su lado intentando perderlos, pero son mucho más rápidos que nosotros, uno de ellos ataca por la espalda al chico, tirandolo al suelo, el can muestra sus filosos dientes, buscando morderlo de cualquier manera, el chico lo detiene empujando el arma contra el cuello del animal, sostengo con fuerza el lomo del animal, no dudo en arrojarlo lo más lejos de nosotros, golpea un auto, después cae al piso aturdido.

—Tenemos que irnos—extiendo mi mano hacía el chico, ayudandolo a levantarse, seguro no tardan en aparecer más de esas bestias.

Y no estaba equivocada, cuando giramos una esquina aparecen tres de ellos, listos para atacarnos, varios disparos hacen eco por toda la calle, el chico logra dejar fuera de combate a dos de ellos, los otros seis no tardan en rodearnos, me toca a mi deshacerme de todos los demás, porque parece ser que el niño listo se quedo sin balas. Las bestias se retuercen en el suelo, llorando por el dolor que les ocaciono.

—¡Sigue corriendo!—le ordeno al chico sorprendido por mi poder, sale del estupor corriendo lejos.

No sé cuanto tiempo más pueda seguir atacandolos, estoy débil, mis piernas fallan en continuar, mis parpados se sienten pesados, voy a desmayarme en cualquier momento. Por algún milagro, me las arreglo para dejar inconsientes a estas bestias y seguir al chico a un lugar seguro. Llegamos a una puerta de metal, la cual no duda en tocar con insistencia, si no abren pronto ceremos la cena de estos perros.

—¡Soy yo, maldita sea! ¡Abran!—grita él con desesperación.

Más bestias aparecen rodeandonos, los encaro, alejandolos de nostros lo mejor que puedo, mi poder esta por los suelos, me tambaleo a punto de perder el conocimiento de nuevo, apenas logro provocarles cosquillas a estas bestias.

Para este punto ya no me importa que me ataquen a mí, me preocupa el chico detrás de mí que sigue gritando como loco. Concentro todo mi ser en protegerlo a él para que no puedan dañarlo, algunos de ellos logran morder mis brazos, después mis piernas, mi cadera..., grito tan fuerte que me desgara las cuerdas vocales. Sangre sale de las heridas bañando mi cuerpo de rojo, uno de ellos se acerca al chico, me muevo arrastrandolo lejos de él antes de que logre tocarlo, los golpeo tan fuerte como puedo.

Escucho al chico gritar cosas detrás de mí, pero su voz suena tan lejana que no entiendo lo que dice. De pronto, un brilo incandescente nos rodea dejándome ciega, logro ver como las bestias lloran de dolor buscando alejarse de aquí, respiro de nuevo, segura que moriré, aunque no sé cuanto tiempo tarde en regresar a la vida esta vez.

*_*_*_*

—¡Eve! ¡Despierta! Por favor, despierta—escucho una voz llamarme.

—¿Julian?—pregunto con la voz rasposa.

Tengo que luchar contra mis parpados para abrir los ojos, parpadeo varias veces enfocandome en el rostro frente a mí, Archer me mira con preocupado.

—Ya desperto—escucho la voz de mi amiga.

—Maia—la busco con la mirada.

—Estoy aquí—se acerca para que pueda verla.

—Estas bien—suspiro aliviada.

Creí que la había perdido, creí que Adam la había encontrado, que fallé de nuevo.

—¿Qué demonios pasó, Evelyn? Creí decirte una hora...—me regaña mi amigo.

—Archer—le advierte Maia al ver mi estado.

Para mi sorpresa mis heridas estan curadas, no hay rastro alguno de las mordidas de esos perros del demonio, también tengo puesto ropa limpia, de quién deduzco es de Maia. Aunque las heridas desaparecieron, sigo sintiéndome débil.

Ángel de la muerte [TERMINADA✔]Where stories live. Discover now