Otra Richie Tozier

8 YO TE CONOZCO

Dato importante sobre la historia al final.

  Richie

Estoy de nuevo en la habitación. Ella de nuevo esta acostada, conmigo entre sus piernas. Mis manos recorren otra vez su cuerpo, escuchando sus jadeos sobre la música de fondo. No para de moverse contra mí, y yo no paro de imaginar cómo será hacerlo con ella. La beso de nuevo y ella sonríe, repitiendo mi nombre.

Richie...

Richie...

-¡Richie!- Stan me mueve un hombro-. ¡Contesta! ¿Estás sordo o que?

Me subo de nuevo a la bicicleta. Comienzo a pedalear.

-A ustedes ya les gustó interrumpirme en el peor momento- salimos del patio de Edds y nos dirigimos a la casa de Charly-. Y no. Para su curiosa y muy depravada información, no tuvimos sexo.

-¿Están hablando de cuando ayer se quedaron en el cuarto solos?- pregunta Eddie, que apenas se suma a la platica-. Creí que estaba desmayada.

-¡Y lo estaba!- defiendo a Charly. Con cualquier otra chica hubiera presumido lo que hice, pero a ella no quiero dejarla como a una puta. Me importa-. Despertó unos minutos antes de que Bill entrara y me estaba preguntando qué pasó. Aunque no sé que mentiras les fué a contar éste.

Hablo refiriéndome a Bill. El rueda los ojos.

-Besar está b-bien Richie. P-pero manos bajo la b-blusa...

-¡Ohhhh!- gritan mis dos amigos.

-¿Primera base, Richie?- Eddie es el primero.

-¿Segunda?- Stan no tarda en seguirlo.

-¿T-tercera?- remata Bill.

-¡Ay, malditas viejas metiches!- ellos solo se ríen imitandome. ¿Cuando pasé de ser el divertido y sexy del grupo al aburrido sexy?

Porque, aburrido o no, lo sexy no se me quita.

-¡Richie y Charly se aman mucho...!-empieza a cantar Eddie.

-¡Solo atracción, nada de amor!- me asusta que sigan cantando porque la casa de Charly está como a una cuadra.

-¡...y ellos quieren más que eso..!- Stan sigue con Eddie. Yo intento pararlos con mis gritos, pero ellos no se callan.

-¡...y aunque ninguno de los dos lo admita...!

-¿Admitir que Stan es mujer? Acabo de hacerlo.

-¡...ya se dieron muchos besos!- Eddie termina su ridícula canción y la siguen cantando hasta que estamos en su casa.

  Charly

-¡Charly!- grita alguien desde desde abajo.

Estoy acostada en mi cama. Solo traigo puesta una cosa que encontré ayer cuando llegué a casa. Tuve que robar un suéter en la fiesta ayer para poder tapar lo que Richie me hizo en el cuello. Sonrío y me emociono al recordar ayer. No pude dormir cuando llegué a casa, en parte por el dolor de cabeza y en parte por lo que pasó.

Eso y la pregunta que destruyó sueños: ¿Somos algo?

Espero que no. El amor es un lujo que no me quiero dar. No de nuevo.

-¡Charly!- vuelven a gritar. Creo que es afuera de mi ventana.

¡No quiero levantarme! Necesitamos nuestro sueño de belleza.

-¿Y por sueño de belleza te refieres a que tenemos flojera?

Si, algo así. Además son los perdedores, estoy segura de que pueden esperar...